SALVAJE - CAPITULO 38

Capítulo 38


Les llevó cuatro días llegar al Castillo de Wells. Teleri estaba sentada junto a Roger en el carro que contenía todo lo que le pertenecía y amaba.
En la parte trasera del carro cama iban todas las jaulas de los animales, la liebre de tres patas , el tejón ciego , el zorro y los otros animales que nunca hubiesen sobrevivido solos en el bosque salvaje. El Caballo árabe estaba atado al carro , el Halcón viajaba sobre su lomo , y el Cerdo estaba durmiendo en una pequeña cama de paja armada en el carro . De vez en cuando levantaba su cabeza y contemplaba el campo y gruñía.
Habían acordado dejar la cabaña como estaba, Roger había prometido que volverá en primavera, por lo que Teleri sólo llevaba sus pertenencias personales, el baúl con sus pocas ropas y los regalos de boda. Ella había embalado las rocas y las conchas marinas y llevaba la bolsa de cuero rojo atada a su cintura para que no se perdiese.
Hubo pocas palabras entre Roger y su padre. Su marido habla más a algunos de los hombres de su padre, a quienes había conocido por años. El padre se había mantenido distanciado de Roger y de Teleri, eligiendo comer y dormir en una pequeña carpa , mientras que sus hombres levantaron una tienda más grande para Teleri y Roger.
Fue al final del día cuando llegaron a una colina más grande.
"Ese es el Castillo de Wells”, dijo Roger, disminuyendo la velocidad del carro.
Teleri y observó la edificación . "Ahí es donde creciste? Esa es tu casa?"
“ Si ".
El castillo fue tan enorme que parecía una ciudad amurallada.
Desde la atalaya en el centro de un interminable muro llegó el sonido de los heraldos, y mientras se acercaba a la torreta de la entrada un enorme puente levadizo se bajó sobre el el foso, que era el tamaño de un lago y estaba rodeado por un larguísimo muro.
El portón de rejas se abrió con un crujido , mostrándose como la mandíbula gigante de un monstruo y el Barón FitzAlan lo atravesó cabalgando , seguido por el carro y sus hombres mas atrás.

Teleri se quedó sentada allí en silencio observando a un Roger que había estado callado por la mayor parte del día. Estaba regresando a su casa, pero no había ansiedad y expectativa en su expresión. Él estaba sentado rígidamente como no quisiera estar allí.

Una vez adentro todo el mundo parecía estar hablando al mismo tiempo . La gente en el patio se detuvo y saludó a los hombres y a Roger. Todos se aproximaron a la fortaleza, que era muy alta y ancha y tenía vidrios en algunas de sus ventanas, vidrios que brillaban como estrellas incrustadas en la sólida piedra gris de la construcción.

Los enormes puertas de roble de la fortaleza se abrieron repentinamente y un grupo de mujeres llegó corriendo, la mayoría de ellas eran jóvenes, pero la mayor era una mujer asombrosamente hermosa con sus cabellos rojos . Ella corrió hacia el carro exclamando ", Roger! Roger!"

Él saltó fuera del carro y abrió sus brazos a la pequeña mujer , Teleri sabía que sólo podía ser su madre. Ella estaba llorando mientras abrazaba a su hijo, sus manos tocaban sus mejillas, como si tuviese que tocar su rostro para creer que él realmente estaba ahí. " Estás vivos, hijo. Gracias a Dios."
" Estoy bien , Madre". Roger la abrazó con fuerza , pero luego su mirada fue hacia Teleri, todavía sentada en el carro . Ella le dio una pequeña sonrisa que ella sabía que era una sonrisa temblorosa porque estaba muy, muy asustada.
Su madre lo miró, luego tocó la garganta de Roger. Lágrimas rodaron por sus mejillas y ella comenzó a llorar, diciendo: "Mi hijo, mi hijo……"
"Estoy bien , Madre. Basta . Por favor". El se detuvo y Teleri pudo que oír su voz estaba por quebrarse . Podía sentir lágrimas juntándose en sus propios ojos.
"Basta de llorar. Estoy bien y estoy en casa !" Roger dijo, bajando sus brazos a los costados mientras miraba a su madre y sus hermanas.
Dio vuelta la cabeza sólo por un momento, encontrando la mirada de Teleri. Ella pudo verlo empezar a avanzar hacia ella. Pero antes de que pudiera llegar sus hermanas lo rodearon, llorando y charlando todas al mismo tiempo .
Teleri las miraba y se preguntó cómo se comunicaban si ninguno de ellos escuchaba lo que el otro estaban diciendo.
Finalmente Roger se separó del círculo femenino y tomó la mano de su madre y la acercó al carro . "Madre, tengo a alguien que quiero presentarte. Alguien muy especial".
La madre de Roger miró a Teleri con curiosidad.
"Madre, esta es Teleri, mi esposa."
Su madre sacó su mirada de la cara de Teleri y miró a Roger con una expresión sorprendida.
El estómago de Teleri se apretó . Ahora, ninguno de los padres de Roger la aceptaban. Qué situación tan maravillosa . Apretó sus dedos sobre su regazo y se forzó para que la sonrisa permaneciese en su cara.
"Estás casado?"
“ Si ".
"Oh ¡por fin! Estoy tan contenta ." Ella se volvió a Teleri y extendiendo sus manos. " Otra hija para mí ! Esto es maravilloso! Oh! Ayúdala a bajar, Roger." Ella palmeó el brazo de Roger. "No debiste haberla dejado allí sentada mientras todos nosotros la mirábamos groseramente."

En el momento en que los pies de Teleri tocaron el suelo , la madre de Roger la abrazó. Ella olía a rosas , a canela y bondad. "Bienvenida, Teleri. Bienvenida". Ella enlazó su brazo con el suyo. "¡Qué bonito nombre tienes!. ¿Es galés? Debes contarme sobre vos y su familia, y cómo vos y Roger se conocieron . Mi nombre es Lillianne, pero puedes llamarme Madre si lo deseas. Me gustaría que lo hicieras. Sabes , mi querida, he estado muy preocupada desde hace varios años porque creía que nunca iba a ver a mi hijo casado. Estoy tan contenta. "
Ella casi arrastró a Teleri hasta las escaleras y lejos de Roger. "Ven adentro. Debes estar agotada por el largo viaje. ¿Dónde los encontró Sander? Él envió un mensajero , pero el mensaje no te mencionaba , mi querida. Debe haber querido que fuese una sorpresa para mí."
De alguna manera, Teleri dudada de que ese fuese el motivo por el que Barón FitzAlan no le había mencionado a su esposa sobre la existencia de Teleri.
La madre de Roger la llevó a través de la puerta diciendo: "Debes contarme todo. Mi querida. Todo. No debes guardarte nada"


A la mañana siguiente, Roger bajó las escaleras de piedra desde su habitación en la torre oeste. No había dormido bien y bostezó cuando entraba al solar.
"Roger!" su madre le gritó.

El salió de detrás de la cortina en la entrada del solar, frunciendo el ceño . "Toda mi vida has sabido cuando eran mis pasos los que se acercaban . ¿Cómo puedes hacerlo?"
"Una madre sabe todo sobre su hijo, sus movimientos , su voz , sus gestos y su manera de caminar."
Roger sofocó otro bostezo.
"¿No dormiste bien?"

"No muy bien."
“ Es una cama extraña. No has venido a casa desde hace dos años."
Roger podía oír el reproche en su voz.
" He tenido deberes que cumplir, Madre."
Ella la miró intensa y amorosamente. "Y también por tu padre, supongo."
"Si, es así " Roger no podía negarlo. "Pero estoy cansado por dormir con ese cerdo."
"Roger! Eso es horrible! Nunca debes hablar de tu esposa en esos términos. ¿Qué te pasa ? Teleri es una muchacha muy dulce. Esa no es manera de hablar de una mujer, Roger. Soy tu madre y no voy a permitírtelo . No me importa si ya sos un hombre adulto ... ".
Él lanzó una carcajada , y luego le explicó acerca del cerdo.
Su madre lo hizo sentarse a su lado y lo obligó a contarle todo sobre Teleri. Roger pasó mucho tiempo contándole todo. Habló sobre los animales, el bosque , luego le contó el episodio del ahorcamiento. Su madre lloró mientras escuchaba . Y lloró cuando le contó que Teleri había sido apedreada.
Roger siempre podía hablar libremente con su madre. Ella lo escuchaba, a diferencia de su padre. Ella le permitía terminar una frase o una idea y no lo interrumpía. Ella no se apresuraba a juzgar y ella nunca lo hacía sentir como si él fuese un fracasado.
"La amas muy profundamente."
" Si ", admitió Roger.
"Estoy muy feliz por vos, hijo. Eso es todo lo que siempre quise para vos . Esta relación con Elizabeth de Clare no era buena. Ella no era la mujer apropiada para vos . Tanto tu padre como yo sabíamos eso ." Ella miró a Roger. " Y vos pareces entender eso ahora".
"Puede saber eso con sólo mirarme?"
"Hay una paz en vos que no había estado allí antes. Una madre lo percibe , hijo." Lillianne se enderezó en su silla y miró todo el solar. "Ahora dime, ¿dónde está Teleri? Ella no vino con vos ?"
"Margaret y Marian están con ella, probándose vestidos y ese tipo de cosas. Ellas me echaron."

" Entonces ... ". Su madre se puso de pie . "Puedes acompañarme abajo para desayunar . Las chicas la van a traer tan pronto como la hayan vestido".

Las chicas no dejaron que Teleri abandonase su habitación hasta que ella no se hubiese probado cada uno de los vestidos, túnicas , faldas y camisas que ellas poseían. Y nadie en toda Inglaterra poseía un guardarropas mas extenso. Las hermanas de Roger eran de la misma talla y altura que Teleri. Por eso, cuando ella bajó las escaleras de piedra para reunirse con su marido y el resto de la familia, estaba vestida con un vestido de seda verde con una fina sobre túnica de oro.
En su cabeza llevaba un vincha de oro con un enorme rubí en el centro, y su cabello estaba trenzado con cintas que caían hasta su cintura. Y Teleri se sentía muy extraña.
Teleri dejó que las hermanas la arrastrasen hacia el gran salón , donde había una multitud de personas que eran en su mayoría desconocidos, sentados en grupos en diferentes mesas. Las chicas la llevaron delante de su padre como si llevasen la joya mas valiosa del reino y Margaret dijo, "Mira. Realmente, no se ve linda? Mírala , Padre? Yo te dije a que iba a limpiarla".
"Margaret!" Lillianne intervino. "Siéntate y llena tu gran bocota con comida así de dejas de decir pavadas."
Roger se había puesto de pie y había llevado a Teleri a un banco vacío . Él se sentó y le susurró, " Eres la mujer más bella que jamas haya visto ."
Ella le sonrió , de repente sintiéndose mucho mejor con esa ropa extraña que llevaba puesta.
Luego el agregó: "Pero estás rengueando . ¿ Qué te pasa?"
Ella se inclinó hacia atrás y levantó un poco su vestido para que el pudiera ver sus pies. Teleri llevaba apretados zapatos rojas con lazos atados alrededor de sus tobillos.

El frunció el ceño . "Espero que sean del cuero más suave. ¿Te duele?"
"Son suaves. Pero los puntos de costura me lastiman los dedos y los talones cuando camino ."
Él le palmeó la mano. " Te acostumbrarás."
"Al parecer, tu padre le dio órdenes a tus hermanas para que yo sea 'aseada'. "
Roger deslizó su brazo alrededor de sus hombros y dijo: "No uses zapatos por mí. No me importa andas descalza. Yo no soy mi padre, mi amor. "
Ella asintió.

Un criado vino con una bandeja lleno de tocino , jamón y riñones. Teleri lo observó con la boca abierta. Nunca había visto tanta carne en un solo plato en toda su vida. Y pensó que podría descomponerse. Afortunadamente, el criado colocó la bandeja en el extremo opuesto de la mesa.
Pero esa no fue solución porque a continuación llegó otro criado con una bandeja con un faisán asado, las plumas verdes y azules de la cola habían sido colocadas sobre el ave por lo que parecía como si estuviese dormida sobre la bandeja.

El hombre colocó la bandeja entre Roger y Teleri y ella jadeó . Sentada allí con el ave muerta delante de ella, casi podía sentir las lágrimas próximas a ser derramadas.
" Llevate eso lejos," Roger ordenó bruscamente.
Hubo un súbito silencio. Todos estaba mirándolos. Roger le pasó a Teleri una copa de vino y le dijo: "Aquí tienes , bebe esto. Tómalo en pequeños sorbos. Te ayudará a calmar tu estomago y a contener tus lágrimas."
"¿Qué hay de malo con el faisán?" gritó su padre.
"Nada”, contestó Roger.
"Debe haber algo malo. Mandaste a que lo sacaran de la mesa."
" No de la mesa. Yo sólo lo quería lejos de mi esposa, Padre."
"¿Por qué?"
"Ella no come carne."
Su padre frunció el ceño mirando Teleri. "No comes carne? Nunca he escuchado una estupidez mas grande. No me extraña que ella esté pálida y sea tan menuda. Dime, niña, ¿por qué no comes carne?"
"Dícelo ,” dijo Roger. "Dile lo que me dijiste la primera vez."
"No, Roger. Por favor".
"Dicelo ".
"Si, niña. Dinos a todos ." Su padre gritó.
"No puedo comer carne, mi lord ", ella dijo tranquilamente.
"Te pregunté por qué."
"Sander! ", Lillianne tomó el brazo de su marido. "No molestes a la niña. Ella puede comer lo que quiera."
"Yo quiero saber".
"Dícelo,” dijo Roger. " Vamos. El quiere saber."

Teleri levantó su mentón y miró directamente a su suegro. "Porque, Baron, yo jamás podría comer algo que tenga rostro".

El silencio en la gran salón se hizo tan pesado y denso que podría haber sido cortado con un cuchillo . Entonces, en ese exacto momento, otros de los criados entró en el saló con una enorme bandeja conteniendo un jabalí asado con una manzana roja encajada en su boca.
Y nadie comió.