-Que Dios y los santos me protejan!
Netta intentó soltar los dedos de Marcus de las riendas de su pony sin éxito. Sintió nauseas con la aproximación del temido caballero. Se aferró al brazo de Marcus, y si no fuese orgullosa, se hubiese pasado a la montura del hombre para protegerse.
El bárbaro era un gigante y el viento levantaba su cabello, haciendo que se esparciese por su cara y sus hombros. Vestía el plaid y el kilt de los Morgan, dejando sus rodillas a la vista, y pieles de lobos, sujetas por un broche enorme, cubrían su pecho desnudo. Traía tiras de cuero atadas desde las manos hasta los codos y montaba a pelo. M'Famhair llevaba una manta en el lomo, más para su protección que para comodidad del caballero. Tenía parte de la cara pintado de azul y paseaba sus ojos por los guerreros alineados, que demostraban orgullo y disciplina en sus hombros y espalda erectos.
Elise, aterrorizada, exclamó :
_ Santa Inés , es el bárbaro! Netta nos encontró !
Sin siquiera pestañear, él fue en dirección a Netta.
Los dientes de ella castañeteaban y ella los cerró con fuerza, trayendo el mentón cerca del pecho para no dejar traslucir el miedo que sentía. La imagen del Sin Alma era aterrorizante.
Cuando estuvo suficientemente cerca como para que pudiese ver sus facciones, notó ojos verdes claros que la observaban. Se estremeció aún más.
-Saludos, mi prometida.
La voz era suave, muy parecida a la de Mereck.
-No puede estar aquí, te dejé en otro lugar .
_ Qué hiciste con Mereck de Blackthorn? - Netta luchaba para conseguir pronunciar as palabras. La boca estaba tan seca que apenas podía tragar. - Marcus, este hombre nos siguió y mató a tu líder y encima pretende hacerse pasar por él. No ves que sus caras son parecidas?
Ella se movió en la montura para apartarse lo máximo posible.
_ No, mi lady, nuestro líder está delante de nosotros. M'Famhair jamás permitiría que otro hombre lo montase.
_ Pero él está vestido como el salvaje.
_ Sir Mereck rara vez viaja con ropas escocesas. Sólo lo hizo esta vez para evitar impactarte . El da preferencia a las costumbres galeses. - Marcus hizo una pausa. - Fue cuando lo vio por primera vez en el castillo.
El establo! Cómo no había reconocido a Marcus como el hombre que había traído el caballo que la había llevado a Ridley? Netta se sintió mal, cubrió su boca y cerró los ojos. Quizás si los mantuviese cerrados por un buen tiempo, el salvaje desaparecería y Mereck estaría en su lugar?
Sus hombros temblaban y manos gentiles los tocaron. Ella retrocedió .
-Vamos, mi lady, no me mires de ese modo. Soy el mismo hombre cuya manta estaba al lado de la tuya durante todo el viaje. - Con los labios cerca del oído de Netta, intentó convencerla: - EL mismo hombre cuyo calor vos compartiste _ él susurró.
Netta se acordó de esa mañana que había despierta abrazada al cuerpo masculino. EL cuerpo del bárbaro! Sintió el olor de Mereck, que siempre provocaba en ella las mismas sensaciones desconocidas y se estremeció . Aún así , mantuvo los ojos cerrados.
-Estás usando pieles. Tus hombres no usan pieles de lobos.
-En Caer Cadwell verás muchos hombres vestidos de esta forma. Tendrás que acostumbrarte.
Netta entre abrió los ojos y se dio cuenta que su miedo divertía a los guerreros. Dafydd y Fergus se aproximaron para asegurarse que todo estaba bien.
Ellos no entendían. No eran sólo eran las ropas. él era el hombre a quien su padre la había dado en matrimonio. El mismo hombre sobre quien había oído terribles historias.
Antes que pudiese preocuparse más, escuchó el grito de una águila. Sus ojos se abrieron enormemente cuando oyó el eco de ese grito muy cerca . Mereck había respondido al llamado del ave. El águila bajó en círculos hasta pronto encontrarse encima de sus cabezas. Mereck levantó el brazo y silenciosamente el ave se posó sobre la muñeca cubierta por cuero.
- Cloud Dancer, vi que nos observó estos últimos días. Viniste a hacernos compañía hasta el castillo, verdad ? - Mereck emitía suaves gorjeos al pasar sus ojos del ave hacia Netta. El águila hizo lo mismo: miraba alternativamente a Mereck y a Netta.
Cloud Dancer parecía analizarla y Netta se sintió cómoda con su observación atenta. Se calmó y , para su propia sorpresa, le sonrió al animal.
El ave subió de costado por el brazo de Mereck hasta pararse en el hombro ancho y después pió como si permitiese que continuasen el viaje.
Mereck asintió y , con un seña, pidió que Marcus se uniese a él en la línea delantera para hacer el último trecho. Elise y Netta no tuvieron más tiempo para preocupaciones o reclamos, pues Mereck condujo a todos a un ritmo más veloz.
_ Netta, por qué no me dijiste que Mereck era el bárbaro? Cuando él vino a Ridley, jamás lo vi vestido así - Elise comentó.
- Estoy tan confundida! Salvaje. Bárbaro. Sin Alma. Mereck. No sé quien es ese hombre. Pero si él tiene el contrato nupcial, qué será de mí?
_ Bleddyn, como lord supremo de Caer Cadwell, te ayudará. El tendrá la palabra final sobre quien deberá casarse con vos.
Se serenaron después que Dafydd comunicó que estaban en tierras de Blackthorn. El bosque terminaba al pie de la colina e, más adelante, la tierra se elevaba en una suave loma. Una aldea con campos cultivados se divisaba más adelante.
El castillo quedaba en la extensión de tierra paralela a la bahía, de norte a sur. Había pequeños ríos formados en el lado este que lo protegían de ataques. En las zonas norte, sur y oeste había fosos y toda la construcción estaba cercada por inmensos muros.
Se detuvieron para que Netta observase la escena antes de proseguir, pero ella se sobresaltó al oír la voz de Mereck:
-No teman , nadie las maltratará en su nueva casa. También tendrán mucha compañía femenina, pues además de Brianna y de Meghan, hermana de Connor, también están las esposas de los caballeros y de los habitantes del castillo. Lady Phillipa se ocupa de todos.
-No tengo miedo - ella dijo con convicción. Esa declaración lo sorprendió, pues no era eso lo que demostraban sus pensamientos fragmentados: carácter salvaje... sola... proteger Elise... quien me defenderá? Sintió una puntada de arrepentimiento por haberla dejado presenciar su descontrol en el bosque. Deseaba asegurarle que jamás la lastimaría, siempre y cuando cumpliese la promesa de nunca amarla. Pero estaría siempre a su lado, defendiéndola de cualquier mal.
Al aproximarse, las personas de la aldea salieron de las casas para observarlos, gritando sus saludos por el retorno de los hombres. El olor a comida casera era la mejor recepción que los guerreros podrían desear.
Los aldeanos debían estar acostumbrados a tener una inglesa como esposa del lord, pues sonreían y las saludaba cuando pasaban por al lado de ellas. Netta saludó en respuesta. Si Bleddyn no la ayudase, encontraría una manera de huir y conseguir refugio y auxilio con alguna familia. A quién quería engañar? Estaba en la parte más septentrional de Escocia y rodeada por los guerreros más temidos de la región.
El sonido agudo de la gaita de fuelles los recibió. Netta vislumbró dos instrumentistas en la parte alta del castillo, al lado de una figura fascinante. Aún a esa distancia, notó la capa resplandeciente y el cabello largo que escondía su rostro.
Cloud Dancer emitió un grito y , con cuidado de no herir a Mereck, bajó por el brazo. Cuando llegó a la mano, alzó vuelo con suavidad.
Netta acompañó, fascinada, el vuelo del águila hasta el hombre al lado de los gaiteros .Luego de posarse en el hombro izquierdo, Cloud Dancer pareció pasar el ala sobre sus cabellos, como en una caricia.
- Netta, ese es Bleddyn. Tal vez no lo reconozca, pues las últimas veces que fue a Wycliffe, tu padre lo mandó a nuestro castillo - Elise explicó. - él quiere mucho a mis primas, Brianna y Abbess Alana y es el protector de ellas. De la misma forma que papá dice que él cuida de Caer Cadwell para vos.
_ Me acuerdo de él. No tiene una cicatriz del lado derecho?
_ Si, y cuando se pinta de rojo y de azul, puede amedrentar hasta a hombres más fuertes que ese caballo. - Elise señaló a M'Famhair.
Al llegar más cerca , Netta vio que uno de los gaiteros era, en realidad , una mujer. Los muros sobre el portón estaban repletos de hombres al lado de los músicos. La joven apartó el instrumento de los labios y emitió un grito tan poderoso que se hizo oír sobre el sonido de la otra gaita.
Mereck levantó la cabeza y repitió el grito. La joven saludó con la mano y comenzó a bajar las escaleras hasta el patio.
Pasaron sobre el puente de madera y por la estrecha entrada. Netta observó las almenas en lo alto de la muralla. Esa era una fortaleza maciza, a la cual el castillo de su padre no se equiparaba ni de lejos. Al llegar al patio, pasando por la entrada del calabozo, las personas se aglomeraron cerca de los escalones de entrada.
Netta vaciló cuando Mereck la sujetó para desmontarla. A pesar del olor familiar y reconfortante, intentó apartarse de su contacto posesivo en su cintura, pero él no lo permitió. Antes que pudiese dar un passo, había oído a Elise decir:
-Netta, dile que se aparte, prometiste protegerme.
Netta se dio vuelta y vio a Elise todavía encima del caballo, frunciendo el ceño a un hombre fuerte delante de ella. Elise rechazaba su ayuda y se aferraba a las crines de su yegua, faltando poco para que se la arrancase de raíz.
Los brillantes ojos castaños del hombre observaban a Elise y la boca estaba curvada en una amplia sonrisa. él era alto y fuerte como Mereck. Las Highlands debían ser tierras de gigantes. Por la descripción hecha por Elise anteriormente, ese sólo podía ser Connor, el primo de Mereck.
-Ven, ratita. Juro que no te comeré antes de la cena - Connor intentaba persuadirla de bajar. Desprendiendo los dedos de la muchacha de las crines de la yegua, la llevó al suelo antes que Elise tuviese tiempo de responder. Ella salió corriendo en dirección a Netta y la agarró por el brazo.
-Connor, qué verguenza! Deja de asustar a esta pobre muchacha.
La muchacha alta que había estado tocando la gaita se aproximó : cabellos largos, brillantes ojos verdes y boca grande como la de su hermano. Vestía pantalones y una blusa larga sujeta a la cintura por un ancho cinto, del cual pendía una daga. Cuando ella se acercó a su hermano y empujó su hombro, Netta se sorprendió. Después , se acordó que Elise había mencionado una guerrera de Blackthorn, que sólo podía ser ella.
- Saca tus patas, hermano, por lo menos hasta ella haya descansado. Hola, Mereck.
Mereck se inclinó y la besó en las mejillas. Sonriendo, ella lo abrazó por la cintura y después le habló a Netta y a Elise:
- Soy Meghan. - ella sonreía. -Veo que el gigante trajo a casa algo además de hombres sudados y malolientes . Connor caminaba por las paredes desde temprano esperándote , Elise. - Meghan la abrazó y después se dio vuelta hacia Netta. - Bleddyn nos contó que vendrías, Lynette. Bienvenida a Blackthorn. Prefieres que te llamemos Netta, como hace Elise?
Netta asintió y se vio envuelta en un fuerte abrazo. Además de Elise, nadie más la abrazaba y la sensación era maravillosa.
-Basta, Meg. Netta todavía debe conocer a lord Damron.
Mereck condujo a Netta hasta el pie de la escalera donde otro hombre, gigante como él, los aguardaba. Los dos eran muy parecidos, a excepción de los cabellos . La expresión era seria, tal vez por el peso de sus responsabilidades como lord de las tierras. Cuando se aproximaron , su mirada se estrechó sobre el broche que Netta traía en el hombro. Dio un paso adelante y , con una sonrisa que suavizó sus facciones, la saludó .
_ Bleddyn nos contó que Mereck traería dos bellas muchachas para vivir con nosotros . - él se inclinó y la besó en la cara con delicadeza. - Soy Damron, hermano de este salvaje.
_ Lord, esta es Lynette de Wycliffe. Ella está bajo mi protección - Mereck dijo, con una sonrisa enigmática. Después se dio vuelta hacia la mujer más grande al lado de su hermano. -Netta, quiero que conozcas a lady Phillipa, la madre de Damron. Ella es la responsable de haberme convertido en un hombre civilizado.
Netta apenas pudo contener un gruñido al oír la palabra "civilizado" asociada con Mereck. Si la mujer lo había suavizado y pulido , él se habría convertido en un demonio sin ella. Netta hizo una reverencia y cuando se levantó, fue nuevamente abrazada.
_ Bienvenida, querida. Me alegra que Mereck te haya escogido. - Phillipa pasó la mano sobre le broche en el hombro de Netta y después la abrazó de nuevo .
_ Connor, basta de atormentar a Elise - lord Damron ordenó. - Mamá y yo queremos saludarla.
Connor sujetó la mano de Elise y la condujo hasta su primo y su tía. El lord la estudió atentamente y , entonces, la saludó con gentileza. Ya se habían conocido en Ridley donde ella había seguido a Brianna como una sombra.
-Bienvenida, Elise. - Damron frunció el ceño , asumiendo un aire todavía más feroz, cuando la mirada asustada de Elise se encontró con la suya . él dio una palmada en su hombro, pero ella retrocedió y fue amparada por Connor. Damron parecía confundido. Obviamente, no debía tener consciencia de la figura imponente que representaba. - No debes alarmarte , Elise, estás bajo mi tutela. - Damron le presentó a su madre, quien la recibió cálidamente. - Vengan ! Mi Brianna está ansiosa por verlas, pero primero entren y descansen un poco.
Phillipa las condujo por las escaleras de madera hasta el portón del vigía en la planta baja . Netta observaba la construcción a medida que avanzaban. Al contrario de Wycliffe, la planta baja no tenía ventanas. Presumió que debía ser por medida de seguridad. Pasando por puertas gruesas, entraron a un gran salón . Había armas y armaduras expuestas, adornando las paredes, estandartes coloridos colgados en el techo y diversas mesas con caballetes por todo el recinto . Sobre un tablado en el fondo de la sala estaba la imponente mesa principal del lord del castillo. El lugar estaba limpio y olía bien.
Los hombres acomodaron a Phillipa y a las otras mujeres en sillas delante de la chimenea. Los criados trajeron vino, cerveza y diversos tipos de queso. Luego que Damron comió y bebió un poco, se retiró para ver a su esposa.
Todos conversaban animadamente, pero Netta no entendía por qué miraban el broche en su hombro y sonreían. Después sonreían mirando en dirección a Mereck, quien sacudía la cabeza y permanecía a su lado, como si estuviese reclamando su posesión.
En seguida, Netta vio que lord Bleddyn entraba en la sala, con una capa colorida, el águila en el hombro y la mejilla izquierda pintada de azul, como Mereck.
-El rinde homenaje a sus ancestros al pintarse , Netta. - La respiración de Mereck provocó temblores en su cuerpo.
Al entrar, Bleddyn habló con Cloud Dancer y el águila voló a la ventana más próxima. Los ojos oscuros de él se posaron en Netta, quien se sintió reconfortada. Supo inmediatamente que podría confiarle su vida a ese hombre.
- Pequeña Lynette, tu madre está muy feliz porque te has unido a nosotros - dijo, con una sonrisa en los labios.
Netta se preguntó como el hombre podría saber eso . Antes que pudiese preguntarle , él la hizo acallarse, posando un dedo en sus labios.
-Mañana nos reuniremos. Mereck y Damron se unirán a nosotros. Mientras, relájate y conoce tu nueva casa.
El depositó un beso en su frente, inundando paz por su cuerpo. Netta cerró los ojos para disfrutar mejor la sensación y , cuando volvió abrirlos, él había desaparecido.
Las personas continuaron conversando, preguntando sobre el viaje. Mereck sorprendió Netta al dejarla responder sin interferir, algo que su padre jamás habría permitido.
Elise discurrió sobre sus temores durante el viaje, lo que divirtió a todos, especialmente a Connor quien estaba sentado a su lado, con la mano en el respaldo de la silla, en un gesto posesivo.
Meghan comenzaba a dar señales de impaciencia, entonces Phillipa dijo:
- Meghan, puedes salir y llevar a las muchachas con Brianna, sé que ella está ansiosa. - Ella se dio vuelta hacia Mereck y con un gesto indicó que él debería soltar el hombro de Netta.
Cuando las muchachas llegaron al solar, la bella escena que encontraron era para cortar el aliento: una mujer pequeña, sentada en frente de una ventana, era bañada por la luz del sol mientras amamantaba un bebé. Arrodillado a su lado estaba Damron, acariciando los rulos castaños.
Cualquier persona que presenciase aquello sabría que el hombre sería capaz de todo para defender a su esposa. Su mirada era tan gentil, que Netta se quedó pensando si algún día un hombre la miraría con tanto amor. Brianna levantó la cabeza al notar que habían llegado.
- Elise, mi querida. Parece una eternidad desde que nos vimos por última vez. Dame un abrazo y ven a conocer a mi pequeña Serena.
El marido se levantó y le sonrió a su esposa, acariciando las mejillas con los nudillos . Luego , se dio vuelta en dirección a ellas. Había tristeza en la mirada antes que él disimulase la expresión y dejase el cuarto.
Elise corrió al lado de su prima. Brianna acomodó el bebé adormecido y abrazó y besó a la recién llegada.
_ Esta debe ser la Lynette de Mereck de quien Nathaniel me habló - dijo Brianna.
_ Espero que no te importe tener otra mujer bajo tus cuidados, Brianna. Dejé Wycliffe para estar con Elise y no tuvimos tiempo de pedir tu permiso.
_ Estamos muy felices con tu llegada. Ya sabíamos que vendrías, pues Nathaniel nos contó sobre tu situación.
-Nathaniel?
_ Ella se refiere a Bleddyn, Netta - Meghan explicó. - Es como Brianna lo llama. él sabe las cosas antes que ellas sucedan. Fue así cuando Damron se casó con ella. Damron estaba en Inglaterra, pero Bleddyn supo de las intenciones del rey , y partió de Gales para estar con Brianna y Damron. Para protegerla.
-El siempre estuvo cerca de Alana y estaba en el castillo Sinclair cuando Brianna nació. Las protege de cualquier peligro - Elise esclareció.
Netta observó a Brianna colocar al bebé en la cuna , bajo la vigilancia de una criada y se rió al ver que Elise se aproximaba allá varias veces.
-Ratita, me vas a gastar el piso si continuas moviéndote así. - La voz profunda de Connor se hizo oír desde la puerta. - Si es un bebé lo que deseas, podemos pedirle a Damron que se apure a conseguirte un marido.
Elise se detuvo entre Netta y Brianna, y con el mentón bajo,
se negó a mirarlo. Con el discurso sobre un marido, Netta se acordó de Mereck y , como materializado a través de sus pensamientos, él surgió en la puerta. Se había quitado las pieles y vestía camisa y pantalones.
Mereck se inclinó y besó la frente de Brianna, después fue hacia la cuna . Acarició suavemente la cabeza de Serena y el corazón de Netta dio un salto.
-Ella está enorme , Brianna. Creció mucho durante mi ausencia.
La voz de Mereck era ronca y Netta apenas podía creer en el cambio en sus facciones. Todos los ángulos agudos se fueron, atenuados por amor y cariño. Había un ansia en su mirada cuando miraba para a su cuñada y a su sobrina e imaginó si él amaría a su propia esposa con tanto ardor.
-Serena siempre tiene hambre. Menos mal que tengo mucha leche. Ya llora menos si no me ve, por eso tengo un poco más de tiempo libre.
Había una tristeza en su mirada y ella debió haber notado las dudas de Netta, pues pronto se dirigió a ella:
- Después que perdí a mi hijo, nuestra pequeña Serena nació. Cuando la bruja de la madre descubrió que era una niña, la abandonó . La pequeña no aceptó ninguna nodriza hasta que Johanna nos la trajo . - ella sonrió a la mujer al lado de la cuna.
_ Y mi hermano cabeza dura? Todavía esconde el amor que siente? O ya comenzó a pensar con el corazón?
_ Deberías estar orgulloso de nuestro lord , Mereck. él siempre está intentando meterme comida en la boca, o vive metiéndome debajo de las mantas. He dormido tanto que a veces creo que voy a acabar convirtiéndome en parte de la cama. Y, cuando abro los ojos, él está al acecho, para ver si respiro demasiado rápidamente o demasiado lentamente . - Ella sonrió. - El finalmente me está dando una tregua y me dejó salir de la cama esta semana.
_ Hablando en descansar, mi amor, si quieres cenar con nosotros sería mejor que durmieses un poco ahora - Damron ordenó al entrar en el cuarto nuevamente. - Meghan y las muchachas irán a visitar al abuelo mientras vos reposas. - Levantándola en sus brazos, él la sujetó firmemente contra el pecho y la besó en lo alto de la cabeza, saliendo del aposento seguido por la criada, quien cargaba a Serena.
_ Vamos a ver al abuelo - Meghan dijo. - él estuvo un poco indispuesto hoy temprano y no pudo bajar para recibirlas.
-Ella avanzó por el corredor y Netta tuvo que apurarse, pues sus pasos no eran tan largos como los del a muchacha. El cuarto de lord Douglas quedaba en el tercer piso cerca de las escaleras. - Compartirán el cuarto conmigo tres puertas más adelante. El cuarto de Connor y de Mereck quedan cerca. - Meghan abrió la puerta. - Abuelo, te traje dos bellas muchachas para alegrar tu día. - El antiguo jefe del clan estaba acostado, apoyado sobre un montón de almohadas.
Su rostro era el más gentil que Netta jamás hubiese visto. Los ojos dorados estudiaron a las dos muchachas. Sonrió y les pidió que se sentasen en la cama junto de él. Tomando la manga de la túnica de Elise, hizo con que ella se aproximase más.
-Dejame ver a nuestra nueva protegida. Qué crees, Meghan, el lobo precisará cuidarla de los pretendientes?
Los ojos de Elise se agrandaron.
_ No diga eso, mi lord. - Netta confortó a su amiga. - Ella teme que los lobos escoceses la quieran como cena.
_ Vos debes ser la Lynette de Mereck. Bleddyn dijo que tus bellos ojos derretirían el corazón de un hombre. - él sonrió .
_ Mi lord , no soy la Lynette de Mereck, apenas Lynette de Wycliffe. Vine a Escocia para acompañar a Elise.
-Meghan - lord Douglas reía con placer -, creo que Bleddyn convocó otra adorable inglesa que lucha contra su propio destino.
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