lunes, 1 de febrero de 2010

ARREBATADAS!! CAPITULO 21 - JILL BARNETT

Capítulo 21


Un consejo siempre es aceptable si no entra en conflicto con tus planes.
Proverbio de Nueva Inglaterra



Georgina todavía estaba encerrada en el cuarto de baño . Rondaba el cuarto el como un animal enjaulado . Los animales tenían el instinto natural de mantenerse en movimiento , para que cuando la oportunidad se presentase puedan actuar instantáneamente . Georgina estaba lista para escaparse.
Pero estaba pensando y caminando, porque no había nada más que hacer. Pensó en John Cabot, en su casa, y en todos sus planes. Su estómago se cerró en un nudo apretado.
Un solo acto impulsivo y estúpido de MacIdiota y ella estaba a punto de perder todo. Ella le dio puñetazos a su otra mano mientras caminaba. Tenía que regresar. Si o si.
Si pudiera regresar antes que demasiado tiempo hubiese pasado, podría buscar una excusa para su desaparición.
¿Qué clase de excusa? Caminó otra vez, pensando en una buena mentira. Se detuvo , adoptó una pose, y le lanzó una mirada rápida al espejo en una pared.
Demasiado rígida.
Aflojó los hombros y levantó el mentón elegantemente.
Mucho mejor.
" Oh, John, mi querido !" Ella dijo y levantó
la mano graciosamente - . "No me vas a creer lo que me pasó !"
Georgina se paralizó y cambió la postura. Qué podría decirle?
Caminó inquietamente , pensando.
¿Qué decirle ? ¿Qué decirle ? Dios sabía que no podía decirle la verdad. Ya podía imaginarse su cara. " Pues bien, John, un enorme escocés vino y me arrebató. Me secuestró y luego me encerró en su casa ".
Su reputación estaba arruinadas. La reputación era todo lo que tenía. John Cabot nunca se casaría con ella si supiese que había sido secuestrada. Simplemente era algo excesivamente escandaloso.
Tenía que escapar, inventar alguna excusa. Quizás le podría decir que había seguido a Amy Emerson. Sí, eso funcionaría.
Dos mujeres solas. Amy sería la chaperona. Georgina inclinó la cabeza. Luego podría algún acto heroico para ganarse la simpatía de John. También tendría que reparar
su orgullo herido . Después de todo, ella no se había presentado a la cita . El heroísmo despertaba simpatía. El sacrificio por otra persona ...si ... esa tontería ciertamente funcionaría. Claro que funcionaría, después de todo, John era un hombre. Y los hombres respetaban el heroísmo.

En minutos Georgina tenía un plan , con el elemento heroísmo como factor principal .
Se frotó las manos , luego cruzó hacia el brasero
en el rincón del cuarto y se calentó las manos y los pies.


Georgina miró a su alrededor de ella. El cuarto era sorprendentemente grande y cómodo.
Tenía cañerías y canillas. Una sorpresa. Había pensado que la gente de esas islas vivían muy atrasados, y que sólo existían chozas de pescadores .
Una gran tina de cobre con agua estaba en el rincón cerca del brasero .
Había un armario con toallas que ella primero había pensado que una puerta que daba a un cuarto contiguo .
Dentro del armario había pilas de toallas gruesas ordenadas prolijamente.
Considerando lo que había visto de la casa - lo que no era mucho y que le había parecido una pocilga - este cuarto era inmaculado. La casa parecía ser una mezcla extraña de desorden y orden.
Pero ahora mismo, ella simplemente estaba en una prisión. Georgina se sintió indefensa, incapaz de hacer nada mas que caminar y pensar. Quería actuar, no pensar.
Quería escaparse. Quería llegar a casa.
Observó la puerta cerrada por mucho tiempo, luego revisó el cuarto algo que sirviese para hacer salta el cerrojo. Mientras buscaba ella vio un reflejo de ella . La imagen fue suficiente hacerla a llorar - si ella hubiera sido una mujer dada al llanto . Pero no lo era.
Georgina arrancó una horquilla del cabello y pasó la siguiente media hora doblándola y retorciéndola para hacerla funcionar como una llave. Finalmente se enderezó rígidamente. Miró enojadamente en la puerta, luego se clavó la horquilla de vuelta en el cabello , porque ese pedazo de alambre era tan Útil como una billetera vacía.
Se quedó parada allí tratando de pensar en algo que hacer. Tenía frío. Debería tomar un baño. Ciertamente eso la calentaría.
Pero con la suerte que tenía, MacIdiota se aparecería cuando ella estuviese desnuda . Estudió las cañerías para ver si podría aflojar una y usarla para golpear la cabeza dura del idiota . Después de varios inútiles
No pudo aflojar ningún caño.
Exhausta y enojada, Georgina se dio por vencida y solamente se hundió en el piso. Se quedó sentada allí , con el mentón apoyado en una mano mientras mentalmente le lanzaba maldiciones a Eachann MacLachlan . Arrogante, increíblemente guapo, y con una cabeza muy grande y vacía.
Empezó a contar sus moretones.
Veintisiete en una sola pierna .
Con un gemido de sus músculos cansados y dolidos, Georgina se puso de pie , fingiendo que tenía algo que hacer. Cruzó el cuarto.
En el lavatorio, abrió una canilla, se inclinó y usó una mano para ayudarse a beber. Luego se secó la boca, y extendió la mano para cerrar el grifo.
Y se paralizó .
Un segundo más tarde se reía con goce malicioso.

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