sábado, 25 de septiembre de 2010

CUESTE LO QUE CUESTE - CAPITULO 13 - DONNA MACQUIGG -

CAPITULO 13





William y un pequeño grupo de guerreros se juntaron en lo alto de una colina para observar los movimientos de lord Baynard y su ejército. Aproximadamente cincuenta caballeros formaban la línea del frente, montados y bien armados, seguidos por casi el mismo número de arqueros y soldados. Eso sin contar a los mercenarios irlandeses. En el más pomposo estilo inglés , todos estaban alineados y listos para el combate.
En menos de una hora el sol iba a surgir en el horizonte, ofuscando la visión de los ingleses, por lo menos eso era lo que William esperaba. Treinta hombres suyos estaban escondidos detrás de los árboles al norte, mientras otros treinta, se escondían detrás de piedras y trincheras naturales. Cuarenta soldados montados estaban apostados del otro lado de la colina, fuera del campo de visión de Baynard, esperando una señal para bajar y tomar a los caballeros ingleses por sorpresa.
William tiró de las riendas del gran garañón hasta la parte baja de la elevación donde Thomas, Garrick y algunos hombres aguardaban.
— Como siempre, vamos a atacar en el momento adecuado. Preparen las armas y aguarden la señal.
El grupo asintió a la orden del líder.
— No son los caballeros lo que temo — Thomas respondió. — Los arqueros son los peores. Oí decir que los irlandeses suelen poner veneno en las puntas de las flechas.
— Entonces es mejor estar con los ojos muy abiertos y la cabeza baja — William afirmó, sin transmitir el nerviosismo que le corría por dentro.
— Exacto, y el escudo levantado — Garrick agregó . William se volvió hacia Thomas.
— Baynard enviará a los caballeros adelante . Esperen que ellos avanzasen, y luego hinquen las esporas en los caballos y retrocedan , pero acuérdense de insultarlos para que se enfurezcan lo suficiente para mirar hacia atrás. Una vez dentro del bosque, Jamie y sus hombres usarán las lanzas para derribar al mayor número de hombres que puedan . En ese momento vos y su grupo aparecen para espantar a los caballos, pues los caballeros ingleses no pueden luchar sin ellos.
William estudió el horizonte por un momento, luego volvió la mirada a Garrick y prosiguió con el repaso de la estrategia.
— Los arqueros de Baynard no atacarán hasta que los caballeros hayan sido derrotados. Es por eso que debemos mantener el escudo preparado y atacar Cuando el sol brille , ofuscándolos. Dejen que ellos saboreen un poco de la valentía de los escoceses.
— Elegiste el lugar perfecto , William — James comentó. — Con el peso de las armas que cargan , la subida de la colina va a acabar con ellos.
— Estoy contando con eso. Ahora escuchen con atención: Sean va a liderar a nuestros hombres a caballo hasta la mitad del campo de batalla, por eso tengan cuidado de no ser pisoteados. El irá al encuentro de los caballeros que hayan quedado antes que ellos puedan reagruparse. Durante el combate, avanzaré por detrás de los árboles para llegar al campamento de Baynard. Si ese bastardo es un hombre de palabra, Robbie debe estar en una de las tiendas. Después de encontrarlo, y de asegurarme que está bien, les daré una señal y retrocederemos a la seguridad de D'Auvergne.
Los capitanes no se habían unido a sus hombres cuando las trompetas de Baynard sonaron.
Otro sonar de las trompetas, y William supo que otra tanda de soldados de Baynard había sido despachada. Saltó sobre el lomo de su caballo, avanzando por detrás de los árboles hasta encontrar el campamento de Baynard. Desmontó , y con la espada en mano se aproximó a una de las tiendas y con cautela entró.
— Hijo de puta traicionero! — William gritó al encontrarse con Titus.
— Guardias! — el otro gritó, acobardado.
William vaciló por una fracción de segundos, para decidir si avanzaba sobre Titus o si corría a su caballo. La segunda opción le pareció a mejor cuando vio un grupo de hombres armados entrando en la tienda. William subió al caballo, disparando hacia el campo de batalla para dar la señal de retroceder.
— Retroceder! — él gritó, pero nadie parecía oírlo . Un irlandés lo atacó, pero William clavó la espada en el pecho de un soldado. A continuación vio a Baynard a la distancia, detrás de un grupo armado. Si pudiese tomarlo, luego tal vez los soldados ingleses retrocederían. Pero el mar de hombres que lo separaba de Baynard parecía inmenso, dificultando el avance.
— William. Aquí. — Era la voz de Garrick que lo llamaba. William derribó otro hombre que lo había atacado mientras intentaba aproximarse a su compañero.
— Garrick, esto es una trampa. Debemos retroceder.
— Atrás tuyo ! — Garrick gritó.
Pero William no había oído el aviso del capitán cuando Angus de repente apareció en su camino. El gigante pelirrojo levantó la espada, y entonces cortó el cuello del caballo de William. A continuación , ambos, caballo y caballero cayeron al suelo.

Angus tomó una manzana de la bandeja que estaba sobre la mesa más próxima.
— Creo que fuimos unos imbéciles — él habló con la boca llena, mirando a Baynard. — Con tu ejército habríamos acabado con ellos. A esta altura ellos ya deben estar atrás de la empalizada. Los otros hombres que se quedaron para cuidar de la seguridad de la perra acabarán con tus hombres y con los irlandeses, en caso que intenten acercarse a la empalizada. — le dio otra mordida a la fruta suculenta.
— No me interesan los escoceses . Sólo D'Auvergne. Les envié una propuesta muy tentadora , garantizándoles un viaje segura de vuelta a Escocia con sus mujeres y niños. Después que el ejército escocés haya abandonado a lady Elise, ella no tendrá otra alternativa mas que casarse con mi hijo. Eso es , si quiere continuar viviendo en su amada D'Auvergne. Mientras tanto, enviaremos un mensaje a MacDiarmid, pidiendo un rescate por el muchacho. El tiene oro suficiente como para enriquecernos a todos nosotros. Estás seguro que MacDarrin está muerto?
— Si . Recibió un flechazo en el hombro. — Angus dio otra mordida a la manzana , pero cuando vio la mitad de un gusano lanzó la fruta lejos . — Maté al caballo de William y él quedó atrapado debajo del animal. Ningún hombre que haya perdido tanto sangre puede sobrevivir a eso .
Titus concordó.
— Si alguien se entera que traicionamos a nuestra gente, nuestra vida no valdrá más que esa manzana podrida .
Baynard levantó las cejas.
— Quién puede contarles eso ?
— Robbie — Titus respondió nerviosamente .
Baynard se levantó, y con las manos hacia atrás, miró por la ventana.
No creo que el muchacho sobreviva y pueda contarle al padre.
Catherine Baynard permaneció callada, escondida detrás de la cortina pesada que la separaba de su marido. Rezó para que el soldado herido hubiese muerto antes de llegar al suelo, pues morir lentamente debajo del peso de un animal era algo horrible . Respiró profundamente y dejó la protección de su escondrijo.
— Mi lord . — Se detuvo en medio de la frase, fingiendo sorpresa.
— Perdona la intromisión. No sabía que estabas con ... — Miró al pelirrojo mugriento y su compañero desgreñado, luego se volvió hacia su marido nuevamente — ...visitas.
Angus y Titus la saludaron con un asentimiento de cabeza.
— Los señores son escoceses? — Catherine preguntó, sonriendo para atenuar la pregunta. — Pensé que estábamos en guerra contra los escoceses.
— Estos hombres son nuestros aliados. Ellos nos ayudaron a derrotar a William MacDarrin. — Baynard sonrió triunfalmente . — Pronto D'Auvergne será de Matthew.
— Si ? Quién puede asegurar eso? Cómo mi lord puedes cree que estos... estos dos pueden ayudarnos con la conquista definitiva de D'Auvergne?
— Es muy simple . MacDarrin murió en combate, dejando D'Auvergne sin un lord y lady Elise viuda, sin un hombre para protegerla.
— Entiendo — Catherine dijo con reservas. — Pero qué te hace pensar que ella aceptará casarse con Matthew? Seguramente debe estar de luto por la muerte de su marido. El rey le dará por lo menos un año para que resuelva si quiere o no casarse nuevamente.
— Hay algo que no sabes — Baynard dijo. — Mi cómplice — él señaló a Angus — me aseguró que el matrimonio de lady Elise con el escocés fue forzado. Envié una carta al rey explicándole los hechos y todos los conflictos de esta región y los continuos ataques que D'Auvergne ha sufrido, será mejor para lady Elise casarse cuanto antes con Matthew. Después de casados, nuestro hijo expulsará a los últimos escoceses y sellará la posesión de la propiedad para la corona inglesa bajo a mi bandera. Ningún de nuestros vecinos se atreverá a desafiarme con el respaldo del rey, qué te parece?
Catherine arqueó las cejas.
Muy inteligente, mi lord . Al insistir en la seguridad de la lady, te aseguraste una esposa para nuestro hijo, y una gran fortuna. — ella levantó la copa para un brindis , y observó a los dos escoceses chocando sus jarros con cerveza y bebiendo con avidez. — Si me dan permiso, tengo que ocuparme de los preparativos de nuestro cena .

No hay comentarios: