viernes, 31 de octubre de 2008

SALVAJE - CAPITULO 18

Capítulo 18


Roger no pudo hablar por un momento, porque no podía entender la situación de ella parada delante él, una sirena desnuda diciéndole exactamente lo que quería que le hiciera. Cosa que exactamente lo mismo que su propio cuerpo le exigía . Él tomó una respiración profunda para tratar de pensar con claridad y sentido común.
Por Dios! Sólo un instante atrás casi la había llamado por el nombre de Elizabeth. Eso había sido lo que lo había congelado , lo que había impedido que la tomase allí en la orilla del arroyo.
En su mente sabía que no era Elizabeth . Ella era diferente, su sabor, su olor, su boca y su piel. Y lo que había corrido por su sangre no era amor. Él se acostaba con las mujeres por lujuria , y porque ellas le ofrecían lo que él necesitaba.
Pero él amaba a Elizabeth.

Esto no era ni lujuria ni amor. Era una sensación caliente que en verdad no había experimentado en años. Era el tipo de necesidad apremiante que llevaba a un hombre a enterrarse dentro de una mujer sólo porque sentía que era lo natural , no porque ella estuviese disponible o porque fuese una mujer prohibida.

Roger se sentía incapaz de comprender a ese extraño en que se había convertido de repente. Se movió nuevamente hacia el agua para poner más distancia entre ellos. "No puedo hacerte eso ."
"¿Por qué? Tienes una esposa?"
"No," Roger encontró la pregunta irónicamente divertida… y muy femenina . Él contestó con lógica. " Si estuviese casado, no estaría con vos en este arroyo ."

"Mi abuela me ha contado que los ingleses no siempre honran sus votos matrimoniales. Me ha contado que los caballeros ingleses se acostaban con mujeres casadas ".
"Voy a rectificar mis palabras. Si estuviese casado, no debería estar en este arroyo con vos ."
Teleri se quedó perdida en sus pensamientos, luego le dio una mirada directa nuevamente . "Nunca te acostaste con una mujer casada?"
Hasta ahí la conversación era lógica. De repente, la conversación se refería a su moral en el pasado. Un momento atrás estaba perdido en una pasión caliente que lo había sorprendido incluso a él. Ahora estaba observando a esa mujer galesa con nombre lírico y estaba siendo interrogado acerca de con quien se había acostado.
"Lo hiciste ", ella dijo. No hubo sorpresa en su voz, pero hubo censura en su tono, el suficiente como para molestarlo . Era como hablar con su propia madre y tener que contarle toda la verdad.
"No voy a hacer eso con vos ", él dijo, cambiando el rumbo de la charla . "Podría hacerte un hijo."
Ella pareció reflexionar acerca de eso por un minuto o dos. "Me gustaría tener un hijo", ella dijo con voz determinada, y luego añadió más reflexivamente, " El bebé tendría el cabello rojizo."
No sabía por qué estaba sorprendido . Ella decía exactamente lo que se le pasaba por la mente . Era casi como si sus pensamientos pasasen directamente de su cabeza a su boca.

"Ven". Ella abrió sus brazos, de pie delante de él sin toda su bella y atractiva desnudez afectase la incomodidad de la situación. "Me gustaría tener tu hijo." Ella hizo una pausa , luego añadió con total seriedad, "Aunque fuese Inglés."

Dios mío , envía a alguien para que me clave a una cruz, eso sería mucho más fácil que esa situación , Roger pensó. Nadie que lo conociese creería que su respuesta era no. Pero se quedó parado allí contemplando su pasión y sus necesidades. Tomó varias respiraciones profundas, luego miró mas allá de la mujer desnuda , dándose algo de tiempo para pensar.

Ella lo estaba esperando , y Roger supo que no haría lo que ella pedía. Pero él quería hacer . Dios Santo , claro que quería poseerla .

Había cierta ironía en el hecho de que él tenía la reputación de tomar cualquier mujer que se le antojase . Era como si esa muchacha le estuviese cobrando por cada pecado que él había cometido y probablemente por todos los que cometería . Esa muchacha era el Purgatorio.

"Sabes , inglés, siempre he querido tener hijos". Ella no lo miraba ahora, sino que miraba el agua. "Me gustaría tener un varón. Me gustaría enseñarle a no herir a las personas o para hacer cosas que puedan dañar a los animales." Ella lo volvió a mirar . "Mis hijos", ella añadió con una voz determinada y feroz, "nunca arrojarían piedras a las personas o colocarían trampas para cazar animales".
"Los animales son nuestra comida. Piensas que podrías lograr que todo el mundo se alimente con raíces, verduritas y frutas ?"
Su mentón se elevó. "Créeme, Inglés, yo sé muy bien lo que es sobrevivir."
Roger supuso que era verdad, viviendo sola como ella lo hacía. Pero vivir en ese lugar aislado, obviamente, era su elección. Ella elegía mantenerse a distancia de la sociedad.
"Mis hijos nunca colgarían a una persona . Y les voy a enseñar a no hacer cosas crueles".
Esa muchacha galesa de cabello salvaje, una mujer podía extender una mano y domesticara un ciervo con la misma facilidad que podía encender la pasión de un hombre , sería una excelente diplomática.
"Mis hijos van a cambiar el mundo".
Él la miró y pensó en su madre. Su madre había pensado alguna que él iba a cambiar el mundo? El no lo había hecho aún. Oh, era cierto que había ido a Tierra Santa con Merrick y Edward. Ellos habían luchado por ganar el control de algunas ciudades y habían perdido más de lo que hubiesen deseado. Pero incluso si hubieran ganado esas batallas, no habrían cambiado el mundo. Las Cruzada tenían poco de ideal y mucho menos de honor. En verdad no había nada que defender respecto a las Cruzadas.
Una vez que se habían dado cuenta de eso , habían regresado a Inglaterra. Edward se había convertido en rey ; Merrick se había establecido en Glamorgan para custodiar las fronteras entre Gales e Inglaterra , y Roger se había ocupado de las relaciones diplomáticas con Roma y Francia . Mas tarde en la corte inglesa había conocido a Elizabeth , quien había enviudado hacía poco tiempo . O eso era lo que todos habían pensado. El pedido del rey Edward para construir otro castillo en la frontera galess le había llegado poco después de que Hugh Bigod había regresado de Alemania.

Sin embargo, hasta est mismo momento, hasta escuchar las palabras honestas de una muchacha galesa que hablaba con el corazón de lo que quería para sus hijos, Roger nunca había pensado en los deseos de sus propios padres al tener hijos. Nunca había pensado en las razones para tener hijos.

No tenía ni idea de los motivos de su madre para tener hijos, pero estaba seguro de los mitvos de su padre. El Barón Sander FitzAlan sólo había querido tener hijos para poder controlar mas cantidad de tierras, del mismo modo que los terratenientes siempre desean tener mas siervos. Para aumentar su poder.
"Ven a mí", le dijo ella nuevamente .
Roger la miró , tenso ante sus pensamientos respecto a su padre.

Sus brazos estaban extendidos, su piel y sus pechos al descubierto y brillando con el reflejo de la luz plateada de la luna en el agua .
Una parte de él quería ir hacia sus brazos y tomar lo que ella le ofrecía . Había algo en ella que lo calmaba . Y en ese momento le pareció que podía entender por qué los animales del bosque no se sentían amenazados por ella. Ella tenía algo que él necesitaba, no era su cuerpo ni el acto de poder enterrarse profundamente dentro de ella. Era otra cosa, pero Roger no sabía de qué se trataba. Sólo sabía que cualquiera fuese el poder que ella poseyera , era un poder que lo aterraba .
"Ven a mí", ella repitió con una voz que él estaba seguro que era exactamente la voz con que Eva le había entregado la manzana a Adán.

De su boca salió un sonido terrible que era su risa. "Ni siquiera sabes quien soy."

Ella bajó los brazos a los costados . "Hasta hace un momento, no sabías mi nombre. No soy una persona diferente ahora que sabes como me llamo. Sigo siendo la misma Teleri que era cuando estabas por acostarte conmigo."
"Yo no estaba por acostarme con vos ." Roger pasó una mano por su cabello. " No en ese momento."
"Aún así". Ella colocó su mano en sus caderas. "Yo no he cambiado, inglés."

Con ese comentario , simplemente con unas palabras estaban una vez más en veredas opuestas , un muro de ego se había erigido nuevamente entre ellos y ambos estaban chocando sus cabezas como cabras obstinadas.

Ella se encogió de hombros como si nada le importase, y eso le molestó a Roger por una razón que no comprendía.

"No creo que saber tu nombre vaya a hacerme cambiar de opinión", ella dijo. "¿Qué más debo saber? Eres inglés".
Ella le seguí recordando eso.
"Entonces tal vez te gustaría conocer el nombre del hombre al que le acabas de pedir que sea el padre de tu hijo." Aunque él sólo susurró , esas palabras estaban destinadas a humillarla y eran palabras enojadas y crueles.
Ella se puso rígida como si él la hubiera abofeteado .
Entre ambos hubo un silencio obstinado y orgulloso.
Finalmente, ambos rompieron contacto visual y desviaron la mirada .
Teleri se mordió el labio. "¿Quién eres, inglés?"
"Soy Roger FitzAlan de Wells." Y yo soy un egoísta del demonio.

"FitzAlan* ?" Ella levantó una vez más su cara y sus ojos se clavaron en él por un momento. "Tu padre no se casó con tu madre?"

"Ellos están casados . Mi tatarabuelo abuelo era bastardo (* Nota de traducción: Teleri llega a la conclusión de la bastardía por el prefijo del apellido Fitz) . Pero ahora los FitzAlans nunca van a tener un bastardo en la familia. Mi padre no permitiría que una cosa así suceda." Su tono era amargo y lleno rabia, del mismo modo con que le hablaba a su padre.
"No quieres a tu padre?"
"No me gusta mi padre."
Ella miró el agua. "Yo no sé quien fue mi padre."
"Y a mí me gustaría no saberlo ", las palabras salieron de la boca de Roger sin ninguna reflexión.

El cambio en la expresión del rostro de ella lo tomó por sorpresa. Su orgullo se había ido. Ella estaba allí en estado crudo y abierta como un libro para ser leído . La mirada que ella le dio era tan vacía que Roger casi deseó no haber hablado.
Sus hombros se hundieron . "No" Ella sacudió la cabeza lentamente. "Estás equivocado."


Ella fue hacia la orilla entonces, repentinamente se había convertido en una extraña a pesar de lo que había ocurrido entre ellos sólo momentos antes. Ella se puso la camisa que estaba doblada sobre la hierba, y luego se puso el vestido en silencio y recogió la ropa sucia. La apretó contra su pecho y se quedó parada allí, mirando hacia el este , a una alta montaña por encima de las copas de los árboles del bosque.

Después de un rato , ella se volvió y se alejó. Al cruzar el puente, se detuvo . "Realmente eso no es algo que desearías, Roger FitzAlan de Wells", dijo. "Porque yo sólo conozco la mitad de lo que soy."
Teleri tenía cinco años la primera vez que le había preguntado a su abuela sobre su padre. La vieja Gladdys no le había respondido en ese primer momento, sólo se había quedado congelada por la pregunta, y Teleri aun recordaba la mirada perdida y vacía de su abuela en ese momento.

Años más tarde Teleri había llegado a entender esa mirada de la vieja Gladdys , era la mirada de una madre que había perdido a su única hija.
Durante su infancia Teleri sólo sabía que no tenía padre o madre como los niños en la aldea tenía. Había visto a los aldeanos susurrando a sus espaldas. Había visto que algunos de ellos la miraban como si en ella hubiese algo sucio. Algunos incluso se persignaban cuando Teleri estaba cerca. Cuando le preguntó a la vieja Gladdys qué había hecho ella de malo , ella le respondió que nada.

A las cinco años ella no era más grande que un corderito y todavía era demasiado inocente como para saber que era el odio. No lo entendía. Sólo sabía que ella era diferente de los niños de la aldea. Y que ellos no querían estar cerca de ella.

La vieja Gladdys era su abuela y la única persona con alguna respuesta respecto a su padre, pero ella no le contaba nada a Teleri. La abuela sólo se quedaba observando la montaña, el lugar por donde se decía que Annest había desaparecido, y, a veces, hasta le gritaba. Gladdys solía llorar hasta que sus ojos negros se ponían rojo como arándanos de otoño .

Con el tiempo Teleri dejó de pedirle a la vieja Gladdys que le dijera quién era su padre . Pero nunca dejó de preguntárselo. Siendo ya adolescente , un día de sol, Teleri se atrevió a volver a preguntar por su padre . Su abuela miró hacia el este , donde estaba el círculo de piedras del Valle de Brecon .

Gladdys se quedó sentada sobre roca cerca del límite del bosque y se quedó miró fijamente pies pálidos. Se quedó de esa manera, con la cabeza colgando, por mucho tiempo. Fue ese día que sus hombros se encorvaron para siempre . Incluso después de haber hablando con Teleri, incluso después de haber vuelto a Glamorgan, después de muchos años habían pasado, sus hombros nunca mas volvieron a estar rectos nuevamente . A partir de ese día la vieja Gladdys caminaba con un bastón.

Pero en ese día de sol, la Viejo Gladdys le había contado a Teleri sobre su madre . Le relató como Annest había bolsa, el nacimiento era inminente pero ella había ido caminando y tropezando hasta la meseta,.
Annest se había acostado en el círculo de piedras para dar a luz a Teleri. Le había llevado mucho tiempo a Gladdys poder encontrar a su hija, y cuando lo hizo, Annest se había desangrado , empapando con su sangre la tierra en el centro del anillo.
Gladdys le había pasado a Annest su bebé recién nacido y le había hecho exactamente la misma pregunta . Quién era el hombre con quien había engendrado ese bebé?
Annest había tomado una respiración profunda y luego había exhalado hasta vaciar su pecho. "Juré por mi amor a él para nunca decirlo ", ella dijo ella mientras sus ojos se cerraban lentamente.
Gladdys había llorado y le había suplicado que le diese el nombre del hombre.
Annest no había vuelto a abrir sus ojos, pero dijo: "La respuesta está en las piedras."
Luego ella murió.

jueves, 30 de octubre de 2008

SALVAJE - CAPITULO 17

Capítulo 17


El cerdo cayó sentado y gruñó sorprendido. Le dio otra mirada de reproche pero sus orejas se movieron como si la invitase a jugar.
"Casi me ahogas !" Teleri le salpicó el rostro para provocarlo .
"Cerdito tonto ", ella murmuró , luego jugó con él, riéndose y salpicándolo . Él resopló y gruñó y, finalmente se aburrió del juego y comenzó a husmear cerca de la orilla.
Teleri suspiró nuevamente y se puso a flotar sobre su estomago , extendiendo sus brazos a los costados como si fuera un pájaro en vuelo en la superficie del agua.
En poco tiempo , comenzó a sentir frío como si se hubiese levantado viento. Pero no había viento. Teleri posó sus rodillas en el fondo del arroyo, se sentó sobre sus talones y observó a su alrededor.

Un alta y oscura silueta estaba apoyada sobre la muleta cerca del puente. Durante toda esa tarde cada vez que ella lo miraba , sus manos se habían humedecido y su corazón se había acelerado. No sabía por qué. Simplemente sucedía. Él no había dicho nada para hacerla sentir de esa manera, no había dicho nada malo. Pero no era lo que decía, sino lo que no decía lo que la preocupaba.
Teleri no se movió , sólo se quedó arrodillada en el arroyo . "Pensé que estabas comiendo."

"He terminado." Su áspero susurro cortó la quietud de la tarde casi noche. Teleri no podía ver su rostro.

Ella no respondió nada, pues no había nada que decir. Ella esperó que él se retirase . Finalmente, como nada sucedía , ella se frotó los hombros. Sentía un frío extraño que no tenía nada que ver con la frescura del agua y al mirar hacia abajo, vio con sorpresa que las puntas de sus senos se habían erguido y arrugado.
No tenía frío. Instintivamente ella se tocó los pezones y lo oyó lanzar un suspiro . Teleri se sintió agradecida por la oscuridad, pues él no podía ver su cara.
Pero en ese momento llegó la luna apareciendo por encima de las copas de los árboles . Teleri no sacó su vista fuera de la sombra de él. Se quedó sentada en el agua consciente de cada respiración que daba , consciente de un zumbido que le recorría el cuerpo como si fuera un enjambre de abejas, y consciente por primera vez en toda su vida de cuan sonoro y palpable podía ser el silencio.
"Estoy bañándome ", ella dijo.
Su respuesta fue lenta. “ Si . Vos y todos los demás."
"Al cerdo le gusta el agua", ella dijo a modo de disculpa.
Cuando el Inglés hacía pausa antes de hablar , como en ese momento, ella no sabía si era debido al dolor de garganta o porque realmente no tenía nada que decir.
A veces uno hace una pausa porque intenta en pensar en algo . Pero a veces uno hace una pausa porque quiere elegir cuidadosamente sus palabras, para ocultar lo que realmente está pensando.
En la oscuridad, ella no podía leer su rostro . Con sólo el áspero susurro de una voz, no podía captar que sentimiento había detrás de las palabras.
Ciertamente, podía sentir que el inglés la observaba .
Teleri esperó que él se retirase, algo que claramente no iba a suceder.
EL estaba apoyado sobre la muleta y se quitaba la camisa por la cabeza.
"¿Qué estás haciendo?"
"Lo mismo que vos.".
El lanzó su túnica al agua . "No puedo soportar mi propio olor ni un segundo más . Tu cerdo huele mejor que yo ."

"Mi cerdo es limpio. Le gusta mucho el agua ." Ella se dio vuelta justo cuando el cerdo se acercó a la orillas pero luego se marchó trotando detrás del Caballo. Cerdo traidor.
En posición de sentada Teleri fue desplazándose hasta la orilla opuesta, poniendo distancia entre ellos . Una distancia que extrañamente parecía ser distancia en lo absoluto.

Ese fue e momento que media luna eligió para deslizarse desde detrás de las copas de los árboles. La luz de la luna cayó sobre él, iluminando únicamente la mitad de su cuerpo .
Pero la mitad de ese hombre era suficiente. Teleri sentía una fuerte opresión en su bajo vientre , como si de alguna manera esa zona estuviese unida por cuerda mágica a las puntas de sus pechos. Su mano se apoyó sobre su vientre . Era como vivir dentro del cuerpo de una desconocida.
Desplazándose ligeramente, ella lo miró nuevamente , y lo miró como si lo viese por primera vez. Su pecho era ancho y estaba cubierto por vello rizado, como el vello que había entre sus piernas.
Por haberlo bañado cuando su fiebre era alta , ella sabía perfectamente que ese vello era rojizo. Sabía que ese era el mismo color del vello en su ingle , en sus brazos y sus piernas. El mismo color del pelaje de un zorro en primavera.
Teleri estaba incómoda e inquieta , y apoyó sus brazos cerca del pasto en la orilla. La luna pareció brillar con mas fuerza, y ella vio sus manos desatar los lazos de su ropa interior .
Entonces la cosa más extraña sucedió: Teleri se olvidó de respirar.
Él la estaba observando con una expresión que ella no podía leer con claridad. Pero su corazón comenzó a latir velozmente como lo hacía cuando él estaba cerca . Antes ella había pensado que la aceleración de su corazón se debía al miedo, pero no podía ser así, porque ella sabía que no sentía miedo de él.
Cuando finalmente recuperó el aliento, Teleri se dio cuenta que su respiración era corta y rápida. Tenía que tomar dos o tres inhalaciones pequeñas a la vez, como si hubiese estado corriendo por un largo tiempo.

Pero con todas esas reacciones extrañas, con todas las sensaciones que la invadían , no había nada en el mundo en ese momento quela hubiese podido convencer de sacar su mirada de él. No entendía por qué, pero tenía la necesidad de mirarlo .
Ella ya lo había visto con poca ropa, le había lavado su cuerpo febril y lo ayudado con sus funciones fisiológicas. Había tenido el miembro de ese hombre en la palma de su mano .
Pero eso no era lo mismo. En ese momento ella no había pensado en él con esa sensación... ese vértigo que dominaba su cuerpo . Ni su corazón había latido frenéticamente. Ni había sentido su sangre calentarse de esa manera . Sólo había hecho lo necesario para ayudar a un hombre que estaba medio muerto, alguien a quien ella estaba intentando salvar. Alguien que no conocía y con quien nunca había hablado .

Él se sacó los pantalones de una pierna mientras aún estaba apoyado en la muleta, luego liberó la otra pierna y lanzó los pantalones al agua.
Teleri lo vio caer y unirse a la camisa, que flotaba a la deriva deslizándose suavemente contra su cuerpo.
Ahora estaba parado delante de ella , iluminado por la tenue luz de la luna, sólo vestido con un taparrabos de cuero . Ese hombre no estaba medio muerto, ella observó , estaba muy vivo. Y Teleri fue consciente cuán grande era.
Niña tonta … Él no era tan alto como los árboles del bosque que rodeaban la cabaña . El no tan grande como el viejo roble.
Pero de alguna manera parecía muy grande.
Teleri podía sentir sus ojos clavados en ella, podía oír su respiración debido al silencio de la noche.

Ni siquiera los grillos cantaban. Es como si toda la naturaleza la hubiera abandonado . Incluso el agua todavía estaba quieta y no había viento en el aire.
En el silencio nocturno no había ningún sonido. Pero había algo más que sonidos, algo que Teleri sintió intensamente, una estado de expectativa y anticipación , como si todo el mundo de repente estuviese conteniendo el aliento y esperando algo .

Él entró en el agua hasta que esta cubrió sus caderas. No tomó la muleta que había dejado en la orilla . Levantó sus brazos y se lanzó al agua y apareció delante de ella.
Ella se alejó de la orilla y sumergiéndose en el agua como él había hecho. Pero Roger nadó sobre la superficie y llegó a la orilla opuesta del arroyo antes que ella emergiese . Teleri se puso de pie y se dio vuelta, sólo para encontrarlo a su lado , observándola y sonriéndole .
Ella le sonrió dulcemente, como si no estuviese sorprendida por ese truco, luego se hundió en el agua un poco de modo que sus rodillas rozaron el costado su muslo.
Roger miró su muslo .
Ella se rió y le lanzó agua con sus manos, y luego se alejó. Ella también tenía sus propios trucos.
Pero Roger se movió con tanta rapidez que no le dio la oportunidad de pensar. Fue hacia ella. Teleri sólo tuvo tiempo suficiente para tomar un poco de aire antes que su brazo la enlazara . Roger la arrastró con él hasta el fondo del arroyo, su cuerpo pegado al suyo. Teleri no se resistió , dejó llevar hacia abajo, y luego dejó que el agua la hiciese ascender a la superficie .



Las manos de Roger se apoderaron de su cintura y la sacaron del agua, recostando su espalda contra la orilla . Todo sucedió tan rápidamente que ella sólo se agarró a sus hombros, luego parpadeó las gotitas de agua de sus pestañas y la borrosa cara masculina quedó clara.
Él no estaba sonriendo. Él estaba mirando su boca, luego su mirada se dirigió a su ojo hinchado . Y antes que ella pudiera decir algo para repelerlo , Roger levantó su mentón y tocó el ojo magullado con su boca, tan suavemente que ella apenas sintió el roce de sus labios. Teleri tomó aire y se quedó congelada . Roger miró hacia abajo esa vez, y luego tocó su boca con sus labios, tan suavemente como había besado su ojo.

Los únicos hombres que Teleri conocía eran los de la aldea y nunca le habían parecido suaves. Los muchachos le lanzaban piedras mientras gritaban su nombre. Ningún hombre nunca la había tratado de ese modo. Ella no sabía que un hombre podía tener bondad en el contacto físico . Y nunca hubiese esperado suavidad de un hombre de guerra, de un caballero del rey .
Roger tomó cara entre sus grandes manos e inclinó su cabeza de modo que sus labios y sus narices se rozaron . Él lamió el borde de su boca diciéndole que quería más. Y cuando ella separó los labios, su lengua se hundió profundamente dentro de su boca, llenándola . La retiró para leugo enlazar su lengua con la de ella , ese acto envió un torrente de sangre caliente y palpitante a sus senos y su ingle .
Era una sensación exquisita y ella no podía detener ese beso , pero colocó sus manos sobre el pecho masculino para evitar que su piel rozase sus pezones tensos, porque estaba segura de que eso la volvería loca.
Teleri gimió contra su boca y sus labios se separaron de los suyos. Roger la colocó mas arriba de modo que pudiese tomar todo su pecho en su boca y estimular su pezón con su lengua y sus dientes. Teleri jadeó y su cabeza cayó nuevamente sobre el pasto de la orilla.
En el mismo momento él deslizó un dedo dentro de ella.
Ella dio un pequeño grito.
" Qué carajo ... " Él se detuvo. Ella lo escuchó murmurar entre dientes , como si estuviera masticando cada palabra. Él maldijo en su media voz.
Teleri abrió sus ojos perezosos y vio su perfil a la luz de la luna.
El inglés la miraba fijamente y extrañada, como si de repente a ella le hubiesen crecido cuernos. " Dios del cielo , qué estoy intentando hacerte ?"

Teleri tenía una buena idea de lo que él le estaba haciendo. Y si le pedía su opinión , ella desearía que le hiciera eso toda la noche. "Nos estabamos por aparear ." Ella intentó empujar su cara hacia la de ella .
Antes de que ella pudiera besarlo Roger dijo, "Ni siquiera sé su nombre."
"Teleri".
Él se alejó de ella y se pasó una mano por el cabello. "Es así como te pago por haberme salvado la vida?"
Teleri consideraba que una buena recompensa. Mejor que cualquiera que hubiera podido imaginar . Pero él parecía estar enojado. Ella no entendía por qué.
El miró la oscuridad y susurró, "¿Qué soy ?"
"Maravilloso", ella respondió.
Él dio vuelta su cabeza y frunció el ceño .
"Tus manos son maravillosas, inglés. Me gusta el modo en que me tocas."
Él maldijo.
Ella sabía lo que significaba ese insulto en particular . Se trataba de un viejo vocablo sajón que hacía referencia al acoplamiento .
Entonces Teleri lo miró directamente a los ojos y le dijo exactamente lo que quería hacer con él.

miércoles, 29 de octubre de 2008

SALVAJE - CAAPITULO 16

Capítulo 16


Roger mejoró su habilidad en el uso de la muleta y ahora ya podía hacer algo mas que caminar con ella, podía moverse con rapidez. También descubrió que el tobillo hinchado no le causaba ni la mitad de los problemas que le causaban los pies descalzos . Si había una piedra en cualquier lugar cercano, el pie descalzo de Roger la encontraba.
Para el momento en que abandonó el patio para seguir el delicioso aroma a comida procedente del interior de la cabaña, las plantas de sus pies estaban absolutamente dañadas.

Pero tanta era su hambre que todo lo que importó fue sentarse en un banco y comer el guiso de verduras sazonado con cebollas , ajo, hierbas aromáticas y pétalos de flores. Probó ser un plato tan bueno como las comidas servidas en la mesa de la reina .

No había vino en esa comida. No había carne. Ni pan. Ni diversos platos. Ni utensilios de plata o de peltre. Ellos comieron de la fuente de madera , utilizando tenedores y cucharas hechos con varitas de mimbre .

Pero el aroma de la comida era tan rico que podría detener el avance de un ejército . Después de sólo un bocado Roger encontró que su sabor es tan exquisito como el aroma. No había pensado que un plato de verdura podría ser tan sabroso.

El repollo no era amargo . Los nabos estaban condimentados por el rico sabor de las hierbas aromáticas. Los hongos mezclados con cebolla ajo por un breve momento parecía carne de cordero o de vacas. Y las zanahorias? Eran tan dulces que habría cambiado su propio caballo por un kilo de esas zanahorias.
Esa comida sólida y caliente le hizo increíblemente a su estomago vacío. En verdad, el guiso podría haber estado seco , medio podrido o medio quemado y a él no le había importado , porque su hambre era tan grande que podría haberse comido un caballo.
Desafortunadamente, no tuvo mejor idea que decir esta última frase en voz alta.
La cuchara de ella se detuvo en el aire, Teleri lo miró por primera vez desde que había colocado la fuente de comida .
"Comerte un caballo?" Una mirada de horror llenó su cara. Teleri tragó en seco y perdió todo el color de sus mejillas. De repente su piel estaba mas pálida que la pequeña cantidad de sal que había colocado en la media cáscara de una nuez . "Ustedes los ingleses comen caballos?"
Roger tuvo una repentina visión de ellas huyendo de la mesa, saltando por la ventana abierta y corriendo para ocultar al caballo árabe en el bosque antes que él pudiera comérselo.
"No , no comemos caballos".
Ella exhaló aliviada , pero frunció el ceño.

"Es sólo un comentario , una manera de decir que uno tiene mucha hambre. De hecho, uno tendría que tener mucha hambre para comerse un caballo entero".
Ella lo miró fijamente, sin decir nada.
Él tomó un bocado y añadió: "El árabe está seguro."

Ella lo miró entonces, su expresión diciéndole silenciosamente que encontraba horrible esa elección de palabras.

Ambos comieron en silencio, un silencio que pareció extenderse por mucho tiempo .
Se le ocurrió a Roger entonces, que entre dos , no se podía hablar sin que uno ofendiese al otro . Viniendo de una familia con muchas mujeres, Roger estaba acostumbrado a seducir fácilmente a la mayoría de las mujeres . No le caía bien que esa joven pudiese hacerlo sentir como un idiota .

Después de unos minutos ella finalmente habló . "¿Por qué llamas árabe al Caballo '?"
"Porque ese caballo vino de tierras árabes en Oriente." Roger tomó una cucharada de guiso, luego apoyó sus brazos sobre la mesa y miró el tazón vacío, sorprendido de que su comida se hubiese acabado con tanta rapidez.
"Estás mirando el tazón vacío con una mirada hambrienta . Deseas comer más."
Él lanzó un vistazo rápido a su tazón, y luego a su anfitriona .

Sin una palabra ella se puso de pie y tomó el tazón vacío , luego fue hacia la olla calentándose sobre el fuego . Mientras ella estaba inclinada sobre la olla, dijo, "Sólo tienes que pedir, Inglés. Yo no te salvé la vida, para luego hacerte padecer hambre."

Ella podría ser galesa, pero era ante todo una mujer . Era evidente que ella nunca le iba a permitir olvidarse de su deuda. Se la recordaba casi tan frecuentemente como le recordaba que él le había dado su palabra de honor. No era la primera vez y probablemente no sería la última vez en su vida en que Roger se preguntaba por qué las mujeres creían que un hombre no tiene memoria.
Él miró alrededor de la cabaña y vio lo que había visto antes. Estaba limpia, pero ella poseía tan pocas cosas. En verdad Roger suponía que ella no tenía más comida y no quería comer su ración mas la de ella.
Pero optó por no mencionar su error, aunque ella parecía decidida a azotarlo con palabras fuertes. Sus palabras venían de un orgullo que él entendía.
Y orgullosa como era ella , vivía en la pobreza . No la había visto cambiarse de ropa. Había barro en su vestido y no usaba zapatos, ni siquiera zuecos de madera que era un calzado común en granjera. Ella no tenía ninguna comodidad en esa cabaña , ni siquiera una chimenea, pero ese ambiente tenía una calidez que no procedía solamente del débil fuego encendido en un hoyo en el centro del cuarto.

Teleri se volvió y caminó hacia él con sus pies sucios y descalzos , luego, colocó un plato lleno con el estofado humeante delante de él. Roger había devorado tres bocados antes que ella se sentase en el taburete frente a él. Teleri colocó su codo sobre la mesa y apoyó la mejilla en la mano. Luego lo observó comer.
Después de un momento, ella dijo, " Cuéntame sobre mi caballo."
"Ese caballo", Roger hizo sonar la cuchara para enfatizar las palabras roncas, "pertenece a Merrick de Beaucourt, el conde de Glamorgan".
Ella se puso rígida y sus hombros se enderezaron inmediatamente . Roger pudo ver en su cara el reconocimiento de que ella había robado el caballo de alguien que tenía el poder de mandarla a matar.

Ella le dio una mirada aguda . "Yo no robé el Caballo. Piensas que lo hice , pero no es así." Ella hizo pausa. "Él no es tu caballo, entonces?"
Roger negó con la cabeza.
"Pero me perseguiste por el caballo ?"
“ Si ".
"Debe haber una recompensa por devolverlo."
"No"
"Entonces quizás la recompensa es por entregar mi cabeza en una bandeja."
"No Merrick no quiere dañar a una mujer más que yo. El te castigará por el robo, pero no será tan cruel".
"No hubo ningún robo".
"El caballo no es tuyo."
"He oído hablar del conde Merrick."
Roger notó que ella había cambiado de tema. "Entonces debes haber escuchado que es un lord justo y le devolverás el caballo ."
" Y Cómo podía saber yo que el caballo era suyo ?"
"Muy probablemente encontraste ese animal en las tierras de Merrick." Roger levantó una mano para tranquilizarla cuando ella abrió la boca para discutir . "Entiendo que has cuidado del caballo y que lo quieres. Pero ese caballo Árabe es el mejor equino que he visto en mi vida . Su raza viene de Tierra Santa, donde los caballos tienen que ser pequeños , rápidos y con mucha resistencia. " Roger comió un poco más, luego levantó la vista . " Vos has cabalgado ese caballo. Sabes de qué hablo."

Ella no dijo nada, pero él pudo ver el dolor en su expresión, algo que ella intentó esconder pero no pudo.
"El conde Merrick recibió ese caballo como un regalo por haber salvado la vida de un líder Marionita cuando estuvimos en Tierra Santa, con el rey Edward ." El se detuvo con la cuchara cerca de su boca. "Ojalá hubiera sido yo quien hubiese salvado al jeque, pues desde el momento en que vi ese caballo lo he deseado como nunca había deseado algo en mi vida ." El masticó el guiso.

"Merrick lo sabe . He estado intentando ablandar su corazón durante dos años." Él la miró a los ojos. "Acababa de convencerlo de venderme el caballo cuando vos apareciste y te lo robaste".
"No me robé el caballo!"
"No lo robaste?" No hacía falta un profeta para revelar que él no le creía.
"No" Ella sacudió la cabeza rotundamente.
" Te escapaste muy rápido en Glamorgan, en el momento en que casi te capturé".

"Yo no robé el Caballo. Pero si es cierto que me escapé ese día. Era una mujer sola contra un caballero con armadura persiguiéndome y sus tropas no muy lejos de ahí ." Ella elevó el mentón en el aire y dijo con sarcasmo . "Perdóname por no haber quedado quieta para que me alcanzaras y me atraparas."

Para alguien que había mostrado miedo unos segundos antes , ella ciertamente no parecía alguien temeroso ahora. Ella lo estaba mirando directo a los ojos y le decía todo lo que se le antojaba . Roger no está seguro de cómo se sentía al respecto, aunque probablemente debería sentirse molesto.
Sus ojos se estrecharon y ella agregó irónicamente , "¡Qué lástima que ese río se haya interpuesto en tu camino, inglés."

Ella se le había escapado en esa oportunidad y ella se estaba burlando de su fracaso . Roger supo que debía hacer algo para hacerle saber que eso no era divertido.

Pero ,en realidad, era divertido. Roger se encontraba muy divertido con su atrevimiento . No era un recuerdo agradable para un hombre que había participado de tantas guerras terminar despatarrado en un río, indefenso y ahogándose por el peso de su armadura . Pero imaginándose la escena desde otro punto de vista, Roger supuso que era divertido. "Me hundí como una piedra y casi me muero ahogado ."
", ¿ En Verdad?" Ella no sonó apenado en lo mas mínimo .
"Si casi me ahogo persiguiendo a un ladrona de caballos".
"Yo no robé el caballo".
"Supongo que ese caballo es como una mascota que simplemente te siguió desde su hogar en Glamorgan hasta esta cabaña".
"Estás más cerca de la verdad de lo que crees ."
Roger no le creía . Un caballo no era una mascota como un perro , un gato o el cerdo que parecía seguirla a todos lados . Roger esperaba que ella admitiese la verdad . Pero esa muchacha terca parecía determinada a permanecer en silencio hasta Navidad. "Dime cómo el caballo árabe te siguió hasta tu casa."

Ella tomó un largo aliento y se acomodó en el taburete, luego cruzó sus brazos sobre su pecho y lo miró fijamente. "No estoy segura si debo contarte".
Jesús ! Ella era arrogante y terca como la madre del Rey Edward.
"No tengo por que contarte nada."
"No No. Simplemente deseo saber como robaste el caballo."
Ella suspiró. "Esto debe ser lo que los ingleses llaman intereses contradictorios ."
"No ' Esto es lo que los galeses llaman obstinación."
Ella lanzó una pequeña carcajada, diciéndole sin palabras que ella consideraba que la obstinación era un atributo muy valioso . Teleri tomó una respiración profunda y comenzó: "Cuando me encontré con el caballo , él estaba tomando agua en el río."
"¿Qué río?"
" El río Neath."
Neath estaba a millas de distancia de los bosques de Camrose. Roger la estudió buscando indicios de una mentira, pero no fue astucia lo que vio en sus ojos o en su cara . Ella no era una mentirosa. Ella era honesta , brutalmente honesta . El pensó acerca de las posibilidades por un momento. No era imposible. El caballo podría haber corrido hasta el río Neath.

"Me encontraba en el margen opuesto del río y lo miré. Me sentí admirada porque nunca antes había visto un animal tan fino. El me miró por un breve instante, luego sus piernas parecieron ceder , y se derrumbó en el lecho del río ". Ella le devolvió su mirada fija . " Fue como si alguien le hubiese golpeado las piernas ."
Teleri miró fijamente la mesa, mientras distraídamente jugaba con una astilla . Su voz se hizo grave cuando susurró estas palabras. " Crucé el río y fui hacia él."
Su mentón se elevó , tenía los ojos húmedos . "El caballo tenía dos flechas clavadas en el cuello."
Esa vez Roger contuvo la respiración en su pecho. La historia había dado un vuelco .
"Flechas inglesas?"
"No , galesas", ella admitió tranquilamente. " El caballo estaba cubierto con una especie de tinta negro que olía a savia de nuez, habían usado ese tinte para ocultar la marca blanca de su cabeza y el blanco de sus patas. Le saqué las flechas y limpié sus heridas en el río. Cuando vi las marcas blancas supe que alguien lo había tratado de ocultar. No hay razón para ocultar las marcas de un caballo a menos que sea un animal robado . "

Roger recordaba ese día muy bien. "Él no fue robado. La prometida del conde Merrick, Lady Clio, había usado el caballo para escapar del Castillo Camrose , desobedeciendo las órdenes del conde . Ella misma había pintado el caballo , para que los guardias de los portones no lo reconocieran ".
Ella se mordió el labio y no dijo nada, pero Roger podía leer sus pensamientos.
" Merrick descubrió que ella había abandonado el castillo sin su protección."
"Quizás ella tenía motivos para dejar a su prometido".
"No había una razón, salvo que él le había prohibido salir del castillo sola ".
" Pero suena como si ella hubiera estado encerrada en el castillo."
"No es así " Roger la miró exasperado, y simplemente dijo, "Él sólo le dijo que no podía salir de la casa sola ."
Teleri suspiró . "Es lo mismo ."
"No, no lo es . Había habido ataques de galeses en esa zona."

"Los “ataques” suceden después que ustedes los ingleses llegan y construyen sus castillos en tierras que no les pertenecen ."
"Las tierras pertenecen al Rey Edward de Inglaterra ", él le recordó . "Pero eso no importa ahora , el hecho es que los bosques no son seguros."
"No me gustaría tener a un hombre a mi lado que me diga que no puedo ir al bosque."

Roger evaluó la posibilidad de salir de la cabaña y golpearse la cabeza contra la pared varias veces. Sería mucho más simple y menos dolorosa que sostener esa conversación.
Contó hasta cien en latín y en árabe, y luego esperó hasta que ella lo mirase nuevamente . "Lady Clio es una buena mujer, pero es cabeza dura y no le gusta que le digan lo que puede y no puede hacer. Un defecto que tiene la mayoría de las mujeres. "
Teleri frunció la frente y abrió la boca para hablar.

"Una vez que ella entró en el bosque", Roger continuó rápidamente ", fue atacado por forajidos. La suerte estuvo de su lado porque nosotros estabamos cabalgando de vuelta hacia Camrose, en ese mismo momento. Merrick la rescató y mató a los forajidos, pero no sin que antes Lady Clio recibiese una flecha en el hombro. "

Ella lo estaba mirando atentamente ahora, y no parecía desear hacer uso de la palabra, lo que era bueno, pues demostraba alguna señal de sentido común en ella. Roger bajó la vista y vio su tazón nuevamente vacío.
Ella lo estaba observando ahora, por lo que él alzó el tazón. "Todavía tengo hambre."
Teleri se puso de pie, lo miró de arriba a abajo. "¿ Dónde pones toda la comida?"
" Yo soy alto . Vos misma lo has dicho ."
Ella sacudió la cabeza y caminó hacia la olla .
Él puso las palmas de sus manos sobre la superficie de la mesa y enderezó sus hombros. "Dos tazones de este guiso sólo me llenan hasta mis rodillas", Roger dijo no con poca arrogancia.
Ella murmuró algo sobre llenarle la boca y tomó el delantal con las dos manos para usarlo para agarrar las manijas de la olla .

Antes que Roger pudiera ver que iba a hacer , ella desenganchó la olla de hierro y la llevó hacia él. Con un golpe seco la colocó sobre la mesa.
Arrojó el delantal y dio un paso atrás. "Ahí tienes !" Ella tomó su cuchara y la arrojó dentro de la olla. Luego plantó las manos en sus caderas. " Ahora puedes llenarte hasta que la comida se te escape por el culo , inglés."

Mientras él comía , comía y comía, Teleri salió fuera y fue hacia el arroyo, llevaba una camisa y un vestido limpio en su brazo . Pasó corriendo el puente, y fue a un pequeño sector privada donde el arroyo se ampliaba formando una piscina que ella utiliza para bañarse . Se quitó la ropa, sus ojos observaron el parpadeo de la luz procedente de la ventana de la cabaña. Pensó que hasta que él comiese hasta el fondo de la olla tendría mucho tiempo para bañarse.

La única persona que había visto comer tanto era al Hermano Dismas, el beso fraile que solía comer comidas de cinco platos como si realmente se tratara de la “Última Cena”. El fraile era la víctima favorita de las bromas de su abuela . Supersticioso en extremo , el hermanos Dismas siempre estaba persignándose y rezando [ara que la vieja Gladdys no se le acercase. Gladdys se divertía mucho molestándolo . Le encantaba hacerle bromas aprovechándose de sus temores y supersticiones, solía guiñarle el ojo como su estuviera haciéndole un mal de ojo y le murmuraba falsas maldiciones en galés que él no podía comprender.
La otra persona a la cual su abuela gozaba provocando era un tonto , guapo y arrogante caballero que era uno de los solteros favoritos entre las damas de la corte inglesa. La vieja Gladdys le había contado una maravillosa anécdota en la cual ella maliciosamente le había robado toda la ropa al caballero y lo había dejo a pie desnudo en el camino de vuelta al Castillo de Camrose .

Teleri se estremeció ligeramente, no por el frío del aire, sino por lo que el Inglés le había contado sobre el caballo. Ella tenía el caballo árabe del conde Merrick. Si lo hubiera sabido antes , le habría llevado el caballo al castillo .
Teleri suspiró cuando llegó al centro de la piscina. Estaban a finales del verano y el nivel de profundidad del agua apenas era suficiente para cubrir su cuerpo . Teleri se sentó y observó a la distancia, sentía una opresión en el estómago.
No quería devolver el Caballo. Lo amaba. Ya era como parte de su familia . Pero Lord Merrick había sido bueno con su abuela a lo largo de esos años. Eso le había dicho la vieja Gladdys . Y ella nunca había insinuado o dicho abiertamente que el caballo perteneciese a Camrose.
Pero Teleri conocía a la vieja Gladdys. Su abuela era suficientemente astuta como para guardar silencio si tenía un motivo . O quizás ella no pudo reconocer al caballo. Ella sabía cuanto Teleri lo amaba. Ella la había ayudado a curarlo . Seguramente Gladdys no sabía que pertenecía al conde Merrick.
Teleri silbó suavemente y en un minuto el caballo se acercó a la costa y se metió en el agua. El animal bebía y la miraba dulcemente . Teleri extendió el brazo y le acarició el hocico . "Eres un muchacho bueno y guapo , caballo. Eres mío, ¿verdad?"
Ella le besó el hocico , y él se frotó suavemente . Él era como su hijo, un gran niño que era cuatro veces el tamaño de su madres. Pero a ella
no le importaba .

El caballo sacudió su cabeza y v la salpicó. Teleri se rió y le devolvió el salpicón. Pero pronto el animal se aburrió con ese juego. Volvió nuevamente la costa , luego comenzó a comer hierba, sin tener idea de la culpa que Teleri sentía.
Ella se recostó en el agua y sumergió el cabello . Su cuerpo se relajó mientras flotaba en las aguas tranquilas.
Pero un segundo más tarde escuchó un sonido y abrió los ojos , miró la otra orilla en la zona cercana al puente.
Una gran figura negra iba hacia ella.
Teleri chilló .

Salpicando agua por todas partes, su peso cayó encima de ella y la envió directamente al fondo del arroyo, la mantuvo apretada contras las piedras duras del lecho .


Teleri pataleó y forcejeó contra él mientras el aire se escapaba de su boca en burbujas. Ella logró meter sus brazos entre los dos cuerpos y lo empujó con tanta fuerza como pudo.
Él gruñó y perdió el equilibrio.
Un instante más tarde ella logró librarse.
Teleri se sentó rápidamente la parte baja del agua, su cabeza asomando en la superficie. Ella jadeó , tosió y escupió , luego se echó hacia tras con sus manos apoyadas en el lecho rocosa mientras lo miraba ferozmente.
Él estaba sentado a su lado, sus ojos bien abiertos e inocentes, como si no hubiera intentado ahogarla. Antes de que él pudiera entender que se proponía ella , Teleri puso sus pies hacia delante , sobre su pecho y empujó con tanta fuerza como pudo.

martes, 28 de octubre de 2008

SALVAJE - CAPITULO 15

Capítulo 15

Roger vio caer su boca abierta y su mirada clavada en él . Teleri sacudió la cabeza.
"Puedes hablar."
"Tengo el honor de poder susurrar." Él mantuvo su mano extendida,
esperando que le diese el hilo .
Teleri comenzó a pasarle el hilo , pero se detuvo de repente cuando su mano se acercó a la suya.
"No voy a ahorcarte ."
El mentón de Roger se elevó. "Por supuesto que no. Nunca pensé que lo harías." Ella le entregó el hilo .
Ambos sabían que era exactamente lo que ella había estado pensando. Pero él entendía lo que era el orgullo y no iba a herir el suyo .
"¿Te duele?"
"¿Qué?"
"Cuando hablas. ¿ Te duele la garganta?"
"No" Él llegó a la viga sin mucho problema y ató el hilo a la clavija .
En ese momento entró el cerdo, con el hocico pegado al suelo, olisqueando la tierra , y luego trotó buscando las faldas de Teleri .
"Fuera, cerdo !" Ella sacudió su falda . "No hay nada aquí para comer."
El cerdo la miró como hubiese entendido muy bien lo que le había dicho , luego se volvió y se quedó parado en el cuarto .

"Fuera te dije ." Teleri señaló la puerta abierta.
El cerdo levantó sus ojos y la miró , luego gruñó sonaba en protesta, y fue hacia la puerta lentamente. Pero no sin antes detenerse y mirarla nuevamente con ojos. tristes

Ella levantó un dedo y le señaló la puerta y el cerdo salió .
La muchacha era un poco extraña , vivía aquí en el bosque, sola, con lla única compañía de los animales que actuaban como sus hijos.

Ella lo siguió mientras él se movía , pero notó que se mantenía a unos metros de distancia , y lo miraba con ojos cautelosos.

"Me gustaría poder llegar hasta esas vigas", ella dijo . Luego suspiró, como sus hermanas lo hacían cuando estaban hablando de un sueño o un deseo. "Siempre he querido ser alta. Como las doncellas guerreras de antaño."
"Así podrías usar cota de malla y …" Roger se detuvo , tragó para humedecer su garganta seca , y luego agregó, "… manejar una espada?"
"No, no quiero hacerle daño a nadie."

Él pensó en recordarle la horqueta que había sacudido delante de su nariz, pero decidió no hacerlo. Ello implicaría usar un razonamiento lógico . Y Roger tenía hermanas. Y sabía que eso era imposible . Además, no había nada de razonable en una mujer que lo amenazaba con un horqueta.

"Me gustaría poder llegar a lo alto de los arbustos para agarrar bayas y no tener que estar subiéndome a una pila de piedras. No puedes imaginarte cuantas veces me he caído de los arbustos . Las mejores fruta crecen en los lugares más cercanos a la luz del sol, ya sabes. "
Roger se encontró imaginándose las caídas de los arbustos, esa muchacha menuda con toda su bravura y su corazón compasivo .

"Si yo fuera alta, tendría brazos suficientemente largos como para peinarme sin tener que retorcerme." Ella agarró un puñado de su cabello , miró las puntas despeinadas y frunció el ceño . Luego miró la pared enfrente suyo . "Podría alcanzar esos estantes altos . Los de allá" Teleri se volvió nuevamente hacia él. "Y podría cabalgar con mayor rapidez."
Por lo que él recordaba , ella había conseguido cabalgar al árabe con bastante rapidez . "Tu tamaño es el tamaño apropiado para una mujer ".
" Eso es muy fácil de decir. Vos sos alto."
"Yo soy un hombre".

Ella lo miró y frunció el ceño . "¿Qué ley de la naturaleza establece que la mujer debe ser menuda y baja ?"
"La misma ley que creó al hombre más alto."

Ella ya no estaba serena y pacificadora . La guerrera había vuelto a ella. Su mentón se elevó . "¿Y por qué los hombres deberían ser más altos?"
"Para proteger a las mujeres. Un hombre bajo no podría proteger a una mujer gigante".
Ella plantó sus manos en sus caderas y resopló . "Ella podría protegerse a sí misma."
"Pero entonces , qué haríamos nosotros los caballeros sin mujeres o tierras por las cuales pelear ?"
"Ustedes todavía tendrían sus tierras."
"Si, pero es mucho más divertido pelear por una mujer." Su voz se hizo ronca cuando dijo la palabra "mujer".
Hubo lapso de silencio. Roger podía que ella lo estudiaba , que exploraba sus ojos.
" Estás bromeando , Inglés." Ella parecía sorprendida, como si de repente fuese consciente de que él la había estado provocando . Luego ella sonrió. Con esa sonrisa, sus mejillas se pusieron rosadas.
Fue como un puñetazo en su estomago . Dios Santo , qué sonrisa que tenía. Roger se quedó congelado . Si hubiera tenido voz, la habría perdido en ese instante.
La observó fijamente hasta que su sonrisa se desvaneció y ella pareció ponerse incómoda. Ella alzó su mano y se tocó el ojo hinchado , y luego intentó ocultar el dolor que eso le causó.
El señaló su ojo. "¿Cómo te hiciste eso ?"
"Cuando vos estabas inconsciente . Tenías fiebre , estabas agitado y lanzabas puñetazos para todos lados . Y yo no corrí mi cabeza a tiempo ."
"Yo te golpeé?"
“ Si ".
Su ojo estaba horriblemente hinchada y azulado. "Lo siento".
Ella encogió los hombros , como si no sintiese dolor, lo cual era imposible. Cuando Roger sólo continuó mirándola y sin decir nada hasta , ella habló. "Esa fue la razón por la que tuve que atarte ."
De repente Teleri se sintió muy pequeña. Él alzó la mano y tocó suavemente la marca azul en su ojo . "Nunca le he levantado la mano a una mujer."
"Nunca?"
Él sacudió la cabeza. "Nunca". No me extraña que me hayas amenazado con una horqueta. "

"Sentía miedo de vos ". Ella evitó sus ojos después de admitir eso , se mordió el labio inferior durante un segundo.
Roger movió su mano lentamente por su mejilla y le tocó los labios con un dedo.
Ella retrocedió rápidamente, frunciendo el ceño .
"Tienes un pedazo de hilo pegado al lado de la boca ".
Teleri se frotó las boca.
"¿ Todavía tienes miedo de mí?"
"No ."
Tal vez deberías sentir miedo , él pensó , mirando a su boca nuevamente . Ah, brujita galesa , deberías salir corriendo , y correr muy lejos de mí.
Roger miró las vigas por encima de ellos, porque no le gustaba lo que estaba sintiendo.
Un momento después su mirada encontró la suya y él se dio cuenta que ella lo había estado observando .
"No me respondiste."
"¿Qué?"
"¿Cuándo descubriste que podías hablar?"
"No puedo hablar."
Ella hizo una mueca y sacudió su cabeza como si fuera una niña tonta.
Era verdad. No podía hablar correctamente . Ella no podía oírlo ? Su voz era como el silbido de una serpiente , el susurro de un cobarde, eso no era hablar.
Pero ella no dijo nada, se movió hacia la mesa y comenzó a vaciar su canasta .

"Si yo hubiera sido ahorcada y hubiese perdido mi voz", ella hablaba como si estuviera hablando de una fiesta no de una horca, "la primera vez que pudiera usar mi voz aunque sea para susurrar , estaría tan feliz que muy probablemente lloraría como un bebé ".

Los caballeros no lloran , Roger casi le respondió , pero no lo hizo. Él era un caballero y, sin embargo, había llorado por Elizabeth. Siempre sentía ganas de llorar cuando pensaba en Elizabeth. La herida seguía abierta. Pero sus ojos no se humedecieron en ese momento. No tenía lágrimas, pero la misma vieja emoción le sobrevino nuevamente , un sentimiento de pérdida y de dolor , y no podía hacer nada al respecto.

Mientras tanto Teleri había cruzó la habitación, y cuando él se volvió hacia ella estaba cargando un cubo con agua . Tarareando una extraña melodía, ella comenzó a lavar las verduras, Luego, sacó del fondo de la cesta la col más grande que Roger jamas hubiese visto . Era casi del tamaño de la cabeza de Tobin de Clare.
Ella no verlo mientras habla. " Ya que me debes la vida, inglés, lo menos que puedes hacer es responder mi pregunta."

Una pregunta? A Roger le parecía como si hubiera un centenar de preguntas. Pero por la expresión terca de ella se dio cuenta que ella no iba a dejar pasar esta . Ella podía ser galesa, pero las mujeres eran iguales en todas partes. Esa muchacha le hacía acordar a su hermana menor Margaret, que siempre lo atormentaba hasta que finalmente él respondía a sus preguntas y le decía lo que ella quería saber.
Pero en este caso , la respuesta a su pregunta era lo que él había visto en sus animales. En los animales que estaban en las jaulas. Pero Roger negaría a admitir eso , y mucho menos admitírselo a ella.
Ella estaba sosteniendo la col con ambas manos y lo miraba expectante.
"Esta mañana". Listo . Ya le había dado una respuesta.

Pero pareció ser poco su satisfactoria porque ella lo miró como si quisiera que dijese más.

Eso sería todo lo que obtendría de él si continuaba recordándole lo de la deuda con ella, el mencionar la deuda desafiaba su sentido del honor.
Listo. Ella ya tenía su respuesta.

lunes, 27 de octubre de 2008

SALVAJE - CAPITULO 14

Capítulo 14

Roger se había equivocado.
Y había descubierto eso aun antes de ver esa escena en la pradera. Había oído de gente que tenía la extraña habilidad de domesticar ciervos, aves y caballos, incluso animales mas grandes como elefantes y leones.
Pero nunca había visto una con sus propios ojos. Un ciervo con la cabeza apoyada en el regazo de un ser humano ?
Aturdido y sintiéndose raro, regresó a la cabaña donde el pequeño mundo a su alrededor era natural. Pero ahora observó el interior de la cabaña con una nueva perspectiva .

Observando todo de más cerca, vio que los animales dentro las jaulas no estaban cautivos . Roger estaba parado directamente en frente de la parte superior jaula.
El tejón dentro de ella era ciego , sus ojos blancos lechosos no veían nada detrás de las barras de madera de su jaula.

Roger tomó una baya del borde la jaula que el animal había querido alcanzar . Él mantuvo la baya madura sobre su dedo delante de la nariz del tejón. El tejón se quedó congelado por un segundo, luego olió e fruto . De repente arrebató la baya y la metió en su boca, dejando una pequeña gota de jugo morado en el dedo de Roger.

Se secó el jugo en su pantalones , y luego estudió todos los animales enjaulados. Junto al tejón ciego había un conejo con sólo tres patas. Una liebre tenía una cicatriz dentada porque su pata había quedado atrapada en una trampa de hierro. No era necesario ser un gran pensador para darse cuenta de lo que le había sucedido a esos animales.




Apoyando su peso sobre la muleta, Roger extendió su mano para frotar a un armiño que casi no tenía pelos . Era extraño . Como si el pequeño animal estuviera desnudo y desprotegido ante el mundo. Y se acordó de su barba afeitada a la fuerza. No ha estado sin barba desde que era un muchacho adolescente y se la había dejado crecer únicamente porque su padre se reía de él en el gran salón , diciéndole a todos que él era demasiado joven y demasiado inmaduro para hacerle frente .

La barba crecería nuevamente , en caso de que Roger eligiese conservarla . Pero tal vez no la quería. Tal vez le gustaría enfrentar a su asesino con la cara desnuda , porque su rostro sería la última cosa que ese bastardo cobarde vería en su vida . El hombre que lo había ahorcado se llevaría la imagen de Roger al Purgatorio y esa imagen lo acosaría por toda la eternidad.

Una de las jaulas se sacudió , y él levantó la mirada. La puerta de madera parecía floja , pero no lo suficientemente floja como para que el zorro que habitaba en su interior pudiese salir . El zorro aferró la puerta con su pata y ladeó su cabeza observándolo . Sus ojos marrones oscuros estaban alerta, moviéndose a la izquierda y a la derecha, luego sus ojos le hicieron una profunda evaluación , lo que hizo que Roger se sintiese como si estuviera siendo observado por los ojos de un hombre, no de un animal.

Luego el zorro cautivo se intentó darse vuelta y avanzar hacia un pequeño tazón sin agua colocado en una esquina de su jaula. Pero el zorro apenas podía moverse , arrastraba su cadera derecha , tropezó, y quedó caído en el piso de la jaula. Y permaneció allí, derrotado.
Los zorros son los animales más rápidos del bosque. La velocidad de sus pasos eran un desafío para el hombre y el caballo.
Pero no en el caso de ese zorro. Dado que una de sus patas traseras cojeaba, era como si toda su espalda no tuviera huesos.

Roger se dio cuenta que él era un caballero que no podía vengar el daño que le habían causado del mismo modo que ese zorro no podía correr por el bosque. El estaba rengo , herido como esos animales, dependiendo de una muleta hecha con la rama de un árbol , su voz sólo era algo más que un susurro y tenía la garganta hinchada y en carne viva porque había sido colgado.
Colgado . Se cuelga a los ladrones , a los cazadores furtivos y a los traidores, no a los caballeros del rey.
Era una situación humillante y Roger quiso gritar su rabia y su frustración, y lo peor… la terrible vergüenza que sentía por lo que le había sucedido.

Su mandíbula se puso tensa y todo su cuerpo comenzó a temblar .
Roger no podía hacer nada mas que estar allí soportando los efectos de su rabia . Agarró la muleta con tanta fuerza que perdió la sensaciones de su mano, y el puño de su mano libre comenzó a agitarse también.
Estuvo así un largo tiempo. Cuánto tiempo, no lo sabía. Porque todo lo que podía hacer era estar de pie allí viendo su rabia cruda .
Cuando finalmente el ataque de furia e impotencia terminó , se sentó en el taburete , agotado. Miró alrededor de la cabaña, su único refugio por el momento.
Tenía opciones. Podía regresar rengueando a Glamorgan, pero no tenía intención de hacer eso . Se sentía demasiado débil para hacer eso ahora. Necesitaba darse más tiempo para pensar y mas tiempo para sanar. Había llegado el momento de planificar sus acciones .
Alguien lo quería ver muerto. Y lo deseaba con suficiente intensidad como para haberlo colgado.

Por ahora, le permitiría creer que estaba muerto. Al menos hasta que recobrase la fuerza para luchar, luego dejaría esa cabaña y encontraría al hombre que le había hecho eso . Se tocó la garganta hinchada, luego cerró los ojos porque todavía le dolía.
Unos minutos más tarde abrió los ojos , no veía nada pero sentía todo , y se hizo un juramento , por su honor, que iba a hacer sufrir a quien le había hecho eso .
Un segundo después escuchó una risa, distante, clara y limpia como el viento. Venía de afuera , del prado, él supuso . El sonido llegó a través de la ventana abierta y pareció inundarlo , pareció impregnar su piel y entrar dentro de él como una luz blanca, algo que era lo contrario de lo que acababa de sentir. Una luz potente inundando su oscuridad.

Ahí estaba él agitándose de rabia, mentalmente planeando la venganza, mientras ella estaba fuera riéndose y alimentando animales salvajes. Roger se sintió como si estuviera en un mundo extraño - una especie de bosque encantado - donde nada era lo que parecía, donde el mundo real desaparecía con un simple deseo o una simple esperanza, y donde el dolor era reemplazado por la felicidad. Hacia tanto tiempo que no experimentaba la felicidad que ya se había olvidado de cómo se sentía.

Él había asumido que ella era nada más que una ladrona y una especie de bruja medio loca que algún día se convertiría en una vieja hechicera que hacía brujerías con los animales que atrapaba.
Pero todos a su alrededor mostraba lo contrario . Esos animales no podían vivir libres en la naturaleza por sus lesiones. Ella los había salvado , del mismo modo en que lo había salvado a él, un hecho en el que no había pensado , aunque ella continuamente se lo recordaba.
Él tenía una ; ella tenía razón.

Sin embargo, le ha tomado mucho tiempo darse cuenta de esa verdad. Ella era responsable de haberlo salvado , del mismo modo que ella había salvado a todos esos animales. Había tenido la sensación que ella era un ser muy espiritual cuando la había visto en el círculo de piedras con el faisán . Y nuevamente había tenido esa sensación cuando la había visto con los ciervos .

Tendría que haber confiado en esa primera sensación, porque sus instintos generalmente eran correctos . Pero no lo había hecho. Su ira por haber sido ahorcado había afectado mucho más que su voz y que su orgullo.
Lo había cegado.
Era momento de domar a la bestia salvaje dentro de él .

Teleri recogió la cesta y la enganchó de su brazo. Caminaba con sus descalzos sobre la tierra caliente y se dio vuelta la esquina, luego se detuvo delante de la puerta abierta y observó.

Él estaba sentado en el taburete, ahora, la muleta firmemente agarrada por su mano con los nudillos blancos .
Tenía el aspecto de querer asesinar al mundo.
Se le cruzó por la que tal vez no tendría que haberlo desatado.

Para que la buena suerte la acompañase ella sacó una ramita de romero de las hierbas que llevaba en la canasta y se la puso entre los dedos de los pies. El romero servía para alejar al diablo si uno lo colgaba cerca de la puerta, entonces colocó otra ramita en una hendija de la puerta. Teleri pensó que no podía dañar a nadie a ser cauteloso , porque en ese momento no tenía la horqueta para defenderse , sólo su instinto y su fe ciega.
El inglés no parecía notar que ella estaba parada allí. Sus ojos y sus pensamientos estaban muy lejos en ese momento .
Teleri tomó una respiración profunda y entró . Dejó la cesta se desliza se por su antebrazo hasta su mano. Pasó la cesta de una mano a la otra , secretamente tomando coraje.

Pensó que podría usarla contra él si el ingles faltaba a su palabra y decidía atacarla.
Pero no lo hizo. Él la miró y parecía verdaderamente sorprendido de que ella estuviese allí . No intentó hablar , pero la miró con ojos curiosos, no amenazantes, la miró como si la estuviera viendo por primera vez.
"La muleta funciona bien?" ella preguntó , porque el silencio era peor que su pregunta tonta.
Él asintió.
"Qué bien ." Ella pasó al lado de él, pero no demasiado cerca, y colocó la cesta sobre la mesa, agarró las hierbas y las pasó a una caja , buscó una madeja de hilo . Ató los tallos de las hierbas con el hilo , pero estaba muy consciente de su mirada siguiendo cada uno de sus movimientos. Sus ojos eran como un fuego recorriendo su espalda. Luego ella empezó a tararear , fingiendo que no sabía que él la estaba mirando.

Pero dentro suyo todas las emociones se mezclaban en un torbellino , miedo , nerviosismo y otra cosa no podía nombrar pero que aleteaba en su estomago , como las alas de un colibrí intentando buscar la salida.

Teleri miró fijamente la madeja de hilo . No tenía su cuchillo para cortar.
Pero el sentido común le decía que no debería sacar el cuchillo de su escondite , entonces llevó el hilo a su boca y lo cortó con los dientes. Terminó de atar las hierba pero ella siguió cortando pedazos de hilo con los dientes Y mientras lo hacía lo observaba de reojo .
El se enderezó del taburete .
Teleri se detuvo.
Colocó la muleta debajo de un brazo.
La respiración de Teleri se detuvo en su pecho y su mirada lo siguió mientras él cruzaba la habitación, y luego sacó el cuchillo de su escondite como si hubiera sido él quien lo había escondido allí.
Ella estaba tan sorprendida que no podía moverse, ni siquiera dar un solo paso.
Roger regresó rengueando hacia ella con el cuchillo en la mano.
El corazón se le subió a la garganta y ella se olvidó de respirar. Era una tonto!
Entonces él levanto la vista y se detuvo de repente, mirando intensamente su cara.
Teleri sintió que la sangre se le bajaba a los pies y se preguntó si esa era la última cosa que sentiría.

Roger rápidamente dio vuelta el cuchillo de modo que la hoja quedó contra su palma y la empuñadura hacia ella. Era evidente que le estaba ofreciendo el cuchillo.
Teleri supuso que si él le iba a cortar la garganta, ya lo habría hecho.
Ella tomó el cuchillo como si nada fuera de lo común estuviese sucediendo , como si su corazón no galopase velozmente y como si sus rodillas no estuviesen trabadas , y cortó el hilo para atar el último grupo de hierbas. Cortó unos pocos hilos más.

Por su parte, él siguió observándola.
"He terminado de atar las hierbas", ella explicó innecesariamente porque no podía soportar el silencio y su mirada. "Este hilo …", ella añadió , "… es para atrapar armar una trampa para atrapar moscas ."
Su voz sonaba tranquila y calma. Lástima que no estuviese sintiendo eso dentro suyo.
Con el cuchillo todavía apretado en su mano, sólo por precaución , ella se volvió y tomó una vasija con agua y la miel que estaba en un estante, y luego pasó el hilo dentro del líquido un par de veces hasta que estuviese bien recubierto. Lo sostuvo en alto para comprobar que estuviera recubierto con una capa de dulce , luego caminó hacia el centro de la habitación y con una mano arrastró el taburete debajo de una de las vigas del techo.
Ella comenzó a subirse.
Roger hizo un ruido ahogado y sacudió la cabeza.
"¿Qué pasa ?"
El señaló el taburete , y luego sacudió una mano mostrándole el modo en que el taburete se movía.

Y cuál era la novedad?, Si, el taburete se tambalea . ¿Piensa que soy idiota ? Con el tiempo Teleri había aprendido a equilibrarse con el balanceo de taburete. Subiéndose al banquito era la única forma en que podía llegar a los estantes más altos y a las vigas de la cabaña. "Tengo que usar el banco para atar el hilo ". Ella señaló las clavijas en viga donde ataba los hilos atrapa moscas.
Si le preocupaba su inestable posición en el taburete , debería haberla visto el día en que ella intentado sacar eses clavijas. Se había caído dos veces y había rengueado durante días y días.
Ella vio mirada perpleja. "Voy a atar el hilo allí", ella explicó nuevamente.
Roger observó la clavija en la viga, luego su mirada volvió a ella y sacudió la cabeza.
" Ya te lo dije . Este hilo es para las moscas", ella repitió, intentando no darse vuelta mientras él se acercaba hacia ella. Ahora Roger estaba de pie a menos de un metro de distancia , mirándola tan intensamente.
"Las moscas se pegarán al hilo con miel ", ella explicó sencillamente. "Luego las llevo afuera y las dejo libres".
Roger la miró durante mucho tiempo, luego él sonrió, y sonrió con ganas.
La sorpresa debió haberse mostrado en su cara porque él comenzó a reírse.

Era sonido un sonido grueso como si estuviera riéndose debajo del agua.. Él se calmó y llevó su mano a su cuello como para recordar lo que le había ocurrido.
Ambos se quedaron así, en silencio, él tocándose las marcas rojas de su garganta, y su mirada clavada en ella.
A su alrededor, las cosas eran las mismas. Todo era familiar. Su cabaña las paredes de adobe y el techo de paja , el única hogar que Teleri había tenido en su vida. Y todavía era la misma que siempre había sido. Las mismas palomas y gorriones piando en las ventanas. Las moscas molestas y la trampa del hilo con miel .
Sin embargo, en ese momento un viento suave entró a través de las ventanas abiertas , le sopló el cabello y le secó la boca. Teleri pudo sentir el gusto y el olor del otoño , la sequedad en el aire y el extraño aroma que marcaba el cambio de estaciones. Pero había algo más que ese olor en el aire.
Algo más que las estaciones estaba cambiando. Un cambio que estaba sucediendo ahora. En ese mismo momento. Dentro de ella.
En la mayoría de los casos, nunca se daba cuenta que algo había cambiado hasta que era demasiado tarde. De repente miró hacia arriba y notó que las cosas eran diferentes.

Pero a veces, como en ese momento , cuando ella sólo intentaba vivir su vida como mejor podía, llevando una existencia tranquila en un mundo donde la tranquilidad no era fácil de encontrar , y entonces algo sucedía. Nada que ella pudiese señalar claramente . Nada que pudiese controlar. Y sin embargo, realmente podía ver el cambio viniendo a ella.

Sabía que no podía hacer nada al respecto, porque el destino era así, sólo los tontos trataban de luchar de luchar contra el destino . Pero en ese momento lo supo. Fue consciente de que su vida nunca sería la misma.
La miradas de él encontró la de ella y la mantuvo . Una emoción tácita se estableció entre ellos. Su mano aún tocaba su cuello, casi como si tuviese miedo que ese momento pasara.
Un caballero con miedo a algo? Una idea tonta , pero Teleri podía ver su miedo. Estaba allí en sus ojos. Estaba en el aire que de repente se había hecho denso entre ellos, ella sintió el olor a miedo - muy similar al olor que los animales emiten cuando están asustados.
Había visto suficientes animales heridos y atacados . Sabía exactamente como olía el miedo. Instintivamente se tocó la cicatriz cerca de su ojo. El miedo era la razón por la cual ella vivía en el bosque, escondida de un mundo cruel y sin sentido.

Y después de lo que le había sucedido a ese hombre, que era un hombre en primer lugar, no sólo un caballero, ella sabía que había razón para temerle al mundo como le temía. .
"Lo siento", ella dijo, bajando la mano de su mejilla, deseando que esas palabras fuesen suficientes para calmarlo , pero sabiendo que no lo eran.
Roger asintió, y luego extendió la palma de su mano.
"¿Qué quieres?" , ella preguntó.
"El hilo ", él le susurró las palabras con claridad. "Dame el hilo ".

domingo, 26 de octubre de 2008

SALVAJE -CAPITULO 13

Capítulo 13

Oh , qué le sucede al caballero
Que se lo ve solo y pensativo ?
Ha conocido a una dama absolutamente hermosa ,
La mas bella muchacha ,
Su cabello es largo, sus pies delicados,
Y sus ojos son salvajes.

John Keats



Las palabras no salían de su garganta.

Roger yacía sobre el colchón intentando de encontrar su voz perdida. Si intentaba habla con rapidez, los sonidos eran incomprensibles como agua burbujeando entre las rocas. Si hablaba despacio, las palabras recuperaban su forma pero sonaban como gruñidos , y no se parecían en nada a palabras. A pesar de que podía sentir la reverberación de la voz en su pecho.
Azotó su puño contra el piso de tierra y cerró los ojos con tanta fuerza que le dolió . Sus oídos latían por el enojo que sentía, ese enojo corría por su cuerpo es como si fuera parte de su sangre.

Estaba en esa cabaña , como un tullido que no podía hablar, que sólo podía renguear y no caminar . Siempre había creído que podía lidiar con cualquier enemigo, ya que eso es lo que había hecho en los campos de batalla y en los torneos. Siempre había tenido la arrogancia necesaria para ser un caballero, pues los hombres que vivían en guerra tenían una firme creencia, en el fondo de sus almas, se sentían invencibles.

Él no era invencible. La verdad lo había golpeado rápidamente y sin ningún tipo de piedad , un trago amargo debía beber , el trago tenía el sabor de algo que cualquier hombre orgulloso odias, tenía el sabor a cobardía.

Entonces yació allí por un tiempo, con su confianza debilitada , su mente llena de enojo y auto conmiseración . Se sentía derrotado. Ese sentimiento se había iniciado como una grieta en su orgullo y se había extendido rápidamente hasta consumir su mente y su corazón. Le erizaba la piel y lo hacía temblar de vergüenza e ira. Le hacía arder los ojos por la humillación y parecía drenarle todas sus fuerzas .
No se suponía que un hombre como él sintiese las cosas. Orgullosos y fuertes. Guerreros. Eso era lo que se suponía que los hombres eran.
Teleri entró la cabaña en ese momento , en el peor de todos los momentos posibles.
"Buenos días , Inglés." Ella se detuvo y lo miró con su ojo sano, su postura arrogante , un puño plantado en su cadera. "Todavía acostado, veo".

Él no hizo nada, sólo la miró parada en el umbral de la puerta, su voz sonaba alegre y optimista , mientras él todavía estaba sumergido en la oscuridad de sus sentimientos . El cerdo entró y le olisqueó los pies . Ella lo alejó con un palo que tenía en una mano.
"Te he traído esto." Ella extendió el palo.
Él notó entonces que no era la horqueta. Parecía ser la rama de un olmo, larga y fuerte con una V en la parte superior donde la rama había estado unida al tronco.
"Una muleta", ella explicó como si él no tuviese cerebro como para descubrir de que se trataba .

"No me mires como si quisieras hervirme en aceite, inglés. Vos no podes hablar, por lo tanto yo no sé si me entiendes. Si no quieres que te explique mis ideas y mis acciones , luego sacude la cabeza, levanta la mano, o haz algo de manera que yo sepa que me entiendes. "
Era brujita atrevida y bocona teniendo en cuenta que ella no tenía la horqueta para defenderse . Una parte perversa de él se preguntó qué haría si él lanzase en cuatro patas y la agarrase por las piernas.
Cuando él no hizo nada para tomar la muleta, dijo, "Es un día cálido afuera . Deberías salir".
Él no respondió rápidamente, pero finalmente sacudió la cabeza.
Ella mordió su labio por un breve instante, su coraje iba desapareciendo.
Roger se preguntó si ella se daba cuenta que, es a mujer de repente ya no parecía tan valiente como sus palabras.

"Si quieres andar por acá , necesitarás esto . Yo no puedo obligarte a usarlo , entonces la voy a salir aquí." Ella apoyó la muleta contra la pared, le lanzó un vistazo extraño que contenía disgusto y pena, luego se dio vuelta , con el cerdo olisqueando impacientemente sus faldas mientras ella salía por la puerta abierta.

No supo cuánto tiempo estuvo acostado allí, mirando fijamente la muleta, sin saber si quería romperla o usarla. Desvió la mirada entonces, molesto con todo en general. Estaba sentado con su espalda apoyada contra la pared y sus manos apoyadas sobre sus rodillas levantadas, luego hizo una mueca y extendió la pierna del pie herido delante de él.

Luego se dio vuelta y estudió la muleta. No tenía voz, pero podría haber jurado que había oído al objeto llamándolo , diciéndole cobarde, cobarde ……… cobarde
Era una tontería. Sólo era un pedazo de madera.

Intentó algo diferente, pronunció cada insulto vil que podía recordar, pero a sus oídos sonaban como débiles gemidos y súplicas en lugar de malas palabras dirigidas a todos los santos.
Desvió la mirada , su mandíbula tensa, los puños cerrados. Luego encontró que su mirada nuevamente era atraída por ese pedazo de madera .
Un palo apoyado contra la pared lo miraba fijamente .
Cuando no podía soportar eso por más tiempo, se arrastró hacia la muleta.

Unos coles estaban perfectamente alineados en el lado oeste de la cabaña, donde daba la luz del sol. Teleri se agachó para examinarlos. Un momento después el cerdo salió del arroyo y corrió hacia las filas de repollos , pisoteándolos , olisqueándolos y siendo mas molesto que una plaga de mosquitos .

" Cerdo ! Fuera de aquí !" Ella lo espantó con las manos , luego recogió las hojas aplastadas y sacudió la tierra de los repollo que el cerdo había pisado.
Las coles habían crecido y sus hojas se estaban abriendo .
Ahora todo lo que necesita hacer era impedir que el Cerdo destruyese el jardín. Teleri se dio vuelta y lo vio . Él estaba sentado en el patio, sus patas estiradas delante de él y su hocico entre ellas. Sus ojos cerrados.
Sin duda él estaba soñando, seguramente con coles y nabos. Teleri sacudió la cabeza y su mirada se dirigió mas allá del arroyo.
En el prado , el caballo estaba pastando mientras el Halcón estaba apoyado sobre su lomo , sus alas estaban extendidas como si estuviera punto de tomar vuelo, algo que él nunca había hecho, pues el Halcón no volaba.

Ella había encontrado al halcón y con el caballo herido y había traído al ave a la cabaña . Halcón se había quedado en su casa desde entonces, convivía amigablemente con otros animales, algunos de los cuales deberían haber sido sus presas naturales. Pero él pasaba sus días posado en los lomos del cerdo o del caballo. A veces se colgaba de la cola del caballo y se hamacaba.
Sacudiendo la cabeza, Teleri arrancó un repollo gordo para la comida y lo dejó a un lado, luego se inclinó para verter un cubo con agua en la tierra oscura alrededor de las coles. Luego se puso de rodillas, y se estiró hacía donde estaban las zanahorias y los nabos, removió los terrones de tierra, luego se incorporó y colocó el repollo en una cesta de mimbre que ya estaba llena con bayas, hortalizas e hierbas recién cortadas.

Luego sacudió la tierra de su túnica , donde la húmeda tierra húmeda había formado dos círculos marrones a la altura de sus rodillas. Levantado el borde de la falda examinó los pies descalzos.
Tenía barro entre sus dedos de los pies y hasta en los tobillos. Se bajó la falda y con la manó tiró hacia atrás una mechas de cabello rizado, que le caían sobre la cara. Hasta tenía barro en las manos, también. Usó el delantal corto delantal para limpiarlas pero sólo logró ensuciarlo con barro.
Teleri miró fijamente las palmas sucias y arrugó la nariz. Necesitaba lavarse el cabello y bañarse. El arroyo estaba tan cerca y hacía bastante calor .
Miró la ventana de la cabaña y escuchó , preguntándose si el inglés seguiría acostado . No se oía ningún sonido, entonces dio dos pasos y muy cuidadosamente espió dentro la cabaña.
El estaba en cuatro patas, la muleta extendida al lado de él.
Ella contuvo el aliento .
Él avanzó apoyándose en sus rodillas , luego agarró la muleta y la usó para ayudarse a ponerse de pie.
Lo hizo! Ella bajó la cabeza rápidamente, por temor a haber hablado en voz alta. Ella se quedó agachada debajo de la ventana por un momento, una mano cubriendo su boca. Había pasado la mayor parte de la mañana haciendo esa muleta. Quería que le fuese útil a él.
Hubo un golpe suave . Ella lo escuchó gruñir. Lentamente Teleri levantó nuevamente la cabeza de modo que sólo sus ojos estuviesen a la altura del alféizar de la ventana. Él estaba sentado en el piso , la muleta caída a su lado, y la estaba mirando ferozmente
Lo intentó una vez más, su rostro tenía una expresión decidida y feroz. Primero se puso de rodillas y luego de pie.
Lo logró ! Teleri dejó salir el aliento contenido y sonrió .

Él no sonrió como ella hubiera hecho , no dejó escapar un grito de triunfo , sino que se quedó de pie allí, con el pecho hinchado como el Halcón hacía cuando sentía placer.
Inglés arrogante. Teleri sonrió con orgullo


Roger se dio vuelta y rengueó furiosamente hacia la puerta, donde tuvo que agachar la cabeza para no chocarse con la parte superior del marco de la puerta . Aún estaba enojado, enojado porque sentía que había recuperado su vida, pero que había perdido su capacidad para hablar , por lo menos para decir algo más que un gruñido.

Roger se quedó parado afuera por un momento, no se había dado cuenta hasta de cuanto necesitaba el aire fresco, y más aún, él pensó, que necesitaba privacidad. Miró a su alrededor buscando los arbustos más cercanos y más densos , donde pudiera aliviar sus necesidades fisiológicas.
Empezó a avanzar, su muleta se deslizaba en la tierra blanda. Luchó con ella, luego pudo avanzar con más facilidad porque la tierra es más dura al acercarse a los arbustos.
Le tomó un momento darse cuenta que ella estaba allí , moviéndose con él, dos pequeños pasos atrás de él .
Roger la miró , y luego dio otros dos pasos.
Ella caminaba junto a él.
Él se detuvo y le frunció el ceño . Seguramente no creía que iba a acompañarlo ?
Él dio otros dos pasos.
Ella dio dos pasos .
Roger no se movió , pero la miró . Cuando ella le devolvió la mirada, él sacudió su cabeza.

Por un momento ella lo miró como si estuviese confundida. Luego su ojo sano se abrió ampliamente . Ella no pudo ocultar su sonrisa , aunque fue lo suficientemente sabia como para no hacer un comentario .
Hirviendo de furia , Roger se dio vuelta y comenzó a avanzar cojeando.
"No es algo que yo no haya visto antes, inglés," dijo ella, caminando a su lado nuevamente .

Él plantó la muleta en la tierra con tanta velocidad como pudo. Estaba enojado . Pero no estaba seguro que lo molestaba más, el hecho de que ella quería acompañarlo a un lugar privado o el hecho que ella alegase tener un conocimiento íntimo de los hombres. Cosa que no debería importarle en lo absoluto.

"Inglés!"

Él se detuvo, apretando su mano sobre la muleta, y se dio vuelta lentamente para mirarla.
Ella estaba unos metros detrás de él, sus manos plantadas en las caderas y su mentón levantado en el aire . "¿Quién crees que te atendió cuando estabas enfermo?"
Roger la ignoró , y se volvió rápidamente y rengueó alejándose porque no quería que ella viese su rostro ponerse rojo como un tomate.

Mierda, él era un caballero. No un adolescente que se enrojecía cada vez que estaba cerca de una mujer. No sabía por qué se sentía avergonzado, a menos que cuando lo habían colgado también le hubieran hecho perder su masculinidad.
Mierda . Miles de mujeres lo había visto desnudo . No tenía nada de que avergonzarse. Si , tenía un falo entre las piernas . No era algo fuera de lo común para un hombre.

"En verdad, Inglés, la tuya no es diferente de cualquier otra que haya visto", dijo ella como si tuviese toda la experiencia del mundo respecto a hombres y miembros.
Roger siguió avanzando.
"Pero supongo que la tuya es algo diferente", ella le gritó.
Diferente ? Él la ignoró y se dirigió a los árboles.

"Es más pequeña que la mayoría".
Él se detuvo de repente como si hubiese echado raíces en el suelo. Lentamente se dio vuelta .
Ella no estaba sonriendo. Él podía ver que la cara que ella era completamente seria.
Más pequeña? Sus ojos se estrecharon y su aliento salió con el sonido de un silbido.
Se puso aún más seria cuando agregó, "Caballo lla tiene mucho más grande."

Él se quedó atónito . No estaba seguro si sentirse aliviado por lo había comparado con un semental. A ningún hombre le gustaba que le dijesen que la tenía cota.
Mierda. Eso no tenía ninguna importancia. Ella no iba a acompañarlo a los matorrales . Él extendió una mano y señaló con el dedo hacia el prado.

Ella lo observó , luego a su dedo, y volvió a mirarlo a la cara nuevamente . "Quieres que me vaya."
Él asintió.
"Estás seguro que no me necesitas?"
Él no dijo nada, sólo clavó sus ojos en ella en una señal de advertencia .

"Bien." Ella suspiró, y luego añadió . "Haz lo tuyo entonces . La letrina está detrás de los árboles. Allí. Después que entres en los arbustos sólo tienes que seguir dirección de tu nariz apuntando al bosque."
Roger se dio vuelta entonces, unos insultos se atragantaron en su garganta, pero salieron como más gruñidos.
"Voy a quedarme por aquí si me necesitas," ella le gritó con una voz alegre que sólo empeoró su mal humor.
Necesitarla? Él se metió lo mas rápido posible hacia el terreno en el bosque donde los árboles y los arbustos eran más densos.
Él no estaba dotado como un caballo, pero nunca había tenido ninguna queja. La mayoría de las mujeres se llevaban una agradable sorpresa cuando lo veían desnudo por primera vez, Roger pensó con orgullo, rengueando a través de los árboles y los arbustos a una buena velocidad.
Cualquiera con experiencia sabía que no se trataba del tamaño, sino de lo que uno hacía con el miembro . Y él era un hombre que sabía cómo manejar sus dos espadas.
"Inglés!" ella le gritó . "¿Cuánto tiempo piensas que tardarás?"

¿ Ella era infradotada ? El no podía hablar y mucho menos gritar . Rápidamente se ató los pantalones - antes que ella decidiese unirse a él, y volvió rengueando hasta que pudo asomar su cabeza fuera de los arbustos espesos.
"Oh! . No puedes responderme , ¿verdad?"
Él sólo la miró ferozmente .
"Oh", ella dijo una vez más mientras lo miraba con la primera señal de pudor . "Voy a dejarte solo entonces." Finalmente, ella se volvió y caminó hacia el puente de piedra.
Roger gruñó entre dientes todo el tiempo mientras terminaba el asunto que lo había traído a los matorrales .
Muy corto? Era más grande que su propia mano. Y en los próximos segundos se quedó allí… mirando su miembro .


Teleri se cruzó la pradera, riéndose porque el caballo la empujaba con su hocico. Se trata de un juego que hacían en los días de sol brillante como ese día . Él la siguió como un cachorro, paso por paso, desplazándose cada vez que ella lo hacía, y cuando ella se detenía, él la empujaba con el hocico para que avanzara hacia delante, y luego agitaba la cabeza y las crines como si se estuviera riendo de ella.

Pronto , cansado del juego , el caballo se marchó al trote para comer unas hierbas blandas que le parecían más atractivas. Los animales no son como las personas. Los animales se movían por la vida impulsados por una necesidad a la vez. Ellos no necesitaban todo al mismo tiempo , sólo lo necesario ese momento único.

Teleri atravesó el campo de hierbas, sólo para sentir su frescura en las plantas de los pies. En poco tiempo comenzó recoger flores salvajes para adornar la mesa y pronto sus brazos estaban llenos de flores de color blanco , azul , rosa y amarillo.
Luego se dio vuelta y vio, una gama con sus dos cervatillos. Teleri los conocía a todos ellos. Los cervatillos habían nacidos en la primavera y ahora ya estaban mas grandes y robustos . Ella se agachó en el prado y se quedó muy quieta.
No llevó mucho tiempo. La gama salió de su refugio entre los árboles y caminó hacia ella , y luego se detuvo , insegura, del mismo modo en que los viejos amigos o familiares vacilan cuando no se han había visto durante mucho tiempo.
Teleri extendió un tallo con una flor silvestre . Los cervatillos dieron unos pasos fuera de su refugio , irguieron sus orejas, sus ojos brillantes estaban fijos en la gama. Luego observaron como ella se comía la flor que Teleri le había extendido . Luego, la gama se dio vuelta para llamar a sus hijos.
Mientras tanto Teleri saco más flores de su canasta y algunas de las bayas dulces que había recogido. Ella puso en sus manos las grosella . Los cervatillos siguieron a su madre y pronto comían las bayas de las manos de Teleri.
Ella se rió, porque le hacían cosquillas y porque ella adoraba tocar sus sedosas pieles .

Estuvo sentada en la hierba fresca y los ciervos se sentaron allí con ella, no se sentían amenazados y uno de los cervatillos posó su cabeza en su regazo con un suave suspiro. Ella lo acarició por algunos minutos.
Luego levantó su cara al calor del sol. Se quedó así durante mucho tiempo, el tiempo suficiente para que sus mejillas se enrojeciesen . Entonces el ciervo se puso de pie y la miró con sus orejas paradas.
Teleri siguió la mirada de la gama .

El Inglés estaba en la pradera , apoyando su mano contra un viejo árbol. Él Sólo la miraba a ella, y su expresión era ilegible.

Teleri no tenía idea de cuánto tiempo había estado ahí, observándola . Una parte de ella deseaba poder desviar la mirar y pretender que él no estaba allí, pretender que nadie los observaba. Pero no podía.

Él se quedó mirándola . Se dio vuelta y rengueó de vuelta a la cabaña, dejándole una inquietud extraña, ella había pensado que era miedo, pero ahora se daba cuenta que otra cosa totalmente distinta , algo que nunca había sentido antes.