miércoles, 2 de junio de 2010

ESCUELA DE ENCANTOS - CAPITULO 36 - SUSAN WIGGS

CAPITULO 36


Un compromiso para que alguien se case con una determinada persona en una determinada ocasión, pase lo que pase, siempre lo consideré como la cosa más ridícula que existe en la faz de la Tierra.
Jane Welsh Carlyle



Boston, junio de 1852

Ser invisible solía tener sus ventajas. A Isadora Dudley Peabody le gustaría que las personas dejasen de observarla. Deseaba, de todo corazón, que el piso brillante del salón de baile se abriese y la tragase. No sería una sorpresa para nadie si algo así sucediese. Desaparecer en medio de un salón apiñado era algo muy atrevido, y sin duda, Isadora Peabody recientemente había conquistado la reputación de una mujer atrevida.
Ser atrevida, e incluso desafiante, era la única manera de poder proseguir día tras día sin desmoronar por completo. Después de esa mañana lluviosa en el puerto, se había cerrado en una cápsula, negándose a comer, a dormir, incapaz de llorar. Esos primeros días después de la terrible pérdida en el mar permanecerían como un borrón para ella.
Las autoridades la habían buscado para interrogarla sobre esclavos escondidos a bordo del Cisne de Plata. Ella había la mirada en alto ey había declarado que no sabía nada, absolutamente nada, respecto a esclavos fugitivos.
Había habido una búsqueda de la barcaza desaparecida. Las aguas de ese área habían sido rastrilladas buscando restos y... cuerpos. Pero nada había sido encontrado. Ryan, Journey y su familia habían desaparecido de la faz de la Tierra como si nunca hubiesen existido. Isadora se había obligado a enviarle una carta a Lily, pero el esfuerzo le había consumido toda su energía. Estaba vacía por dentro.
Los miembros de la tripulación del Cisne de Plata habían seguido su camino, dispersándose en diferentes barcos.
Isadora se había convertido en una estatua. Apenas se movía y hablaba. Los padres habían llamado a un médico, y , apáticamente, ella había acabado aceptando sus cuidados, pero el especialista se había exasperando con su falta de reacción al tratamiento.
Imbécil . No podía entender que su paciente estaba muerta por dentro?
Ella había muerto, tan horrible y tan completamente como Ryan cuando el mar lo había tragado. Pero, para su irritación, continuaba respirando. Su cuerpo mantenía sus funciones. No podía hacerlo detenerse.
La tragedia no había sorprendido a nadie. Ryan Calhoun había sido conocido por ignorar el protocolo, él y su socio africano, ambos tan poco convencionales que había parecido que el mundo todavía estaba preparado para ellos. Tal vez había sido por esa razón que no habían podido sobrevivir.
Journey estaría mejor, se preguntó Isadora, con su esposa y sus hijas en el reposo eterno? Sería mejor estar unidos por la muerte que separados por la vida?
Isadora ansiaba la liberación de la muerte. Había intentado rendirse a la oscuridad, desistiendo de luchar, pero, aún así , su vida persistía tercamente .Finalmente, dos semanas antes, había llegado una constatación que la había lanzado decididamente de vuelta al mundo de los vivos.
Se había arrastrado fuera de la cama, nauseada como nunca había estado a bordo del Cisne, y , mientras vomitaba convulsivamente, había entendido lo que le pasaba.
Estaba esperando un hijo de Ryan.
Saber eso había liberado una torrente de emociones. El dolor profundo y reprimida había emergido súbitamente , y el shock de estar sintiendo algo nuevamente la había hecho caer de rodillas, sollozando. Había llorado como no había logrado hacer antes, dejando salir a la superficie todo el amor que había sentido por Ryan. El había muerto, pero le había dejado un hijo en su vientre.
Isadora cargaba el secreto dentro de si, intentando descubrir una manera de soportar los sentimientos de angustia y alegría. Si había algo que no sentía era vergüenza. Todos esperarían eso de ella, cuando el escándalo estallase, pero, aún después que eso sucediese, sabía que no podría avergonzarse de lo que había hecho con Ryan Calhoun, de lo que habían sentido, de la felicidad compartida.
Lo más doloroso de enfrentar era el hecho de lo que nunca le había dicho. No había reconocido que la pasión, la ternura, el entusiasmo que había sentido por Ryan habían sido el más puro amor. Había estado tan ocupada consigo misma y con su vida en Boston que había fallado en ver lo que había estado justo delante de si . El hombre a quien amaba era Ryan. Le extrañaba el hecho de haberlo podido mirarlo sin ver la verdad.
Hasta que lo había conocido , nunca había aprendido a reconocer el amor, a confiar en ese sentimiento. Porque el amor en su familia no era algo dado libre e incondicionalmente, sino que era un sentimiento medido que dependía de un protocolo bastante específico y de un conjunto de valores. Cualquiera fuesen las virtudes que ella poseyese no significaban nada a menos que viniesen acompañados de una apariencia refinada.
Ryan había sido tan diferente. La había amado como la persona que era. No por su posición social, por su familia, por su apariencia o por su fortuna. Sino a ella, pura y simplemente a Isadora . La idea le era tan nueva, tan inédita, que sólo la había entendido demasiado tarde .
El descubrimiento de su condición la había lanzado a un torbellino emocional del cual casi no había emergido. Una vez más , el médico había sido llamado, esa vez intentando calmar su llanto histérico. Pero finalmente no había sido la medicina, sino el amor lo que la había salvado. El universo estaba intentando decirle algo. Tal vez nunca lograría perdonarse por no haberle dicho a Ryan que lo amaba, pero había una fuerza mayor en juego. El bebé era una confirmación de que todo lo que habían compartido con Ryan había sido especial y mágico, algo destinado a sobrevivir y continuar , algo que la muerte de él no podía sacarle.
Negar la vida al bebé, mantenerse aislada en su mundo de dolor, era inaceptable. Era tiempo, ella había decidido , de volver al mundo de los vivos.
Su primera actitud había sido la de luchar por la causa responsable por de haber destruido las vidas de Ryan, Journey y su familia. Había empezado a frecuentar reuniones del movimiento anti esclavista involucrándose cada vez más con un grupo de abolicionistas radicales que no pararían hasta conseguir terminar con la esclavitud.
Era por esa razón que estaba en la fiesta ofrecida por sus padres, usando un disfraz para un baile de máscaras, intentando fingir que quería estar allí.
En verdad, tenía un propósito secreto. Había entrado en contacto con la Sociedad Abolicionista de Boston. Cuando sus padres descubriesen, quedarían estupefactos, sin duda, pues la esclavitud era una de esas cosas que no aprobaban pero por la cual jamás tendrían el pésimo gusto de tomar partido.
Isadora tenía la intención de hacer más que tomar partido en la cuestión. Iba a actuar. Se había enterado , en una de las reuniones de la Sociedad Abolicionista ,a respecto a un barco utilizado exclusivamente para facilitar la fuga de esclavos. Era virtualmente un barco fantasma. Nadie sabía su nombre, ni el del capitán o de la tripulación, ni tampoco el puerto de origen . Algunas personas decían que la historia no pasaba de ser una leyenda o un rumor, pero el barco era conocido por pasar por los puertos del sur en medio de la noche, llenarse de esclavos y navegar hacia la seguridad de Canadá, tan velozmente que nadie podía perseguirlo o alcanzarlo.
Isadora creía en esa leyenda romántica, aunque tal vez no fuese verdad. Y en caso que lo fuese, planeaba dedicar su vida a apoyar a los que estuviesen detrás de esa causa.
Había recibido un mensaje criptografeado en esa noche, diciendo que un importante contacto sería hecho en el baile de máscaras. Intrigada, se había puesto un disfraz y había alegrado a sus padres con su aparición.
Inquieta con sus pensamientos e intentando evitar las miradas especuladoras de los invitados, se apoyó junto a una gran ventana, refugiándose en la penumbra proyectada por el arco superior ... pero todavía podía oír.
_Ella es la oveja negra de la familia, sin duda. Y de varias maneras ... _susurró una voz chismosa que Isadora supuestamente no debería oír. _Es tan diferente al resto de los Peabody. Está bronceada como una salvaje, y los hermanos y las hermanas son todos rubios y blancos como querubines.
No podían para de hablar sobre la vida alguna otra persona?
_ Pero es tan bonita y encantadora a su estilo . Es extraño que nadie haya notado eso antes _vino la respuesta.
_Dicen que podría tener a quien quisiese como marido, pero que se ha comportado muy extrañamente últimamente...
Isadora dejó la ventana, no queriendo escuchar nada más . Las voces maliciosas se sobresaltaron ... eran dos amigas da su madre ... intentaron disimular, agitando los abanicos vigorosamente y aclarando sus gargantas, aparentando inocencia.
Como de costumbre, ella fingiría que no había oído . Iba a saludar a los amigos de su padre cordialmente. Bailaría mecánicamente con los hombres esperanzados que otrora se habían eludido su aproximación, pero que ahora hacían fila para cortejarla.
El dolor y la humillación que ella solía sentir en la época en que había sido rechazada en tales eventos sociales parecían tan triviales ahora. Porque ya había conocido el punto culminante de la alegría y la angustia más profunda de la desesperación . Encapsulándose en esa especie de extraño sopor, lograba soportar todo.
Era verdad que llegaría el día en que tendría que revelar la verdad sobre su estado. Toda Beacon Hill ardería con la historia da hija descarriada de los Peabody y el impetuoso capitán sureño. Ya había decidido que desaparecería junto con el bebé antes que el escándalo pudiese alcanzarlos. Tal vez, como el barco fantasma que llevaba ex esclavos a la libertad, un barco apareciese para buscarla y la levase a alguna tierra distante, donde fuese seguro criar un hijo en un ambiente de aprobación y amor. Le debía eso a Ryan. Le debía eso al amor que habían compartido.



Absorta en tales pensamientos, concedió un baile a varios caballeros. La mayoría eran amigos de su hermano de Harvard, disfrazados de príncipes, vampiros y caballeros medievales. Chad Easterbrook, usando la toga de un dios griego, la sacó a bailar durante la secuencia más larga de los valses, pretendiendo monopolizarla. Al final del baile , la condujo por las puertas ventanas hasta la terraza. Bajaron los tres escalones de mármol hasta la fuente central en los fundos, una sirena vertiendo agua eternamente en una gran concha. Bajo la noche fresca, le tomó la mano en la suya.
Por Dios , él seguramente no podía ser el contacto que había estado esperando.
_ Es tan bueno verte recuperada y participando d los eventos sociales otra vez _ le dijo , recorriéndola de arriba a abajo con una mirada hambrienta. _ No he hecho otra cosa mas que pensar en vos desde que volviste del viaje.
_Espero que estés exagerando _respondió ella, con un suspiro -, de lo contrario me harías pensar que no tienes nada de interesante para hacer.
El se rió como si se tratase de un broma.
_ Lo que digo, es verdad. Puedo parecer pretensioso pero creo que en el pasado vos me demostraste una grande devoción.
Isadora no vio motivo para mentirle.
_Hubo una época en que vos era todo con lo que soñaba...
_ Lo sabía. _Chad la envolvió con sus brazos.
Isadora se dio cuenta entonces que él había sabido todo el tiempo sobre su adoración. Chad había sabido e igualmente la había ignorado . Una cosa era nunca haber notado esa devoción, y otra completamente diferente haber sabido sobre sus sentimientos y haberlos ignorado con toda a frialdad.
De repente, quería distanciarse de él.
_Chad...
_Isadora, déjame terminar. Vos seguramente ya adivinaste mis intenciones a esta altura. Quiero me casar con vos. Seremos...
_Por favor, yo ...
_No, escúchame . Sos la mujer más fascinante que jamas haya conocido y jamás podré ser digno de vos, pero lo intentaré. Mi padre ya me puso en un cargo importante en la compañía. Quedó bastante impresionado con mi papel en desviar el escándalo del Cisne de Plata.
Un escalofrío recorrió a Isadora.
_ No sé qué quieres decir. Que escándalo?
_ Casi perdemos nuestra buena reputación por ese inconsciente de Ryan Calhoun. Cuando el Cisne atracó, presumí correctamente que él estaba transportando esclavos fugitivos. Actué rápidamente y salvé la compañía de un gran escándalo , sin mencionar las multas pesadas.
Ella lo apartó de si.
_Fuiste vos, entonces! Vos alertaste a las autoridades sobre la familia de Journey.
_Es la ley. Yo habría sido acusado de conspiración si no hubiese denunciado mis sospechas. Y tienes que recordar que nuestra compañía hace negocios en el sur. No podemos correr el riesgo de perder las cargas de tabaco y algodón .
Isadora se sintió tentada de dejarle clara su opinión, de darle un severo sermón sobre los derechos del ser humano y todo lo que había aprendido en sus encuentros abolicionistas. Pero sabía que nada ganaría. Ese hombre no tenía la necesaria inteligencia ni sensibilidad para reconocer la humanidad del otro. Especialmente la de un hombre negro y mucho menos la de una mujer .
Dio un paso atrás y lo miró a los ojos.
_ Nunca te conocí hasta este día. Me parece que me gustabas más cuando no te conocía.
_ Qué...
_Con permiso.
El le tomó el brazo, su semblante se enfureció .
_ Entendí bien ? Me estás rechazando ?
_ No podría haber entendido mejor _replicó ella, lanzando una mirada chispeante a la mano que todavía sujetaba su brazo. _Por favor, suéltame en este instante.
_Oh, creo que no. Crees que puedes rechazarme ? Vos no sos tan respetable ahora que estuviste en un barco con una tripulación de marineros rufianes y esclavos fugitivos.
Ah, finalmente alguien tenía el coraje de decirle a verdad en la cara . Isadora supo entonces, que no había salido ilesa de ese viaje.
_ La compañía de ellos es mucho más agradable que la de cualquier persona en Boston.
_ Lo que prueba tu falta de discernimiento. Supe que Calhoun no encaja en esta sociedad desde el momento en que entró en Harvard, él con su acento ridículo de Virginia y las mujeres baratas con que se acostaba.
_ Me alegra informarte que yo fui una de esas "mujeres baratas" en la vida de él. Todavía me quieres?
_ Creo que no tengo alternativa, ya que tu desgracia sucedió a bordo de mi barco.
_ Pero, por qué vos, el poderoso Chad Easterbrook, ibas a aceptar a una paria de la sociedad?
El rostro de él se enrojeció , pero pronto la expresión de deseo se hizo clara.
_Casarme con vos ahora sería casarme por debajo de mis posibilidades , pero podría hacerte respetable otra vez. Vos sos la única entre las mujeres, pero espero que me sea agradecida por el resto de sus días.
Isadora no conocía el nombre específico del golé que usó. En una ocasión, Gerald Craven le había enseñado los diferentes nombre . No importaba, porque lo que no había olvidado, ella pensó, satisfecha, era el uso exacto del golpe . Su brazo, todavía fortalecido por las actividades que había desempeñado en el barco, lanzó un golpe certero, el puño cerrado alcanzando de lleno la cara de Chad Easterbrook.
El la soltó en ese mismo instante, sacudiendo los brazos en el aire antes de caer contra el borde de la fuente.
Isadora, luego, lo empujó por los hombros, haciéndolo caer de espaldas en el agua.
Con las manos plantadas en las caderas, miró con altivez al ser despreciable que había sido el antiguo objeto de su adoración .
_Oh, Chad, estás todo mojado. Y tu bello disfraz está manchado de barro. Qué van a decir los invitados?

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