miércoles, 28 de julio de 2010

DONDE EL VIENTO ME LLEVÓ - CAPITULO 32 - SANDRA HILL

CAPITULO 32


Una hora más tarde, Selene estaba parada con la vista fija fuera de la ventana, observando el crepúsculo caer sobre el Bayou como un suspiro. Cuándo había empezado a amar la serenidad de ese pantano agreste ?
Levantando una mano para colocar una mecha cabello detrás de su oreja , respiró profundamente mientras el aroma del jabón de lavanda de Blossom penetraba sus fosas nasales . Selene había tomado un baño en ausencia de James, aunque se había puesto
el mismo vestido nuevamente, dejándole a los zapatos y las mediasen su cuarto.
Una puerta fue golpeada y voces suaves flotaron en el aire hacia arriba a través de la casa silenciosa. La voz masculina de James
Se entremezclaba con la risa sonora de Blossom en la cocina. Selene oyó a la cocinera caminando y arrastrando los pies hacia
su cuarto en el piso inferior, luego a James cerrando las puertas y las ventanas. Luego subiendo la escaleras hacia el tercer piso para cerrar las ventanas de allá
Finalmente oyó sus pasos bajando la escalera delantera hasta el segundo piso ... y hasta su cuarto .
Su cabello estaba húmedo y peinado hacia atrás , y la camisa blanca estaba abierta hasta casi la cintura. Él debía haber tomado un baño en algún lugar al aire libre, probablemente en el riacho detrás de la mansión.
Sus ojos, de un azul humeante de pasión, encontraron los de ella por un momento, luego recorrieron su cuerpo con aprecio. "No te muevas," él pidió en voz baja y ronca mientras iba a cerrar las puertas y las ventanas de ese piso.
Selene se volvió hacia la ventana alta, temblando con anticipación. Verdaderamente, ese marcaba el primer día de su vida. Nada de lo que había sucedido antes tenía importancia. El hecho que ella proviniese de otro siglo era casi un detalle . Ella y este hombre estaban destinados a estar juntos . El cómo y el por qué eran irrelevante.
James se acercó por detrás de ella, enlazando su brazo alrededor de su cintura. Selene colocó su cabeza hacia atrás , apoyándola en su hombro, exponiendo la curva de su cuello para un beso suave.
"Oh, querida, he estado esperando por este momento por tanto tiempo".
"Toda una vida," ella aceptó , envolviéndose en sus brazos.
James plantó las manos en sus caderas y la empujó más cerca , dejándola saber cuan excitado estaba.
" Por qué sonríes , James?"
"Vos me haces sonreír, querida ". Y él sonrió todavía más ampliamente.
Selene pensó que iba a tener un paro cardíaco. " Eso es bueno ? Hacerte sonreír ?"
"Muy, muy bueno," él le aseguró mientras su boca descendía sobre la de ella .
Selene gimió.
James sonrió contra sus labios. " Ya he encendido tu fuego ?" Él bromeó.
"Bien , definitivamente siento el calor de tu llama".
Él se sonrió , luego se puso serio. " Quiero hacer que esto dure para siempre".
"para siempre? Estás muy confiado en tus habilidades amatorias".
"Extremadamente ". Él agarró su cara entre sus manos, para acomodar el beso. Al principio, sólo rozó sus labios contra los de ella - emitiendo suaves sonidos de placer.
Cuando los labios de Selene se volvieron flexibles, él cambió el beso de cortés y persuasivo a exigente.
James la reclamó con intensidad salvaje.
" Nunca supe que un beso podía ser tan erótico, James," ella confesó, respirando irregularmente. Selene retrocedió
y rastreó la línea de su boca con ternura extrema. " Amo tus besos".
" Y yo amo la forma en que me haces besar ," él dijo con voz áspera . Poniéndole una mano sobre su garganta, él se movió hacia abajo, pero esta vez el beso fue completamente diferente. "Ábrete para mí, Selene," él gruñó contra su boca.
Cuando ella accedió, su lengua se deslizó dentro de su boca, quemándola, llenándola de una increíble plenitud. Y cada zona erógena de su cuerpo se estremecieron con un temblor palpitante.
"Me estás matando, Selene," él gimió finalmente, jadeando contra su cuello.
" No creo que pueda esperar, James," ella dijo. James acarició sus pechos . Ella jadeó . El placer del contacto contra el pezón sensibilizado casi la llevó al clímax.
James vio su reacción. Y supo lo que tenía que hacer.
Sacó la mano de su pecho. " Demasiado pronto, Selene ...demasiado pronto. Pienso que ahora sos una mera brasa. Y es suficiente para la hoguera que te prometí ".
" Brasa !"
" Bien , pude estar equivocándome. Quizás debería inspeccionar, " él dijo enigmáticamente y dio un paso atrás . " Me dejarías inspeccionar , querida. ?"
" Qué?" Por el amor de Dios , cada hormona en su cuerpo gritaba de satisfacción. En este punto, ella estaría dispuesta a saltar de un acantilado si James se lo pidiese.
En vez de esperar la respuesta , James tomó su mano y la condujo a un sofá cercano - un diván donde damas indolentes leían o comían bombones llamado chaisse longue.
Pero James no tenía en mente ni literatura ni comida.
Recostándola en el sofá , él comenzó a levantar el dobladillo de su vestido.
"James, no sé si ... ," ella protestó.
" Shhh. Accede , querida. Quiero inspeccionar tus ... brasas ". Antes que ella tuviese posibilidad de pensar, él levantó el borde del vestido hasta la cintura, exponiendo su cuerpo desnudo.
"Brasas," Selene se jadeó cuando él se arrodilló cerca de sus pies desnudos.
"Confía en mí, querida," él dijo con una voz pesada.
Selene vaciló, luego dejó caer sus manos . James pasó las puntas de los dedos a lo largo de las piernas. " Por qué tus piernas son tan suaves ?"
" Me afeité".
Él se rió.
"Con tu navaja de afeitar".
" Eso si que debe ser un espectáculo ". Él se movió entre sus piernas, separándolos. Pero nada comparado con esto ".
Selene se sentía vulnerable e increíblemente excitada.
" Veo tu fuego, Selene," él le informó , "pero es un calor húmedo". Avergonzada, ella intentó cerrar las piernas, pero fue en vano. "Ah, finalmente veo la fuente de es calor".
Ligeramente James pus la punta del dedo sobre su clítoris . Selene comenzó a arquearse con el orgasmo inminente.
Pero James no eso quería todavía. Abruptamente él bajó su vestido nuevamente y la hizo poner de pie , besándola tiernamente en los labios.
" Vas a detenerse ahora?" Ella preguntó incrédulamente.
"Si," él dijo, abrazándola y guiándola hacia las escaleras.
" Estoy en una agonía".
"Disfruta esa agonía ... de anticipación".
" Vos también estás en agonía ?"
"Definitivamente".
En la escalera ancha, él la observó con una sonrisa conocedora.
Y ella entendió.

Con la agilidad de un caballero sureño , James la alzó en sus brazos y procedió cargarla por las escaleras, cumpliendo con su fantasía. A mitad de camino , él le advirtió con un gruñido erótico, " Lo juro, Selene, si me llamas Rhett, voy a dejarte caer ".

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