viernes, 2 de abril de 2010

TREINTA DIAS - CAPITULO 25 - MELISSA MAYHUE

CAPÍTULO 25


El sol brillaba en la ventana abierta y el fuego había sido atizado cuando Cate abrió los ojos y se desperezó en la cama enorme, respirando profundamente . Amaba ese olor. Había tenido un sueño maravilloso y había dormido muy bien . Se desperezó otra vez y se enderezó . Saliendo lentamente de la cama, se lavó y se vistió rápidamente, y yendo hacia las escaleras.
Se detuvo brevemente fuera del cuarto que quedaba justo debajo del de ella, pero la puerta estaba cerrada. Contuvo la respiración y apoyó la oreja en la puerta, pero no oyó sonidos del otro lado. Decepcionada, continuó bajando las escaleras. El salón donde habían comido la noche anterior también estaba desierto .
Miró a su alrededor , tratando de decidir qué hacer, cuando oyó a alguien entrando . Janet la observó desde el otro lado del salón .
"Puedo traerle algo, Lady Cate?" La chica hizo una reverencia.
No, eso no era correcto .
"Buenos días, Janet. Simplemente llámame Cate. Dónde están todos ?"
Los ojos de la chica se abrieron con sorpresa. "Los hombres están trabajando afuera , mi lady . Mi mamá y yo estábamos en la cocina."
Cate se acercó a la chica y tomó su mano. " Me mostrarás donde queda la cocina ?"
Un exquisito olor a pan horneado venía de un cuarto más allá del salón . Margaret parada cerca una gran olla colgado sobre una chimenea abierta que ocupaba casi una pared entera .
La mujer levantó la vista cuando entraron y parecía azorada. "Janet. Por qué trajiste a mi lady aquí?"
Cate se rió. "Por favor, Margaret. No es culpa de Janet. Yo le pedí que me traiga a la cocina." Cate cerró los ojos y olió ruidosamente. "Hummm. Huele maravilloso. Espero que no les moleste tenerme aquí ."
Margaret sonrió relajándose . "Gracias, Lady Cate. No es una molestia. Todo este castillo será suyo para mandar lo que quiera en pocos días , así que es bienvenida a ir a donde quiera . Le gustaría que le prepare el desayuno ?"
"Realmente estaría encantado si ambas simplemente me llamasen Cate. El ' Lady ' es una cosa que me pone incómoda." Ella les sonrió abiertamente.
Para su sorpresa, Margaret se rió. "Bien , Connor me advirtió que usted no era lo que uno puede esperar, siendo una extranjera ... . Y me da gusto decir que él tenía razón . Yo Diría que él ha hecho un muy buen trabajo al elegirla como esposa , no estás de acuerdo, Janet?"
La muchachita se rió nerviosamente, y tomó una cuchara para ayudar a su madre con la comida.

Margaret fue hacia una mesa, donde empezó a cortar duraznos y a lanzarlos en una cazuela.
" Son duraznos frescos?" Qué pregunta tan estúpida. Los podría oler desde la otra punta del cuarto. " Puedo agarrar uno?"
Cate no había visto frutas frescas desde que
había llegado aquí.
Se sentó en un banco en un rincón , comiendo el melocotón, más contenta de lo había estado en días, sabiendo que este sentimiento no duraría mucho . Pronto tendrían que regresar a Dun Ard. " Saben dónde está Connor?"
"Él salió temprano con los otros hombres. Dijo que estarían de regreso para el almuerzo."
"Si ? Bien, supongo que tengo algo tiempo disponible entonces. Hay algo en que pueda ayudarlas?"
Janet dejó caer la cuchara, y los dos miraron a Cate con sus bocas ligeramente entreabiertas. Margaret se recuperó primero.
"Nada , mi querida. Por qué no exploras el lugar ? Empieza a conocer tu nueva casa . Los huertos están pasando esa puerta, si te interesa."
"Oh. Huertos. Con verduras?"
Margaret asintió . "Sí. Y las hierbas medicinales de Lady Rosalyn ."
"Genial! Digo, sería muy agradable . Gracias."
Cate se levantó del banco y se apresuró a cruzar la puerta. Eso era realmente genial. Exploraría el lugar y descubriría qué demonios cultivaban para hacer que Connor oliese a limón ,porque no podía ser limón .
Toronjil.
Crecía en una esquina del huerto de hierbas. Ese era el perfume del jabón. Y de Connor. La menta crecía también allí , delante del romero, la manzanilla y el perejil, solamente para nombrar algunos.
Cate se detuvo para cortar unas hojas, aplastándolos en su palma para sentir el aroma. Si pudiese quedarse allí en vez de en Dun Ard, seguramente podría una taza de té la hierba, y eso sería casi tan bueno como consumir cafeína .
El área del huerto estaba rodeada por un muro de piedra . Un arroyo pequeño corría mas atrás siguiendo la dirección del muro. Había un banco de piedra a la sombra de un árbol, y fue allí que Cate pasó la siguiente hora. El sol matutino, sumado a los olores de las hierbas , la relajó completamente.


Se apoyó contra el tronco del árbol y olió el toronjil y la menta que tenía en la mano. El aroma le trajo recuerdos de Connor. De como lo había visto con la luz del fuego brillando contra su pecho desnudo la noche anterior. Había necesitado toda su fuerza de voluntad para cubrir esos músculos magníficos con la manta en vez de con sus manos. El hombre tenía un cuerpo que le inspiraba sueños como el que había tenido anoche .
Eventualmente la curiosidad la venció y Cate regresó a la cocina. Margaret la mandó a explorar otra vez, y después de recorrer el salón y los cuartos de ese piso, Cate se dirigió a la puerta de entrada y la gran escalera de madera que la llevaría al patio.
Desde lo alto de las escaleras, ella lo vio inmediatamente.
"Mi lady te anda buscando , Connor." Ewan sonrió abiertamente .
Connor se enderezó y se secó el sudor de la cara con el dorso de su mano .
Habían estado reparando el cerco de los caballos desde horas tempranas de la mañana. Había esperado que el trabajo arduo lo ayudase a sacarse a Cate de su mente .
No lo había logrado .
Al menos aquí afuera, Connor había pensado, podría evitar el enfrentamiento inminente sobre su decisión de permanecer en Sithean Fardach. Ya había tomado la decisión , y aunque consideraría la reacción de Cate , su decisión no estaba en debate . La seguridad de Cate era la única consideración. Ella había estado furiosa con él durante la última semana. Otro pocos días de furia no importarían. Pero por alguna razón le importaban . Por eso la había estado evitando.
Y ahora, aquí estaba ella . De pie en lo alto de la escalera, una brisa suave agitaba su cabello . Esa misma brisa también ondulaba sus faldas, exponiendo solamente la parte inferior de sus piernas.
Recordando el acercamiento de ella de anoche sintió el efecto de la lujuria nuevamente .
Cate ya lo había visto , miraba en su dirección. Lo saludó con la mano e inmediatamente bajaba corriendo las escaleras, venía hacia él. Ya no podía evitarla . Tendría que confrontarla con la noticia de que ella se quedaría aquí hasta la boda.
Secándose las manos en el plaid, Connor caminó hacia ella. Cate se veía feliz esa mañana. Supuso que eso cambiaría pronto.

"Buenos días, Connor. Tienes una casa hermosa. He estado disfrutando del huerto ."
"Cate." Él asintió . "Me encanta que te agrade." Él hizo una pausa y se miró los pies. "Planeaba ir a verte tan pronto como me lavase un poco."
" Vamos a partir pronto?"
Realmente no podría encontrar su mirada . "Bueno, eso es algo que iba a conversar para vos ... ." Él tomó su brazo y empezó a guiarla hacia el otro lado del patio. Cate rara vez se expresaba en voz baja . Pero no quería exponer a Ewan para a la discusión que estaba por venir. "He pensado otro acerca de eso."
Ella se detuvo, obligándole a detenerse o llevarla a la rastra.
" Y qué pensaste ?"
Connor lanzó un suspiro . "Alguien ha intentado lastimarte al menos dos veces que sepamos.
En la casa de mi tío, no puedo estar seguro de lo que sucede . Es demasiado grande y hay muchas personas allá. Aquí puedo cerrar las portones y sé exactamente quien sale y quien entra ." Él levantó la vista y esperó.
"Bien . Y … qué?" Su frente estaba arrugada, la sonrisa había desaparecido .
"No tengo ninguna prueba de quién está intentando dañarte , Cate. No quiero que estés con tantos desconocidos cuando cualquier de ellos podría ser el atacante , entiendes? "
"No. Creo que no . Exactamente qué estás tratando de decirme?"
Movía su peso de un pie a otro ahora. Mala señal. Tendría una reacción violentamente pronto.
"Mandé a Duncan a Dun Ard al amanecer. El ha ido a buscar tus cosas y a Mairi para acompañarnos." Connor enlazó las manos detrás de su espalda . "Y vos te quedarás aquí hasta la boda, y esa es mi decisión final. No habrá ninguna discusión sobre eso." Él miró sobre su cabeza. Estaba listo.
O eso creía.
Su cuerpo casi perdió el equilibrio cuando sus brazos se colgaron alrededor de su cuello. Cate lo besó en la mejilla, sonriéndole abiertamente.
"Oh, Connor, esa es una gran noticia!." Ella lo abrazó nuevamente. "Muchas gracias." Cate bajó de un salto, levantó sus faldas y corrió hacia las escaleras.
"Un momento. A dónde vas?"


" Té." Ella le gritó, riéndose sobre su hombro. "Voy a preparar té."
Bendita cafeína! Te levantaría un altar aquí mismo ...

Connor sacudió la cabeza asombrado. Esa mujer nunca cesaba de sorprenderlo.

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