lunes, 3 de agosto de 2009

LA GEMELA GUERRERA - DONNA FLETCHER - CAPITULO 4

Capítulo 4


Tarr llegó a su casa para descubrir que nada malo le había sucedido a su castillo o a los miembros del clan. Entonces cuestionó la veracidad del mensaje que había recibido . Si Raynor había atacado sus tierras, por qué no había indicios de daños?
Quería respuestas, pero primero iba a interrogar a los tres prisioneros que había traído , incluyendo Raynor.
Los otros tenían heridas en las piernas y no habían podido escapar como los demás . Se curarían, y probablemente Tarr los dejaría volver a sus hogares. Pero la situación con Raynor era diferente.
Un clima de celebración flotaba en el aire mientras hombres y mujeres del clan saludaban a los guerreros victoriosos que retornaban al hogar. Esposas de brazos abiertos daban la bienvenida a sus maridos, niños corrían para estar lado de sus padres, y levantaban sus cabecitas con miradas de admiración, al tiempo que todos le sonreían con orgullo a su valiente líder, Tarr de Hellewyk.
El jefe del clan agradecía las felicitaciones mientras observaba las miradas curiosas que convergían hacia las gemelas. El clan sabía que él había partido a buscar una esposa y volver casado, pero las novedades pronto correrían de boca en boca con la velocidad del viento, y en breve todos estarían al tanto de la charada sobre la identidad de Fiona y Aliss.
Tarr vio a las dos desmontare , una se arrodilló , preocupada por Raynor, y la otra se apostó a su lado. Había esperado notar alguna diferencia entre las dos, por menor que fuese, pero ellas parecían idénticas en todo, e intentaban imitar el carácter una de la otra, deliberadamente para confundirlo todavía más .
Las dos tenían cabellos largos y ondulados, de un color pelirrojo brillante. Los ojos de ambas eran verdes como el follaje de primavera, y sus labios parecían cerezas maduras. La tez era muy clara y suave, ambas levantaban el mentón cuando se sentían amenazadas, y tenían lo misma sonrisa vivaz y alegre. Físicamente, eran idénticas.
Las dos mujeres eran deslumbrantes.
Ordenó a dos de sus hombres que lo siguiesen mientras se aproximaba a Fiona y Aliss.
- Una celda aguarda Raynor y a sus guerreros en la parte subterránea de mi castillo- les avisó, desde lo alto de su caballo.
Aliss no lo miró, mas replicó :
- Entonces me quedaré allá con él.
- Y yo acompañaré a mi hermana - remató Fiona.
- Las dos se quedarán a donde yo determine - dijo Tarr.
Aliss que estaba arrodillada, se levantó con una fuerza que casi derribó a su hermana al aproximarse a Tarr.
- Cómo puedes ser tan impiadoso, y condenar a un moribundo a la mazmorra?
- Raynor es mi enemigo y se condenó a sí mismo cuando invadió mis tierras.


- Tarr pensará que queremos confundirlo de nuevo, y continuará desorientado.
- Y vos tendrás tiempo para comer más - bromeó Aliss.
Fiona suspiró, deleitada.
- La idea es maravillosa, pues me estoy muriendo de hambre.
- Voy a necesitar más velas, un balde con agua y trapos limpios - pidió Aliss. - La chimenea necesita más leña. No quiero que este cuarto esté helado.
Fiona trató de colocar más leña en el fuego.
-Voy a buscar velas, agua y trapos limpios, pero recuerda, Aliss, de que debes estar lista para la cena y en determinado momento debes mostrar prisa para volver a ver a Raynor.
- Si . Nosotras somos tercas, Fiona, pero Tarr tiene fama de siempre lograr lo que quiere, y está determinado a casarse con una de nosotras.
-Crees que no podremos vencerlo?
-Tal vez si. Esta noche , cuando estés a solas con él, trata de descubrir lo máximo posible respecto a él . Después tendremos que compartir toda la información que consigas.
-Venceremos, Aliss. Nadie nos va a separar.
- Si , pero... será una victoria dulce o amarga?

Las gemelas entraron en el gran salón . Habían tomado un baño, se habían librado del polvo y la sangre del viaje, y se habían puesto ropas limpias. Ambas usaban faldas verdes y blusas color crema. Sus mejillas estaban rosadas, sus largos cabellos amarrados sobre sus espaldas.
Ambas se aproximaron a la mesa principal.
- No están celebrando a victoria? - preguntó Fiona, parándose delante de Tarr y mirando a su alrededor . - Esperaba encontrarte con una jarra de cerveza levantada celebrando con tus hombres.
- Sin duda, vos sos la que no tiene pelos en la lengua - comentó con una sonrisa el hombre sentado al lado de Tarr.
- Quién sos ? - preguntó Aliss.
- Kirk - respondió él, levantándose con caballerosidad .
Tarr hizo las presentaciones.
- Kirk es un gran amigo y se convirtió en padre hace poco tiempo.
- Qué maravilloso! - exclamó Fiona. - Niño o niña?
Kirk sonrió, llenando su pecho con orgullo.
- Un varón!
- Felicitaciones - dijo Aliss con sinceridad.
- Y a quién se lo debo agradecer? - preguntó Kirk, provocador.
- La elección es tuya, Fiona o Aliss.
- Entonces les agradezco a las dos y espero llegar a conocerlas bien. - Kirk tomó una manzana de una fuente.
- Debo irme. Aprovechen la cena , y buenas noches . Mi esposa todavía no se recuperó del parto y está muy débil .


Entonces Tarr se quedó a solas con las gemelas. El líder había dado instrucciones para no ser molestados ni por los criados, por lo tanto la mesa ya estaba servida con toda la comida , cerveza y vino.
Quería concentrarse en las gemelas y en nada más. Seguramente ellas ya habían comenzado a cansare de la broma y del esfuerzo que hacían para confundir a todos. Eso era una ventaja para él, Tarr pensaba. Esperaba salir victorioso dos veces en el mismo día.
Mientras hacía sus cálculos, Fiona y Aliss se sentaron en el banco de enfrente. Ambas levantaron sus jarras al mismo tiempo, mientras Tarr les servía vino.
-Leith me contó que fueron a vivir con su clan hace diez años - comenzó a decir el líder. - Cuando tenían once años.
-El padre de Leith, Tavish, era nuestro tío y se ocupó del funeral de papá. Fue a él que mi madre le reveló que estaba enferma. Tío Tavish le prometió que se haría cargo de nosotras - explicó Fiona.
-Lamentamos también que tu padre haya fallecido - murmuró Aliss.
Tarr asintió .
- Lo extraño . El me enseñó todo lo que sé.
- Y tu madre ?
- Ella también murió , hace un año. Todos lamentan su pérdida.
-Tienen hermanos ? - quiso saber Fiona, mordisqueando un pedazo de pan.
- No , soy hijo único.
- Es por eso es que quieres tener muchos hijos? - preguntó Aliss.
- Mi sangre continuará en el clan de los Hellewyk.
- Y en el caso que sólo tengas niñas? - insistió Fiona.
Tarr sonrió.
-Estoy seguro que tendré hijas... e hijos.
- Y si tu esposa no quisiera tener una prole numerosa?
- Una buena esposa hace lo que su marido le ordena.
- Menos mal que no dijiste una esposa "obediente" -se burló Fiona, atacando un pedazo de queso.
- Debes ir a ver a Raynor - murmuró Aliss, cortando una manzana y mirando a su hermana de modo deliberado.
Fiona sacudió la cabeza .
- No . Es tu turno.

Aliss fingió irritación.
- Ya estuve mucho tiempo al lado de él. Te toca a vos.
Tarr levantó a mano.
- Paren de discutir. Una deberá ir, poco me importa cual de las dos, no quiero participar más de la charada de las gemelas por el día de hoy.
- Yo voy, entonces - dijo Aliss, fingiendo sentirse molesta.
Se levantó de mala voluntad , se robó una manzana, como si todavía tuviese hambre, y saludó a los dos.
Cuando Tarr y Fiona se quedaron a solas , el guerrero continuó la conversación :
- Planeas ser una buena esposa?
- Si , si amo a mi marido.
Tarr hizo una mueca.
- La manía de las mujeres! El Amor! Los juglares escriben tonterías poéticas sobre el amor y cantan melosas canciones , y las muchachas tontas se quedan aguardando la llegada del príncipe azul. - Tarr apoyó los brazos sobre la mesa y miró a Fiona. - Yp prefiero a una mujer fuerte, valiente, honesta y con los pies bien plantados en la tierra . Una mujer que esté a mi lado en una batalla, si es necesario, y que pueda darme hijos saludables que den continuidad a mi estirpe.
- Y el amor?
- El coraje de enfrentar la vida juntos es amor.
Fiona juntó sus manos.
-Entonces eres poeta también?
- No me insultes! - bromeó Tarr.
- Estoy hablando con franqueza, como vos. Dejaste en claro lo que deseas de una esposa. Debes haber tenido muchas candidatas.
Los ojos de Fiona brillaban como dos piedras preciosas, y Tarr se sintió tentado de besar esos labios rojos.
- Estás preguntando si fuiste mi primer elección ? - murmuró el guerrero, jugando a sacar verdad de mentiras.
Pero ella no cayó en la trampa.
- Claro que no, Fiona es la candidata perfecta para llenar tus requisitos.
Tarr dejó escapar una carcajada.
- Tienes razón . Todos los clanes que me ofrecieron candidatas a esposa, pero Fiona fue la candidata que más me interesó. Su reputación es famosa en la región.
-Qué reputación?
- Oí decir que es una excelente amazona y cazadora. Sabe manejar casi todas las armas tan bien o mejor que muchos hombres, y protege a su hermana como una leona protege a sus crías. Y entonces me di cuenta que será una buena madre, es el tipo de mujer con quien quiero casarme.
Fiona dominó su orgullo y replicó con aire serio:
- Pueden ser sólo cuentos y no la verdad,
- No , fueron muchos los comentarios y sólo pueden ser verdaderos. - Tarr sonrió. - en particular, me gustó la historia de un joven que desafió Fiona a una competencia de arco y flecha. El joven le dijo que vencería y que quería la mano de Aliss en matrimonio como premio.
- Fue muy estúpido!
- Si , porque Fiona lo venció, y él la acusó de haber hecho trampa. Y Fiona le dio una buena zurra
Tarr se rió.
- Tu clan cuenta esa historia con mucha gracia y orgullo. Cuando ese joven quedó caído en el suelo con la nariz sangrando, Aliss corrió a ayudarlo.
- Es lo que hace una buena curandera con cualquiera que esté lastimado. Pero Aliss dejó claro que no lo desposaría.
- Eres linda - murmuró Tarr, desviando la conversación de modo súbito.
Sorprendida, Fiona no respondió.
- Las historias que he oído también hablaban de la belleza de las gemelas, y muchas aseguran que los cabellos pelirrojos de Fiona le dan la pasión por la lucha, y los de Aliss le inspiran atracción por la curación. - La miró intensamente.
- Me pregunto cuáles son las otras pasiones de Fiona...
Estática, ella lo vio inclinarse sobre la mesa, sujetar su mentón y aproximar los labios.
Fiona se estremeció como si le hubiesen arrojado un balde con agua fría, y se apartó sin pérdida de tiempo, antes que los labios de Tarr la tocasen.
- Sos muy presuntuoso y atrevido Tarr de Hellewyk!
- Solamente quería robarle un beso a mi futura esposa.
-No juegues conmigo! Si piensas que besándonos vas a descubrir nuestra identidad, está muy equivocado!

Agarró una manzana y comenzó a pelarla con tanta energía que casi la partió en dos.

- Por qué crees que pensé en el beso como método para descubrir quién es quien? Fiona apuntó el cuchillo en su dirección.
- Las reacciones revelan mucho sobre las personas.
-Tienes razón , y tu reacción en este momento es de rabia, lo que te asocia más a Fiona que a Aliss.
En respuesta, Fiona atacó la fruta con más fuerza, soltando un grito al sentir la hoja del cuchillo herir su mano. Pero cuando Tarr intentó ayudarla, ella retrocedió .
- Sé curar mis propios heridas, gracias. - Al verlo fruncir el ceño , sonrió, aprovechando la oportunidad para confundirlo. -Ahora mi reacción te hizo recordar a Aliss'? Ten cuidado, Tarr, pues puedes meterte en un gran lío escogiendo a una de nosotras dos.
Fiona se levantó y dejó el salón, pasando por al lado de los centinelas que dormitaban, hasta llegar al cuarto que había sido destinado a Raynor de Blackshaw.
Aliss levantó la vista de las hierbas que preparaba en el fuego de la chimenea, mientras Raynor permanecía inconsciente en la cama. Fiona levantó la mano herida, y su hermana corrió hacia ella.
-Qué pasó ? - preguntó con voz ansiosa.
- Sabes lo que él hizo?
- Te Atacó con un cuchillo ?
- No , yo misma me herí, pero fue culpa de él.
- Debe haberte hecho enojar mucho , puesto que no sueles cortarte con cuchillos.
- En verdad, fui una tonta, Aliss.
- Qué sucedió ?
- Tarr me besó. Pero no fue el beso lo que me enojó, sino la intención de él, - Fiona miró a Aliss con un brillo furioso en sus ojos verdes. - Quería ver mi reacción !
-Entonces fue todo premeditado...
- Tarr no quería realmente besarme de verdad, sólo descubrir cual de nosotras dos yo era.
- Y a vos te hubiese gustado que él te besase porque se sentía atraído... por vos en especial ?
- Nada de eso! - Fiona miró a su hermana quien la encaró con expresión divertida.
- Yo ... bien , me sentí excitada con el contacto de sus labios. Fui una idiota. Estaba loca para recibir mi primero beso, pensé que Tarr... quería besarme por ser... porque yo soy ...
- Fiona, tienes derecho a desear un beso.
- Pero no tengo derecho a ser imbécil! Y vos, Aliss, como ya fuiste besada y sabes como reaccionar.
- Bah ! Unos besitos de unos muchachos inexpertos de nuestro clan.
- Pero lo suficiente para que te sintieses deseada como mujer. Yo jamás conocí esa sensación.
-Quieres que Tarr sienta ganas de besarte porque sos Fiona?
- No ... Si ! - Fiona levantó las manos en un gesto de desesperación. - Ya te dije : soy una idiota.
- Por qué no besarlo?
-No tengo la menor intención de casarme con él.
Aliss sonrió, lanzándole una mirada maliciosa.
- Es un hombre guapo y un excelente guerrero. Por qué no concederle un beso para poner a prueba sus sentimientos?
- Y si me gusta? - preguntó Fiona. - Qué va a suceder?
- Eso dependerá de vos.

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