En Nortumbria, el cuerpo del barón Mortain yacía en la mesa del salón principal del castillo Mortain esperando el entierro. La furia de Roger era palpable. El nuevo barón había odiado a su padre con la misma intensidad con que había sido odiado por él. Ahora tenía asuntos más urgentes que resolver antes de proveerle un funeral al viejo.
-Tu alma aguardará hasta que yo vuelva - Roger le dijo al cuerpo. - No encomendaré ninguna misa para apresurar tu absolución, igualmente es más probable que vayas al infierno.
Se dirigió con prisa al cofre de su padre. Tomó oro y joyas y
fue a el castillo Wycliffe. Algunos meses antes el barón le había negado la mano de Lynette por no tener dinero. Hoy, era un hombre rico. Dos días después , Roger sacudía una caja llena de monedas de oro en la mesa y la cara de Wycliffe.
- Llame a Lynette - él ordenó, mirando con desdén a la esposa y las dos hijas del barón.
Cuando el noble no acató su orden de inmediato, se inclinó amenazadoramente sobre a mesa, la nariz casi tocando la cara temblorosa.
_ Voy a precisar un poco de tiempo - él balbuceó y tomó una esmeralda con manos codiciosas.
_ Tiempo? Para mandar a buscar a una mujer al piso de arriba? Mande a llamar un sacerdote, pues nos casaremos inmediatamente. - Y con un aire de superioridad fue hasta la escalera y gritó : - Lynette! Baja para saludar a tu maridito.
Cuando ella no apareció , Roger insultó y prometió azotarla por desobediencia.
-Ella no puede oírlo - Wycliffe le dijo cuando Roger volvió a la mesa. - El Sin Alma cruzó los portones hace menos de quince días y exigió que Lynette lo desposase - completó en un aliento el noble . Segundos antes que la mano de Roger se cerrase sobre su garganta, todavía pudo decir: - él no me dejó alternativa. Temí por mi vida. él me forzó a firmar el contrato nupcial.
Wycliffe la había entregado al Sin Alma? Un salvaje. un bárbaro. un bastardo. La ira de Roger estalló . Lynette le pertenecía . Sujetando a Wycliffe por el cuello, ignoró los gritos y pedidos de las mujeres y sólo lo soltó cuando tres guardias se colgaron de sus brazos.
El barón, temblando de pies a cabeza, balbuceó un sollozo :
- Juro que no pude controlar al bárbaro, pero tal vez haya sido mejor así. Podrías llevarte una de mis otras hijas.
Priscilla y Elizabeth se encogieron . Querían un marido, pero no a ese . Pero sus temores fueron infundados, pues Roger no quería a ninguna de ellas. Los dotes de las dos, sumadas, no eran comparables a la propiedad de Caer Cadwell.
Solamente después que Wycliffe juró pedir a ayuda a su lord superior , el barón Hugh de Carswell, Roger dejó de lanzar espuma por la boca. Retiró la esmeralda de la mano del viejo, y la volvió a colocar en la caja y la cerró con llave . Hasta que tuviese a Lynette, ese viejo de mierda no pondría un dedo en su tesoro.
Al regresar al castillo Mortain, las criadas desaparecieron temerosas y los hombres intentaron pasar desapercibidos para no tener que enfrentar la ira del nuevo barón. Roger se quedó delante del cuerpo de su padre todavía sobre la mesa.
-Esto es culpa tuya, alimento para gusanos. Si me hubieses dando el dinero, Lynette sería mía hace mucho tiempo. Las riquezas de Caer Cadwell me pertenecen. Debería haberte matado antes! Es desgraciada ... cómo se atrevió ? Me rechazó , pero aceptó a ese maldito animal?
Ella lo había traicionado. Había afirmado que ya no era virgen y , si no fuese por los guardias, la habría tomado de cualquier manera. Estando embarazada, no podría haberse negado a casarse con él. No tendría alternativa. Se ocuparía de que ella no tuviese alternativa cuando la encontrase nuevamente.
En la última semana, el grupo de Mereck había viajado atravesando las tierras de Morgan. Llegarían a Blackthorn al día siguiente. Netta planeaba persuadir a Bleddyn de convencer a su padre de liberarla del contrato nupcial.
Por cierto podría atraer mejores pretendientes. Santa Mónica le proveería algo mucho mejor do que el hombre escogido por su padre. Mereck la cortejaría? Se ruborizó. Cómo sería tener esas lindas manos sobre su cuerpo? Los pezones se pusieron erectos ante esa idea.
Santos del cielo! Qué la había hecho pensar algo así ?
_ Ven, Elise, vamos a escoger lo que nos pondremos mañana. Debes estar bonita, en caso que lord Damron haya escogido un consorte para vos.
_ Un consorte? Crees que él planeó un casamiento sin comunicárselo a papá? Dios me ayude! él es mucho más severo que Connor.
_ Quién es Connor?
_ Es el primo de lord Damron y su primero en comando . Cuando lord Damron vino a buscar Brianna, Connor lo acompañó. El es bastante simpático, pero siempre se altera con mi menor comentario. Y también le vocifera a cualquier hombre que se me aproxime . - Con una sonrisa, ella sugirió : - Quizás me está intentando cortejar?
_ Por que había cosa así ? Por lo que me dijiste, es el tipo de hombre que te prohibiría las más mínimas cosas.
_ Pero es muy guapo. Tiene ojos castaños que brillan cuando sonríe. -- Elise tenía una expresión soñadora en la cara . - El cabello también es castaño y te da ganas de acariciarlo - ella suspiró. - él es tan alto cuanto Mereck o Damron, pero es mucho más bonito.
Netta sonrió . Cómo Elise no se daba cuenta que estaba interesada en él ? Sería muy interesante observarlos juntos. Pero si ese Connor no fuese un hombre adecuado para el alma gentil de su amiga, ella la protegería.
Poco después de separar las ropas, oyeron la voz de Mereck llamando a Netta. Ella sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. Esta sería la última noche que dormiría al lado de él. Se ruborizó, pues se acordó que muchas veces había despertado y se había descubierto anidada en sus brazos fuertes.
Ayudó a quitarle la ropa de Elise y salió de la tienda antes que él la llamase una segunda vez, pues era inflexible cuando ordenaba algo . Después que llegasen a Blackthorn, él ya no tendría ese derecho, pues su posición como lady Lynette de Wycliffe la protegería de ese hombre dominante.
Netta despertó con el torturante perfume a lavanda y con los latidos rítmicas de un corazón cerca de su oído. Estaba anidada en el pecho firme y deliciosamente caliente. Jadeó , después contuvo la respiración al levantar la cabeza para observarlo . él estaba despierto.
No sólo los ojos de Mereck estaban abiertos, el tono verde oscuro la hizo notar que algo más profundo le pasaba. Netta parpadeó, deseando que él desviase la vista , pero continuó siendo observada de una manera que le provocaba escalofríos en el cuerpo. Los labios se curvaron en una sonrisa maliciosa. Netta llevó la manta hasta a altura del mentón y su mirada lo acusaba por su debilidad. La sonrisa de Mereck se ensanchó.
-Verás que nuestros cuartos en Blackthorn serán más que satisfactorios - él murmuró, acariciando sus cabellos.
La voz de él provocó nuevos escalofríos en Netta, quien sujetó la manta con más fuerza.
_ Seguramente compartiré el cuarto con Elise.
_ Al principio, si. - Mereck volvió a sonreír con placer y la voz se hizo más profunda. - Y después tendrás un compañero de cama más interesante .
Ella iba a contra argumentar cuando él la interrumpió :
- Mi lady, si ya terminaste de provocarme, debo levantarme.
Ella jadeó y se apartó. Mereck sonrió y se levantó.
- Después que haya terminado de vestirme, despierta a Elise y prepárense sin demora. Mis hombres están ansiosos por llegar a su hogar. - Miró hacia abajo y ordenó : - Cierra los ojos.
Confundida, Netta obedeció hasta que la curiosidad le ganó . Mereck siempre se levantaba antes de despertarla. Entreabrió los ojos. él ya se quitaba el plaid escocés que lo había calentado durante la noche.
El era un gigante, su cuerpo emanaba poder. El cuello era fuerte, así como su mentón. Sombras oscuras indicaban que él se afeitaba todas las mañanas, antes que ella se despertase. El ancho de los hombros la dejó embobada. Jamás podría hacer una circunferencia alrededor de ellos con sus brazos. No es que tuviese intención de hacerlo.
La piel era toda dorada y el torso estaba recubierto por vellos castaños que desaparecían bajo la cintura. A medida que el plaid bajó un poco más , ella siguió la senda del vello hasta el área de su virilidad y entonces cerró los ojos con fuerza.
Aquello no podía ser normal. Con semejante obstrucción entre las piernas , cómo él podía caminar, o incluso cabalgar con un mínimo de comodidad?
Oyó el susurro de la tela de la ropa de Mereck y sintió cuando él se sentó a su lado.
-Levántate , Netta, y despierta Elise - él dijo .
-Estás vestido, ? - ella susurró.
El gruñó y Netta se enrolló en la manta y se sentó.
Mereck estiró la pierna derecha para ponerse las medias . A pesar de estar más cubierto, la pierna izquierda estaba expuesta. la mirada de Netta paseó por la pantorrilla y subió por el muslo musculosa, el ruido de los guerreros despertándose desvió su atención. Miró a su alrededor y apenas pudo creer lo que vio . Se puso de pie y corrió hacia la tienda de Elise. Mereck se rió y continuó vistiéndose.
- Despierta , Elise! . - Netta agarró los hombros de su amiga y la sacudió . - Sabías que durante todos estos días he estado durmiendo entre hombres desnudos?
- Desnudos ? Dormiste con ellos? Guuuuauuu!!!
-No exactamente dormir, pero es casi la misma cosa. Ellos estaban desnudos debajo de las mantas. Cuando me levanté hoy, estaban todos cerca y ni se dignaron a cubrir sus partes púdicas. - Netta parpadeaba repetidamente. - Ellos se rascaban en los lugares más extraños.
Elise corrió a la lona que hacía de puerta de la tienda y su risa dejó curiosa a Netta . Cuando se aproximó, un par de ojos verdes las miraba y las hizo retroceder. Ella se movió con tanta rapidez que perdió el equilibrio . Un fuerte gruñido se hizo oír del lado afuera de la tenda.
- Curiosas ! Vistanse y dejen de espiar . - fue la orden de Mereck.
Se arreglaron lo más rápido que pudieron. Elise se puso una túnica azul oscura sobre una camisa celeste. Netta se puso una camisa crema y una túnica verde esmeralda, del tono de los ojos de Mereck. Ataron sus cabellos y los adornaron con cintas combinando con los colores de sus ropas.
Netta vacilaba en dejar a tienda después que Mereck las había atrapado espiando , pero cuando Fergus las llamó informando que ellas partirían mismo sin haberse alimentado, acabó tomando a Elise por la mano y corriendo en dirección a Angus.
Los hombres parecían determinados a hacer que ellas los saludasen. Cada dos pasos, uno de ellos se aproximaba con una sonrisa maliciosa y les decía buen día. Elise respondía con la cabeza gacha y Netta, casi segura de que sabían que habían sido observados, susurraba sus saludos.
Mereck los guió a un paso rápido esa mañana. Sabía que Netta lo había espiado mientras se vestía. Su cuerpo lo había sentido y había reaccionado, su miembro había tenido una erección en anticipación. Dudaba que alguien le hubiese explicado a Netta lo que pasaba en la intimidad entre hombres y mujeres y se sentía feliz de eso. Instruirla en los deleites carnales que podrían proporcionarse mutuamente sería un placer sólo suyo.
Sacudió la cabeza e intentó apartar esos pensamientos. Netta estaba atravesando sus barreras de la misma manera en que ella se había aproximado todas las noches para sujetarlo con uno de los brazos o incluso con una pierna. A pesar de haber aprovechado bien la compañía de ella, no podría permitir que sus sentimientos se profundizasen.
Un temblor recorrió su cuerpo al acordarse de la voz de la vieja Beyahita. El aviso de que el destino de un Sin Alma era destruir a cualquier mujer de quien se enamorase todavía hacía eco en sus oídos.
Atravesaron un río, después siguieron el camino al costado del lago Loyal. Mereck ordenó un descanso en el extremo norte, pues estaban a menos de dos leguas de Blackthorn. Las mujeres podrían comer algo antes de la llegada.
Después de ayudar a Netta a desmontar, le hizo señas a Dafydd e hizo un pedido silencioso. El escudero fue hasta el equipaje y volvió con los brazos cargados. En lo alto de la pila, había un plaid escocés idéntico al que Mereck usaba. Tomándolo, él se volvió hacia Netta.
- Vestirás esto al entrar en el castillo para que todos sepan quién eres . - Lo enrolló a la cintura de ella y amarró las puntas en el hombro izquierdo, sujetándolo con un broche con el blasón de los Morgan como el de él. Tenía una mano sujetando una daga, la inscripción "Manu Forti" en lo alto del círculo y una barra en diagonal. Después de haber terminado, la sujetó por los hombros y la observó atentamente. - Querida, tu boca empujaría hasta a un santo a cometer pecados. - La voz era un susurro ronco y Mereck la sorprendió bajando la cabeza y rozando sus labios.
Mereck acabó sorprendiéndose también , pues, cuando se apartó, Netta tenía la expresión de una mujer que quería más: los ojos semi cerrados, los labios entreabiertos, y rubor en las mejillas.
El se dio vuelta y fue en dirección al bosque. Netta inspiró profundamente y luego contuvo la respiración. No quería perder el olor masculino que impregnaba su piel . Las rodillas se le aflojaron y deseó que los labios de Mereck se hubiesen demorado un poco más. Nunca había sido besada así.
De hecho, los pocos besos que había recibido habían sido forzados por hombres que despreciaba absolutamente.
Después que más de la mitad de los guerreros desapareció en el bosque, Netta se preguntó a dónde diablos todos ellos se habían metido. Cuando ella y Elise terminaron el almuerzo , resolvieron encontrar un lugar para lavarse las manos. Fueron solas , porque hasta el mismo Dafydd estaba fuera de vista, probablemente cumpliendo alguna orden de Mereck.
Siguiendo la dirección que los hombres habían tomado, pronto comenzaron a oír voces y risotadas. Curiosas, se aproximaron para ver qué sucedía.
Netta se detuvo de repente, y Elise, quien caminaba distraída, se chocó contra ella, haciéndola agarrarse a un árbol para mantener el equilibrio. Su amiga parecía haber adoptado el hábito de querer tirarla al suelo . Afortunadamente todavía había un árbol entre ellas y el agua.
Como Netta no dijo nada, Elise levantó la vista y , en seguida, sujetó los hombros de ella.
- Virgen Santa! Por qué están saltando en el agua?
Realmente saltaban y jugaban. Netta silenció a Elise antes que ellos pudiesen escucharlas. No era de extrañar que algunos de los hombres se pavoneasen al caminar, pues estaban muy bien formados, pero ninguno de ellos lograba equipararse a Mereck. Netta jadeó , pues justo cuando pensaba eso lo localizó con a agua hasta la cintura. El se dio vuelta con espuma en los hombros y los cabellos y rastrilló el área de los árboles con la vista .
él sabía que ellas estaban allí ? Cómo diantres era posible? él se sumergió para enjuagarse. Cuando se levantó y comenzó a avanzar con pasos largos hacia la orilla, Netta tomó a Elise de la mano para correr al campamento. Ewen estaba allá. Netta se detuvo al lado del soldado , tomándolo por el brazo, le imploró :
_ Si alguien pregunta, nunca nos movimos de aquí.
_ Claro - él respondió sonriendo.
Netta notó que él tenía los cabellos mojados. Demonios! él lo sabía! Las habría visto? Ruborizándose todavía más , pues no había prestado atención a las otras caras de los hombres.
Ewen les ofreció vino rebajado con agua y ellas tomaron con ganas .
A decir verdad , Netta necesitaba recuperar el aliento. Cuando los hombres volvieron , mantuvo la mirada fija en su regazo.
Después que los guerreros tomaron el resto de vino antes del último trecho de viaje, montaron y formaron una fila doble . Dafydd y Fergus condujeron a las muchachas hasta el principio de la fila donde Marcus esperaba solo, de frente a los hombres. Estirando la mano, sujetó las riendas del caballo de Netta.
Ella se sintió curiosa y lo encaró con una pregunta en los ojos, pero Marcus apenas sonrió sin decir nada. Estaban todos callados. Incluso los caballos parecían más calmos como si aguardasen algo muy importante.
- Qué está sucediendo, Netta? - Elise preguntó en un susurro.
_ No sé, pero creo que estamos esperando a Mereck. Dónde se metió?
Al final de la fila, los hombres comenzaron a gritar y a golpear sus espadas contra sus escudos. Netta se estiró , pero la fila era larga y ella no pudo ver nada. Pero de pronto divisó dos caballos marchando lentamente en su dirección. cuando distinguió los caballeros, gritó. Intentó tomar las riendas, pero Marcus las tenía bien agarradas. El la sujetó por los hombros, amparándola, pero también manteniéndola firmemente en la montura.
El primero caballero era un porta estandarte y llevaba un pendón escarlata con letras negras. En él se leía "Sin Alma".
El segundo caballo era M'Famhair y quien lo montaba era el bárbaro que ella había conocido en el castillo Wycliffe.
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