TREINTA DIAS - CAPITULO 28 - MELISSA MAYHUE

CAPÍTULO 28



La mañana amaneció con un cielo gris y brumoso. Sin poder dormir, Cate la observó llegar.
Se sentía tan triste como la imagen fuera de la ventana.
Mientras la noche anterior había requerido una fiesta de despedida de soltera, esa mañana pedía a gritos una fiesta de piedad.
En algún del camino, la vida había dado un giro decididamente injusto . No era que ella esperase justicia de la vida, pero su situación actual era muy, muy injusta.
En unas horas se casaría con el hombre que amaba. El mismo hombre que no la amaba, que nunca correspondería su amor . Oh, Connor la deseaba, no dudaba de eso, pero el amor no estaba en su planes. Él estaba marcado por el honor y el deber , y estaba determinado a enviarla de vuelta a su casa, como le había recordado anoche. Connor había sido honesto desde el principio - no quería estar comprometido definitivamente con ninguna mujer. Y aun si ella de alguna manera podría llegar a aceptar esas condiciones , podría llegar a amar alguien que nunca la amaría en respuesta, no tendría importancia porque ella iba a ser despachada muy rápidamente , para no verlo nunca más .
Lanzó un suspiro , enderezándose en el borde de la cama. Algunos días no valían la pena levantarse . Una sonrisa se curvó rápidamente en sus labios cuando pensó en la camisa que usaba para dormir en su casa. Qué pensaría Connor si pudiese verla con esa camisa ? Apenas le cubría el trasero.
Las brasas todavía ardían en la chimenea, y con sólo un poco de esfuerzo, Cate pudo atizar llamas. Puso su taza con agua para hervir y esperó.
Cuando el agua hirvió, la vertió en su taza y el resto la puso en la palangana sobre la mesa para lavarse la cara.

"No voy a estar lista para cuando Rosalyn y Mairi lleguen si no dejo de soñar despierta con ese hombre."
Había acabado de lavarse la cara cuando el primer golpe sonó en la puerta.
Era Mairi, trayendo la guirnalda que ella y Rosalyn habían terminado la noche anterior.
Habían trenzado cintas color marfil a las flores de brezo , lavanda y otras hermosas flores blancas que Cate no pudo identificar.
Rosalyn llegó un poco después que Mairi. Juntas ayudaron a Cate a ponerse el vestido de novia . El vestido era de un raso antiguo color marfil, sin mangas y con cintura imperio. Estaba todo cubierto con un antiguo encaje color marfil. Poseía diminutos botones de perla en la espalda. Cate entró perfectamente en el vestido , debía haber perdido los tres kilos de exceso .


" Nunca había visto un vestido como este ." Mairi habló con admiración , extendiendo la mano para tocar la tela .
"Sí, es una novia muy linda ." Rosalyn asintió , colocando la guirnalda en su cabeza y empezando a trenzar el cabello de Cate alrededor en la guirnalda para mantenerla en su lugar.
"Oh, un Momento." Quitando la guirnalda fuera de su cabello, Cate corrió a la cama, buscando frenéticamente debajo sus almohadas hasta que encontró lo que quería.
"Aquí está." Ella extendió la tira de tela del plaid de Connor. Mairi lo había traído con todas las otras cosas de su cuarto en Dun Ard .
"Me gustaría entrelazar esto con las flores antes de colocar la guirnalda . Piensan que podemos hacerlo? Quiero que sea bien visible"
Rosalyn asintió con satisfacción. "Sí, muchacha. Estoy segura que podemos hacerlo."
Mairi tomó la gargantilla de esmeralda de la mesa y comenzó a levantar el cabello de Cate.
"No. No puedes ponerme eso ."
"Pero debes usar el regalo de compromiso el día de tu boda."
"Oh, tengo intención de usarlo para la boda. Es sólo que prefiero que alguien me ayude a ponérmelo. Alguien muy masculino." Ella sonrió y Mairi abrazó a Cate, besando su mejilla.
"Me hace feliz que vayas a ser mi hermana. Vos sos exactamente lo que mi hermano necesita para ser feliz por el resto de su vida." Mairi la abrazó otra vez y fue hacia la puerta delante de ellas.
Cate intercambió una mirada con Rosalyn antes de salir. ¿El resto de su vida?
Sólo que su propia vida estaba limitada a un día mas. Cuando ella regresase a su casa, Connor ya no … no lloraré. Ese sería su mantra para el día de hoy.
Ella siempre había querido tener una hermana que fuese su mejor amiga. Ahora que estaba tan cerca de tenerla ....
En las siguientes veinticuatro horas, iba a perder a su mejor amiga y el candidato apropiado.
A pesar de su mantra, la amenaza de lágrimas ascendió en su garganta mientras bajaba las escaleras.
Connor estaba tan guapo parado allí que ella apenas pudo respirar .
Él estaba el salón, jugueteando con el broche de esmeralda sobre su hombro. Cuando levantó la vista y le sonrió , Cate momentáneamente se detuvo en seco . Había pensado que él era guapo ? Ese hombre era verdaderamente magnifico.
Cate fue hacia él, ajustando el broche que sujetaba el plaid.
"Tu turno, ahora. Me gustaría que me ayudes con esto, por favor." Ella le dio la gargantilla.
"Les voy a pedir un momento a solas con mi novia, si no les importa." Él lo dijo en voz baja , moviéndose para pararse delante de Cate.
Todos dejaron el salón para ir al patio.
Él pasó un dedo a lo largo de la tela escocesa en la parte delantera de la guirnalda y arqueó una ceja.
Cate se rió con su expresión arrogante.
"Sí. Decidí que hoy sería el momento más apropiado para usar su marcador de territorio nuevamente. " Ella
retrocedió un paso y giró para él. " Qué piensas ? Estoy bien?"
Su cara era solemne cuando se acercó .
"Quise decir estas palabras anoche, Pequeña Caty . Sos una mujer bella y sos una novia bella. Y , ese vestido, aunque es muy inusual , le sienta muy bien a la mujer inusual que lo usa."
Él levantó la mano . " Tengo algo que pedirle en nuestro día de la boda. Me lo concederás ?"
"Lo que sea que quieras, Connor. Sólo tienes que pedirlo."
"Aunque esto no es algo real, va a ser el único día de boda que voy a tener en mi vida ." Connor agarró su mano con fuerza . "Egoísta como puede parecer, no puedo soportar la idea de casarme con una mujer que usa el regalo de compromiso matrimonial de otro hombre. Te lo quitarás por mí, Caty? Solamente por este día."
El anillo de Richard. No había pensado en eso. Las lágrimas que había reprimido comenzaron a rodar lentamente por sus mejillas ahora. Cate quitó las manos de su asimiento y retiró el anillo del dedo, cumpliendo el pedido de Connor.
Luego el secó las lágrimas con sus pulgares.
"Gracias." Él dijo suavemente. "No quería causarte dolor. Guardaré el anillo y te lo devolveré mañana." Él la miró con ojos tristes.
"Mis lágrimas no son por el anillo, Connor. Son solamente … porque." Ella se encogió de hombros.
Cómo decirle que las lágrimas eran por él? Las lágrimas que no podía detener porque Connor creía que esa boda no eran real , porque ella pronto lo dejaría para siempre, porque lo amaba y él no la amaba. Cate lanzó un suspiro .
"Tu cara parece un poco irritada esta mañana. Te la afeitaste como hiciste con tus piernas ayer?"
Ella tomó su brazo, agradecida por el cambio de tema que le daba tiempo para componerse.
"No, no hice. Pero si vos hubieses estado afeitado anoche, mi cara no estaría tan irritada esta mañana."
Un rubor trepó por el cuello y la cara de Connor. Luego se rió y continuó riéndose mientras bajaban los escalones de entrada del castillo.



Un gran gentío rodeaba la iglesia cuando llegaron. Cate reconoció a la familia de Connor , y a unas cuantas personas de Dun Ard. Ella y Connor se acercaron al sacerdote que los esperaba fuera de la iglesia. Su corazón latía tan ruidosamente que Cate se sintió asombrada de que el clérigo no pudiese oírlo desde donde estaba parado .
La ceremonia tuvo lugar afuera , en los escalones del portal de la capilla. La niebla se había disipado y el sol brillaba intensamente, devorándose las nubes grises. La ceremonia en sí fue un borrón. Sólo recordaba haberse quedado mirando los ojos de Connor todo el tiempo .
Excepto por los anillos. Cate sabía que los anillos de boda no formaban parte de las bodas medievales, entonces no había esperado recibir un anillo . Pero lo hizo . Connor suavemente levantó su mano y colocó un pesado anillo de oro en su dedo. Volteando su mano, él colocó una alianza de oro en el centro de su palma. Luego extendió su mano y esperó que ella colocase ese anillo en su dedo. Cate lo hizo con manos temblorosas. La mirada en su cara de ese momento quedaría en su memoria para siempre.
Connor le sonrió, agarrando su mano con fuerza durante el resto de la ceremonia, la cual terminó antes que ella se diese cuenta. Gritos y una ovación estallaron alrededor de ellos mientras caminaban para buscar el caballo.
Cuando Connor repentinamente se hincó sobre su rodilla, Cate inmediatamente supo que el hombre delante de ellos debe ser el Rey Alexander III . Ella hizo su mejor reverencia y inclinó respetuosamente la cabeza, pero no pudo resistirse a atisbar para ver al hombre.
El rey hizo que Connor se pusiese de pie y le dio un gran abrazo, mientras palmeaba su espalda. Él era más bajo que Connor y más joven de lo que ella había esperado
"Bien hecho, MacKiernan. Muy bien hecho . Ella es preciosa."
"Gracias, su alteza." Connor inclinó su cabeza.
"Veamos ." Alexander levantó el mentón de Cate con el dedo índice y, con gran entusiasmo, y se pronunció " Una hermosa muchacha para un caballero valiente " .
Sus palabras hizo rugir a la multitud nuevamente.
El rey se dio vuelta para hablarle a Connor.
"Sin duda ella te dará muchos hijos espléndidos." Luego se rió. "Y como no tengo duda que no querrás volver a mi servicio con esta mujer en tu casa , espero que te pongas a fabricar nuevos guerreros MacKiernan para poner al servicio de mi hijo, Alexander."
Todos gritaron y rieron mientras el rey palmeaba a su marido.
Connor levantó a Cate para ponerla sobre el caballo y las personas marcharon colina arriba hacia Dun Ard.
La música de las gaitas y las flautas llegaba flotando hasta ellos antes de que alcanzasen el castillo. Las largas mesas comida estaban preparadas en el patio, ya siendo ocupadas por aldeanos y campesinos que se unían a la celebración.
Personas bailaban en los espacios libres entre las mesas levantaron sus jarros en brindis para la pareja cuando ellos pasaron.
Había más músicos tocando dentro del castillo. El rey, en vez de Artair, estaba sentado en el centro de la mesa principal sobre la tarima . Artair estaba ubicado a un lado del rey y Connor fue puesto del otro, con Cate a su lado .
No pudo localizar a Rosalyn, pero vio a Blane sentado a unas pocas sillas de su padre. Como siempre, él la observaba con una intensidad que ella encontraba inquietante. Sus ojos se encontraron, él inclinó la cabeza ligeramente y levantó su copa en reconocimiento. Cate rápidamente desvió la vista.
Lyall se acercó, se inclinó en una reverencia profunda sobre su mano antes de besarla. La felicitó y luego abrazó a Connor .
Lyall había estado buscando a Mairi y preguntó si sabían a dónde estaba. Sólo entonces se le ocurrió a Cate que no había visto a la chica desde la llegada a la iglesia . Connor murmuró algo acerca de buscar sus zapatos.
Cate esperaba que el rey no la hubiera visto descalza o su nueva hermana sería castigada.

Connor se sentía alerta y tenso, incapaz de relajarse ni por un minuto. Después de tantos años, casi se sentía vulnerable sin Duncan cuidando su espalda , pero su amigo viejo tenía una tarea especial para ese día. Pero había otros hombres aquí, hombres en quienes Connor confiaba y en quienes podía depender si fuese necesario.
Constantemente escudriñaba los grupos de personas, preguntándose si harían otro intento contra la vida de Cate . No permitiría que ella se alejase de su vista ni por un minuto. No les facilitaría las cosas.
Cate estaba sentada a su lado , comiendo silenciosamente.
Le había costado mucho , verdaderamente había sido un golpe a su orgullo, pedirle que se quitase el anillo que usaba.
El anillo de Richard. Aun ahora sentía el peso de ese anillo en la bolsita de cuero colgada en su cintura.
Cuando ella se lo había quitado y se lo había dado a él, sus lágrimas sólo habían confirmado lo que él debería haber recordado todo este tiempo. Cate pertenecía a otro hombre, un hombre de riqueza y poder a quien había
elegido . Igual que su madre, igual que Anabella.
Y el hecho que ellos casi se hubiesen acostado la noche anterior no cambiaba eso. Había recobrado el control de su cuerpo traicionero justo a tiempo. Ahora estaban casados. Y muy pronto ella se marcharía; no más Cate, no más tentación. Sólo tenía que mantenerla segura hasta entonces y su deber para con ella estaría cumplido .
Las celebraciones duraron hasta altas horas de la noche y Cate sentía el efecto de haber dormido tan poco la anterior noche cuando Artair se acercó a ellos.
Connor se puso de pie y sacudió la cabeza a forma de saludo . "Tío."
"Sobrino. Creo es tiempo que tu esposa conozca a algunos de mis invitados."
El hombre fue hacia ella, pero Connor se interpuso entre ellos y le tomó la mano, ayudándola a ponerse de pie.
"Ella no irá a ninguna sin mí ."
" A ninguna parte?" Anabella se había acercado inadvertidamente , y ahora agarraba el brazo de Artair, dándoles una sonrisa empalagosa. Como siempre, su tono era despreciativo. "Seguramente le vas a permitir tener algo de privacidad, Connor. Ni siquiera puede ir al baño sin vos?"
"A ninguna parte, " él respondió firmemente. "Ni siquiera al baño." Connor sonrió, aunque sus ojos se estrecharon y no había humor en su mirada. "No en este día."
Él se dirigió a su tío, el brazo de Cate firmemente enlazado en el suyo. "Adelante, Tío. Conoceremos a tus invitados ."
"Muy bien, si insistes." Artair no parecía particularmente contento. Sus ojos brillaron extrañamente.
Artair los condujo hacia un hombre enorme que Cate había notado más temprano esa noche . Tenía cabello largo y rojizo que parecía enredarse con su barba bastante rojiza. Ambos estaban veteados con canas grises. La cerveza goteaba de su barba . El olor de su cuerpo sin bañar golpeó fuertemente a Cate cuando se acercaron.
El hombre apoyó con un golpe el jarro sobre la mesa y levantó la vista. "Era tiempo que me trajeses a la muchacha para inspeccionarla . Dale un besito a MacPherson , muchacha, " él gritó y una serie de risas lo acompañó desde su mesa. Trató de alcanzar a Cate, pero fue detenido por una mano firme en su muñeca.
"No lo creo, MacPherson. Nadie pondrá una mano en mi esposa , y ciertamente ella no besará a nadie ."
Los ojos de Connor lanzaron un destello peligroso . Una grupo de hombres se acercó a la mesa.
" Este es un amigo , MacKiernan?" El hombre que había sido presentado a Cate como Robert sonrió .
Todavía sosteniendo la muñeca de MacPherson , Connor hizo las presentaciones. "Éste es MacPherson, lord del Clan MacPherson. Y éste es Robert MacQuarrie, uno de los centinelas del rey y un amigo mío." Él soltó la muñeca, empujando a Cate detrás de él .
MacPherson sacudió su mano , su cara estaba púrpura de con rabia. Se puso de pie , volteando varios platos de la mesa en el proceso de levantarse . Se dirigió a Artair, quien se encogió ante la furia de ese hombre.
"Hemos terminado con la celebración , MacKiernan. No olvides que tienes una deuda conmigo. Te esperaré hasta tu cumpleaños y ni un minuto más . Luego vendré a reclamarla. O a sacarte el pago a la fuerza." Él escupió a los pies de Artair y se marchó.
La mayoría de los hombres en la mesa se pararon y se fueron con él, todos murmurando y abriéndose paso a los empujones por el salón con una rudeza innecesaria. Artair los siguió con la mirada por un momento y luego se fue corriendo en dirección opuesta.

Robert se rió . "Bueno, sin toda esa gente habrá mas comida y bebida para nosotros."
Connor sonrió, una sonrisa genuina esta vez, posando su mano en el hombro del otro hombre. " No necesitaba tu ayuda, Robbie, sabes? Pero estaba me alegra que te hayas acercado de todos modos."
"Sí, bien. Sé que no me necesitabas, pero Alexander se comporta como una gallina clueca a veces.
¿Qué podía hacer? Yo voy a donde mi rey me envía."
Ambos hombres se rieron . Robert se inclinó delante Cate en una reverencia y retrocedió .
" Ese era MacPherson? Ese viejo gordo y repugnante a quien Artair quiere entregar a Mairi?" Todavía no podía comprenderlo .
"Sí, ese es el hombre. Pero que no te preocupes . Eso no ocurrirá, y todo gracias a vos. Artair va a tener que encontrar otro modo de pagar sus deudas que no sea con mi hermana."
Él la acercó y murmuró en su oído , su aliento causándole escalofríos en todo el cuerpo. "Deberíamos tratar de escapar ahora. Todos están ocupados y tendremos la posibilidad de escabullirnos mientras están distraídos por la bulla de los MacPhersons." Él parecía sombrío mientras se dirigían a la puerta.
"No entiendo. Por qué necesitamos escabullirnos?"
"Oh, Dios, se nos pasó el tiempo , " él murmuró mientras miraba fuera de la puerta. "Lo siento, Caty, quería salvarte esto." Él pronunció eso último con una sonrisa, y entonces fueron rodeados por un gentío muy animado.

Los dos fueron levantados en andas y llevados a la parte trasera de una carreta cargada con paja. El caballo de Connor estaba atado al carro. Algunas personas a caballo, y otras a pie, marcharon detrás de la carreta como comenzaba a atravesar el patio. Otra carreta llevaba a los músicos e invitados muy animados por el alcohol .
" Qué pasa aquí? A dónde están llevándonos?" Cate se vio forzado a gritar para hacerse escuchar sobre el bullicio.
La carreta tomó un surco particularmente profundo y ella se vio lanzada sobre el regazo de Connor.
" Tranquila, muchacha! Ten paciencia! . Nada de tocar la mercadería por ahora, muchacha. Esperarás hasta que salgamos del castillo, " un viejo le gritó desde su caballo . La multitud festejó el chiste de mal gusto con risas.
Connor sonrió tímidamente mientras la ayudaba a sentarse en el banco . "Nos están escoltando a la cama.
La celebración dura hasta que el matrimonio sea consumado."
Por qué mierda ese tipo de detalles no estaba escrito en los libros de historia medieval de la universidad? Menos mal que se había afeitado ...
Ante su mirada de horror, Connor soltó una carcajada. "No te asustes, pequeña Caty . Yo no los dejaré mirar."
Ella lo observó con incredulidad. El hombre realmente se estaba riendo . Iban camino a una .. orgía ... y él disfrutaba de esa locura tanto como todas esas personas.
Su risa se transformó en una sonrisa seductora y él se inclinó para besarla .
Cate se deshizo de sus preocupaciones. Pronto su lengua bailaba sobre la de ella y Cate no podía pensar en nada mas que en él y en la forma que sabía sus manos recorrerían s su cuerpo.
En ese momento, no había nada en el mundo mas que Connor y su cuerpo al lado del de ella.