viernes, 13 de noviembre de 2009

SIN ALMA - CAPITULO 28 - SOPHIE JOHNSON

CAPITULO 28




Antes del amanecer, Mereck la acurrucó entre las mantas y cerró las cortinas alrededor de la cama . Bajó y dio órdenes para que nadie la molestase.
Cuando el sol ya estaba alto, un centinela avisó que los hombres de MacLaren y algunos visitantes llegarían en breve.
Al encontrarse con la mirada cuestionadora de Damron, Mereck asintió . Como tenía el cuarto al lado de su hermano, sabía que él y Brianna debían haber oído los gritos de Netta.
-Spencer - Damron llamó al escudero -, pídele a Brianna que venga aquí, por favor.
Poco después él volvió acompañándola.
_ Mi querida, el hombre que codicia a nuestra Netta está aproximándose. Hasta que sepamos sus intenciones, mantén a las mujeres en el piso superior, si ?
_ No te preocupes. Cuidaremos de ella. - Brianna lo besó en la frente y se retiró.
_ No le des la espalda a Mortain - Connor advirtió a su primo. - él planea detener un casamiento. Cuando descubra que llegó tarde, quedará enfurecido.
Mereck, parado con las piernas separadas y la cara impasible, tenía una de las manos en la espada y la otra en el cabo de la daga en su cintura.
Cualquier hombre suficientemente imbécil como para cruzarse en su camino debía tener el deseo de morir.

Roger de Mortain cruzó los portones de Blackthorn examinando la construcción y buscando sus puntos débiles. Centinelas estaban parados sobre los muros , en posición de guardia. Apretó los dientes , pues Blackthorn aparentaba poseer más guerreros que la mayoría de las fortalezas.
En lo alto del castillo, justo debajo de la bandera de los Morgan, un sabana blanco flotaba . Era la señal que una doncella había sido desflorada. Insultó entre dientes.
Mereck de Blackthorn pagaría caro por eso. La puta que se había entregado al Sin Alma pronto vería a su amor morir.

Netta pensaba en una manera de explicarle a Elise que se había equivocado respecto a la noche de boda. Al acordarse de como Mereck le había enseñado sobre la relación de una pareja, se sintió encoger. En el fundo, se sintió aliviada por no haber mostrado propia ignorancia.
El sol ya comenzaba a ponerse cuando Connor y Mereck vinieron a buscarlas para acompañarlas al salón principal. Mereck mantenía la mano en su nuca de manera posesiva, haciéndole caricias con el dedo. Netta se acordó de como él había hecho esa misma caricia sobre su pezón y en otros lugares. Se ruborizó y se sintió calentar por dentro. Cómo podría explicarle todos esos detalles a Elise ? Cómo podría convencerlo de hacer le eso de nuevo cuando se acostasen ?
Oyó un ronroneo , como si Mereck tuviese a Mither en sus hombros. Miró hacia arriba y pronto se dio cuenta , por la expresión en su rostro, que él había leído sus pensamientos nuevamente. Se había olvidado de cantar! Netta comenzó a ocupar a mente con nombres de santos hasta que se encontraron con Eric al pie de la escalera . El tenía una mirada divertida.
_ Mereck, oí decir que el canto de tu esposa despierta a las fieras en el bosque.
_ No me dí cuenta que ella cantaba. Pensé que era el estomago de ella reclamando comida. Sabes, ella tiene un excelente apetito .
Netta hizo una mueca y le dio una codazo en las costillas. Mereck no protestó, y ella comenzó a pellizcarlo. Pronto se detuvo, pues se dio cuenta que se aproximaban a Damron y a dos visitantes. Se acordó de sus modales e hizo una reverencia mientras Mereck la presentaba como su esposa. La mano blanca y fría se extendió y Netta la aceptó educadamente. Se estremeció cuando labios finos y húmedos tocaron su piel.
- Roger de Mortain es tu lord supremo, el barón Hugh de Carswell, desean felicitarnos por nuestro casamiento, Netta. No es verdad, Mortain? - Mereck ignoró el título de nobleza. Tocando la mano del hombre, le recordó soltar a su esposa.
Netta se estremeció aterrorizada al encontrarse con la mirada malévola de Roger. Netta retiró la mano, limpiándola en la falda, un gesto que no pasó sin ser notado. Se aferró a Mereck con tanta fuerza que, si él no fuese el gigante que era, podría haberlo derribado.
El barón Carswell carraspeó , llamando su atención. El no se parecía en nada a su vasallo. La sonrisa era franca y abierta y estaba cómodo delante de Damron y Mereck. Cuando se inclinó para besarle la mano, frunció el ceño ante las marcas rojas que el aprieto del otro hombres había dejado.
Más tarde, cuando se sentaron a comer, a pesar de que Mereck le había servido sus platos predilectos, Netta perdió el apetito , pues cada vez que levantaba la cara se encontraba con una mirada azul gélida. Se sintió aliviada cuando la cena y el entretenimiento de esa noche terminaron y su marido la acompañó hasta el cuarto.
Después que Mereck cerró a puerta, ella fue a verificar si estaba trancada.
-Bran, por favor, trae una bandeja con pan, queso y vino.
Mientras esperaban que ella volviese, él atizó el fuego. Luego se dio vuelta hacia Netta y comenzó a desatar su túnica. Ella no se preocupó por cantar para evitar que él leyese sus pensamientos.
-Netta, me ofendes cuando temes a ese ser que ni siquiera podemos llamar hombre. Dudas de mis habilidades para protegerte ?
Las palabras de Mereck demostraban enojo . Cuando la giró de frente, la expresión dura habría amedrentado a una mujer menos valiente que ella, pues él parecía furioso.
_ No es nada de eso, pero él es un hombre muy vil. - Netta se sintió descompuesta de sólo pensar que Roger podría haber estado en el lugar de Mereck como su marido. Frotó los brazos para aliviar esa mala sensación. - Cuando él me miró , tuve un presentimiento de que algo terrible sucedería. Sabes que él intentó casarse conmigo y mi padre lo rechazó ? Qué hace él aquí ?
_ El fue a Wycliffe para exigir que tu padre honrase su oferta. Trajo a Carswell para presionar a Damron. - Los labios se estrecharon. - Vino hasta aquí para llevarte de vuelta a tu casa, para que no te convirtieses en otra "amante de los Morgan", como él mismo dijo.
Netta lo agarró por las orejas e lo hizo bajar su rostro .
_ No dejes que me lleven! No lo soportaré !
_ Basta, Netta ! Me insultas. - Mereck sujetó sus muñecas para que ella lo soltase.
_ Vos no me vas a dejar - ella le ordenó y volvió a dar otro tirón a sus orejas.
_ Querida, sé que tienes miedo, pero debes parar con esto. El sólo es un hombre, y ni siquiera gran cosa.
_ Lo sé. De verdad. Pero es muy traicionero. - Netta se alegró cuando Bran volvió con la comida, pues Mereck no discutiría de la criada. Hasta que la rabia de él amainase, decidió que la mantendría allí .
Le pidió que le cepillase los cabellos. Sin decir una palabra, Mereck le quitó el cepillo de las manos. Todavía callado, señaló la puerta.
Bran se encogió de hombros y salió.
Mereck, parado en medio del cuarto, le hizo una seña con un dedo para que ella se aproximase. Netta se distrajo pensando lo que ese dedo le había hecho la noche anterior. Intentó reprimir sus pensamientos y comenzó a cantar desafinadamente, como siempre.
Mereck, a pesar de mantener la cara impasible, también se acordaba de la textura satinada de su piel . Suspiró y se desvistió . Mientras se ponía la bata, fingió no notar que ella evitaba obedecer a su pedido. Por la manera en que cantaba y se movía de un lado al otro en el cuarto, amanecería antes que Netta lo atendiese.
Resignado, Mereck se aproximó . Comenzó a hablar de las personas que pronto llegarían para asistir al próximo casamiento. Mientras ocupaba los pensamientos de ella, la desvistió para en seguida cubrirla con la bata.
Puso una almohada en la alfombra delante de la chimenea, y la hizo sentarse con él . Luego , comenzó a cepillar su cabello largos con movimientos rítmicos hasta sentirla relajarse.
Le gustaba tocar sus cabello . Estiró una mecha y sonrió satisfecho, cuando ella se volvió a enrollar en sus dedos. Nunca imaginó que podría disfrutar un gesto tan simple .
No invadió los pensamientos de Netta . Cuando sintió que ella estaba más calmada, bajó el cepillo , la sujetó por la cintura y hizo que se pusiese de pie delante de él. Soltó el cinto de la bata, revelándola. Contuvo la respiración. Colocó las manos en las cadera y las deslizó hasta sus muslos. Abrió la bata todavía más para tocar sus nalgas. Las puntas de sus dedos acariciaron la piel suave y buscaron el punto secreto entre sus piernas.
Netta lo empujó , pero fue ignorada. Pronto, ella se acostumbraría a esas caricias íntima.
Mereck se arrodilló y frotó su cara sobre el vientre plano. Lamió su ombligo . Como si tuviesen voluntad propia, sus manos subieron para tocar los senos. Apartándose un poco, la admiró .
Netta miró sus manos, notando el contraste de la piel bronceada con los senos blancos. Mereck observó su rostro mientras pasaba estimulaba sus pezones, excitándolos. Netta se estremeció , suspiró e intentó apartarlo de nuevo .
_ No deberíamos hacer esto, Mereck. alguien podría vernos . Tenemos que apagar las velas, ir a la cama , cerrar las cortinas y estar bajo las sabanas.
_ Quién diablos podría vernos ? Estamos solos. Tranqué la puerta.
Mientras esperaba que ella encontrase otra excusa, Mereck sonrió .
_ Dios. - ella sacudió la cabeza para enfatizar las palabras.
_ Dios? Tienes miedo que Dios nos vea haciendo el amor?
_ Los ángeles de la guarda también . Y los espíritus que deben rondar este castillo. Estas paredes vieron muchas personas vivir y morir .
- Creo que Dios y los espíritus están demasiado ocupados para perder el tiempo con nuestras actividades.
Cuando él reemplazó las manos por la boca, ella suspiró. La lengua caliente trazaba círculos en torno a la areola, provocando sus gemidos. Una das manos la sostenía por la espalda mientras la otra acariciaba el pecho . Netta se sintió derretirse.
La mano que estaba en la espalda recorrió el cuerpo, tocándola entre las piernas, encontrándola caliente y húmeda. Ella estaba aprendiendo rápidamente a responder a sus caricias . Mereck respiró profundamente cuando, al introducir un dedo en el sexo de Netta, se sintió bienvenido.
Con la respiración entrecortada, él retiró la bata y se levantó, rozando su cuerpo desnudo contra el de ella . Lamió y mordisqueó el labio inferior hasta que ella permitió la entrada. Luego la levantó en sus brazos y la llevó a la cama.

El miembro erecto pulsaba y su cuerpo exigía satisfacción inmediata. Se colocó entre las piernas de ella y sintió el calor húmedo de su sexo . Pero no continuó. quería que Netta sintiese placer. Ignorando sus propias necesidades, se dedicó a acariciarla con las manos hasta que estuviese lista.
Em poco tiempo, ella levantó o cadera, ansiosa por más. Mereck la penetró lentamente, para luego retirarse , estimulándola hasta que los suspiros se convirtieron en gemidos.
Netta lo agarró por los hombros, exigiendo que él se aproximase, pero él se contuvo sin darle lo que ella pedía. Lo mordió en el cuello, lo agarró con las piernas y arremetió hacia arriba. Mereck se rió y se mantuvo firme. Ella se levantó todavía más , en un ritmo descompasado por la falta de experiencia. Sujetándola por las caderas, él le mostró el modo.
Netta se pus rígida , gritando y él aumentó el ritmo, profundizando la posesión hasta que sus propios gemidos ganaron fuerza. Sólo cuando los músculos de Netta lo apretaron y ella convulsionó . Ella arqueó su cuerpo, y él envistió más rápido, más profundo hasta que su semen la invadió .
-Oh! Dios!
Se habría reído si no estuviese ocupado demasiado ocupado en hacer que o corazón no se le saltase por la boca.
Más tarde, esa misma noche, volvieron a hacer el amor.

Las respuestas altas y claras a las envestidas de Mereck avergonzaban a Netta, pues estaba segura que todos en el castillo podían escucharla. El hecho que Eric y Connor sonriesen cada vez que pasaban por al lado ella no mejoraba en nada su incomodidad. Estaba demasiado afligida para preocuparse de Roger y no le extrañó estar siempre acompañada de Brianna o de Meghan.
En una de las mañanas que siguieron , Meghan y ella fueron a entrenar con el arco en el patio de los fondos, donde Mereck había mandado a improvisar un blanco. El no quería que ella fuese al patio externo, pues el castillo estaba repleto de invitados para el casamiento y había muchos extraños.
Thomas, un joven guerrero, no debía tener mucho que hacer, Netta pensó, pues siempre estaba cerca . Meghan le pidió que buscase agua fresca para ellas y a continuación otro guerrero se aproximó con un mensaje:
- Mi lady, el halconero Rory pide que vaya allá inmediatamente, pues hay algo extraño con su gavilán .
- No te muevas de aquí, Netta - Meghan le pidió. - No puedo llevarte conmigo, pues hay muchos extraños en el área de las jaulas, pero Thomas pronto volverá. - cuando Netta asintió , Meghan salió corriendo con el guerrero sigueindola .
Netta se sentó y se apoyó en el blanco, pensando en descansar hasta que Thomas e Meghan volviesen. Ese tipo de entrenamiento era arduo y ella sentía todos los músculos de su cuerpo protestar. Aunque tal vez no estuviesen doloridos exactamente por causa de eso. Se ruborizó al acordarse del los elogios de su marido respecto a sus habilidades recién adquiridas. La noche anterior, él había afirmado que ella casi lo había matado .
Un sonido se entrometió en sus recuerdos. Inclinó la cabeza procurando su origen . Se levantó y fue en su dirección. Se apresuró , pues lo reconoció. Era un maullido de Elfo y él parecía estar en apuros.
se aproximó al portón de los fundos e oyó o gatito do lado opuesto. sorpresa, notó que el portón estaba sin tranca . Miró a su alrededor , con la esperanza de ver a Thomas volviendo, pero no había nadie en las inmediaciones. Temía salir del castillo, pero no podía dejar al gatito defenderse solo.
Netta empujó el portón lo suficiente para espiar para fuera. Elfo estaba cerca del borde de un precipicio , una patita estaba enredada en un arbusto . En la desesperación por soltarse, el gato acababa enroscando todavía más. Netta pasó por el portón y corrió hacia el gatito . Le susurró para calmarlo mientras intentaba liberarlo. Finalmente, tomó al animal y lo anidó contra su pecho. El pobre temblaba de frío y de miedo y ella lo colocó en el bolso de la túnica para mantenerlo caliente y seguro.
En ese momento, oyó el ruido del portón cerrándose. Se dio vuelta y vio a un hombre aproximándose. Sus pies se resbalaron y ella perdió el equilibrio. Desesperada, luchó por afirmarse, pero comenzó a deslizarse por el lateral del precipicio. Los dedos del hombre se clavaron en su hombro, dejando marcas. Ella gritó y se agarró al arbusto , pero la rama se partió.
Netta se desempeñó, pero pronto cayó a un borde estrecho , una saliencia bendecida con una pequeña árbol retorcido que la sostenía evitado que se desbarrancase.

El pulso estaba acelerado y faltaba poco para que le terror la dominase. Cuando dejó de gritar, respiró profundamente y reflexionó sobre qué hacer. Si se pusiese de frente vería el horizonte y la profundidad del barranco . Si se quedaba de espalda, tendría más miedo. Decidió enfrentar el vacío.
Netta jadeó e intentó confortar a Elfo. Después miró hacia a para ver cuanto había caído. Gritó sorprendida.
Mereck no lo había matado! El hombre que la había raptado estaba vivo.



- Perra ! - su secuestrador gruñó . - Dame la mano para que pueda levantarte . Juro que si no subes, te mato ahí mismo.
El hombre insultó al ver que no sería obedecido y , después de mirar por sobre su hombro para asegurarse que estaban solos, tomó piedras y comenzó a arrojarselas a Netta, quien levantó los brazos para protegerse . Gritó y el hombre salió correndo. Temerosa de que él encontrase una manera de agarrarla, Netta continuó gritando sin parar. Sin notarlo , gritaba un solo nombre: Mereck.
Miró a un lado y vomitó. Vio el mar y las olas altas que se chocaban contra las rocas. Temía que nadie pudiese escucharla, pues las gaviotas que danzaban sobre ella emitían chillidos agudos.
Cerró los ojos y redobló los esfuerzos. Si gritase más alto era posible que Mereck la escuchase. Finalmente, escuchó su nombre. Sujetando a Elfo, levantó la mirada y se encontró con la sonrisa de su marido. Cómo él podía estar tan calmo si ella podía caerse en cualquier momento?
Damron, Connor y prácticamente todos los hombres del castillo estaban allá arriba, observándola. Mereck tenía una cuerda gruesa entre las piernas y amarrada a la cintura y a su hermano, el primo y el barón Carswell sujetaban la otra punta. Lo bajaron hasta que él la agarró y la anidó contra el pecho .
-Puedes parar de gritar o quedaré sin oídos por lo menos una semana. - le acarició la cabeza cuando ella cerró la boca. - Sabes que gritaste casi tan alto cuanto cuando nos amamos? Fue por eso que supe que era vos y no otra mujer .
Los comentarios maliciosos surtieron el efecto deseado, pues ella no se dio cuenta que estaba siendo subida en los brazos de su marido hacia arriba en un precipicio. Cuando puso los pies en tierra firme, aguardó mientras le retiraban la cuerda.

-Santo Cristo, mujer. Por qué decidiste sentarte en el borde de un precipicio? - él gritó.
Netta ya no tenía miedo. Sentía rabia.
Sujetando a Elfo para protegerlo, encaró a su marido y le explicó el por qué de estar casi cayéndose , y no cómodamente sentada, en el borde de un precipicio. Cuando acabó la narrativa, su rabia ya había pasado. La de Mereck, no. El todavía estaba furioso y los otros hombres, pasmados.
Después de ser acompañada de vuelta al castillo y dejada al cuidado de las otras mujeres, oyó los caballos galopar por el puente levadizo. Las mujeres corrieron hacia la ventana para ver lo que sucedía.
- Ellos van por ese maldito. Ya no debes tener miedo, pues Mereck no volverá sin él - Meghan dijo con serena convicción.
La mirada de Netta siguió la de las mujeres. M'Famhair iba adelante de Damron y dos otros guerreros.
Con los labios apretados, el Sin Alma cabalgaba un animal sin montura.

No hay comentarios: